El retorno de Rosberg
Este año se celebraba la edición número 25 del GP de España en el circuito de Montmeló, las bodas de plata. El circuito se lleva usando desde 1991 cuando el tío Bernie, harto de ver las gradas vacías de Jérez, pasó el GP a Montmeló pese a tener contrato con Jérez.
Este circuito, con una recta de 1047 metros auguraba, a
priori, las puntas más elevadas del campeonato. Pero debido a las numerosas
curvas rápidas los coches llevan mucha ala, y su velocidad punta quedó en
apenas 315 km/h en su primer año. Los mejores registros, una década después,
llegaron a más de 335.
Este circuito se caracterizó por su enorme dificultad a la
hora de adelantar, cosa que empeoró con el paso de los años pese a los intentos
de los propietarios del circuito por cambiar eso con sucesivos cambios de
trazado. Por tanto, esta carrera fue, lamentablemente, de las más aburridas del
calendario.
La primera edición la ganó Nigel Mansell con el Williams
Renault y es recordada por su duelo rueda con rueda, separado por un puñado de
centímetros durante toda la recta de meta, con Ayrton Senna.
Hubo otras ediciones interesantes, sobre todo las de 1992, 1996 y 1997. En 1992 fue impresionante la recuperación bajo el aguacero de Jean Alesi, quien con una tartana de Ferrari realizó tras un cambio de ruedas una remontada final de casi una vuelta sobre los líderes, llegando a rodar entre 3 y 4 segundos por vuelta más rápido (con Senna llegaron a ser 7) para acabar tercero. Un par de vueltas más y se ventila a Schumacher, y con cinco o diez habría que ver como de sobrado estaba Mansell para resistirle con su todopoderoso Williams-Renault FW14B “activo” (como sí los otros no lo fueran). Les recuperó casi un minuto, impresionante. Pero como no ganó, casi nadie lo recuerda.
Mansell Vs. Senna en 1991 |
Hubo otras ediciones interesantes, sobre todo las de 1992, 1996 y 1997. En 1992 fue impresionante la recuperación bajo el aguacero de Jean Alesi, quien con una tartana de Ferrari realizó tras un cambio de ruedas una remontada final de casi una vuelta sobre los líderes, llegando a rodar entre 3 y 4 segundos por vuelta más rápido (con Senna llegaron a ser 7) para acabar tercero. Un par de vueltas más y se ventila a Schumacher, y con cinco o diez habría que ver como de sobrado estaba Mansell para resistirle con su todopoderoso Williams-Renault FW14B “activo” (como sí los otros no lo fueran). Les recuperó casi un minuto, impresionante. Pero como no ganó, casi nadie lo recuerda.
Jean Alesi, Ferrari F92A V12 |
Lo que sí se recuerda es cómo en 1996 Schumacher logró la primera de sus 72 victorias al volante de un Ferrari, también bajo un aguacero. Primera victoria de un motor Ferrari V10, aunque al final, por problemas de encendido más bien sería un V9 o V8. Era tercero en parrilla, pero una mala salida le hizo acabar 6º la primera vuelta. Se abrió paso entre el pelotón y ganó con autoridad. Su único rival, Damon Hill, el más rápido en el Warm-up en idénticas condiciones y autor de la pole, se autoeliminó al poner reglajes de seco convirtiendo su Williams en un fuera borda.
Schumacher camino de su primera victoria con el Cavallino, luego llegarían 71 más. |
En 1997 el héroe fue Olivier Panis, quien con un modesto Prost-Mugen
Honda (Ligier en realidad) estuvo a punto de dar la campanada gracias a la
superioridad de sus neumáticos Bridgestone. De no haber salido 12º tal vez
hubiera ganado con tranquilidad. De cualquier manera, su carrera fue
excepcional.
Olivier Panis, Prost Mugen Honda |
Del resto de carreras hay poco que destacar, todas aburridas
procesiones, aunque todo el mundo quedó encantado con la victoria de Alonso en
2006. La llegada de Pirelli y sus neumáticos “caprichosos” poco consistentes
tal y como le pidió la FIA, animaron el cotarro y por fin, y con ligera ayuda
del DRS, se vieron carreras más animadas y con adelantamientos. 2013 fue
excelente con un Alonso imperial al volante de su Ferrari, ganando desde la 5ª
posición de partida. El recórd aquí, sólo él y Schumi (3º en 1996) han logrado
ganar sin partir de la primera línea.
Como viene siendo habitual en el GP que inaugura la
temporada europea, todos los equipos traían un aluvión de novedades, Ferrari de
los que más, aunque no parecieron dar el fruto esperado. Trajeron “peoras” como
dijeron en broma algunos. Lo cierto es que Vettel las usó y Kimi las desestimó.
De cualquier manera, todo quedó más o menos igual que antes. Mercedes, Ferrari
y Williams, en este orden, por delante de un muy apretado grupo en el que no
están los Manor. Aparte de las novedades mecánicas, las hubo estéticas a cargo
de Mclaren, que pintó sus coches con negro grafito y unas franjas rojas que,
además de estilizar el coche, recordaban su anodino logotipo.
Tampoco se libró Fernando Alonso de críticas venidas de
todos lados. Muy injustas a mi parecer, ya que de lo que se le acusaba
básicamente era de querer tener todo el equipo a su disposición. Es decir, lo
que todos los pilotos quieren. Otra cosa es que lo reconozcan. Pero se defendió
bien.
Este año la carrera fue un peñazo, y gracias a los
compuestos piedra de Pirelli los tiempos fueron lentísimos.
En los libres, lo más destacado fueron los muchos problemas
de motor (o unidad de potencia) de Red Bull y la dificultad de todos los
equipos de poner a punto los coches, salvo quizá, Mercedes. A pesar de ello,
Hamilton se marcó un trompo espectacular en la ya famosa curva 3 sin
consecuencias.
En la Q1 y por primera vez en la temporada no cayó un
Mclaren, sí ambos Manor con Stevens por delante de Merhi a los que se les
unieron el Sauber de Markus Ericsson y los Force India de Hulkenberg y Pérez,
tal y como ellos mismos pronosticaron.
Los Mclaren, que de nuevo parecían haber dado un pequeño
paso adelante (o quizá era mejor adaptación a la pista) no pudieron pasar de
ahí quedando Alonso 13º y Button cubriéndole las espaldas. Los Lotus de
Grosjean y Maldonado les precedían, y detrás de ellos el otro Sauber, el de
Nasr. No hay que caer en el error de pensar que Mclaren ha alcanzado a Sauber y
Force India, sino más bien de que en este circuito ambos monoplazas se han
adaptado, como se esperaba, peor. Logicamente, por presupuesto, medios y
pilotos (aunque los de Force India son excelentes) es de esperar que Mclaren
los supere más pronto que tarde.
A todo esto, los Mercedes a lo suyo, reservándose un juego
de blandos por si las moscas de cara a la carrera. Otro que lo hizo fue Vettel.
Y Raikkönen también, pero en este caso
haciendo su vuelta de calificación definitiva con gomas usadas. Fue 7º,
cuando tenía la segunda fila a tiro. Como se vió después, fue un error.
Vettel estuvo muy eficaz 3º, al igual que Bottas 4º,
precediendo a un excelso (y héroe del día) Carlos Sainz 5º y un no menos
excelente Max Verstappen 6º, Kimi 7º, Kvyat 8º, Massa 9º y Ricciardo 10. ¿Y los
Mercedes? En otra órbita, a lo suyo. Se hicieron con la primera fila como si
nada, aunque esta vez fue Rosberg quien dominó con autoridad sin dejar ninguna
opción a Hamilton.
La carrera se planteaba a dos paradas y viendo que para
hacerlas la mayoría de los pilotos se mantenía en pista haciendo unos tiempos
muy lentos, quedó muy claro que se trató de un error y que lo suyo hubiera sido
ir a tres. Pero no adelantemos acontecimientos.
En la arrancada Rosberg se mantuvo firme y no dio opción,
Hamilton dudó un poco y Vettel se le coló, Bottas se quedó dónde estaba
mientras que Verstappen superaba a Sainz. Raikkönen superó a los dos Toro Rosso
con excelentes exteriores a lo largo de las primeras curvas. Ciertamente, Kimi
está de lo más acertado este año en los primeros metros. Que dure.
Kvyat arrancó de pena y acabó el primer giro 13º tras
Alonso. Mehri era último tras ser obligado a dejar pasar a su compañero, a cual
había superado en la arrancada.
Rosberg era líder con autoridad y Hamilton, pese a tener más
ritmo, era incapaz de atacar a Vettel.
Verstappen y sobre todo, Sainz, perdían posiciones rápidamente ante
Massa y los Lotus, los cuales se llegaron a tocar dañándose el alerón trasero
de Maldonado y perdiendo posición Grosjean. Pero se recuperaron rápidamente.
Pastor Maldonado, Lotus. |
En cabeza, Hamilton se detuvo en la vuelta trece con
intención de adelantar a Vettel, y lo habría conseguido de no ser por su lenta
parada en 5”3. Vettel se detuvo a continuación y mantuvo la posición. Todo
transcurrió sin problemas, el último de los líderes en detenerse fue Raikkönen,
y del resto fue Alonso, que incluso llegó a parar más tarde que Sérgio Pérez
haciéndolo en la vuelta veintiuno. La carrera de Alonso estaba siendo excelente
teniendo en cuenta el material de que disponía. Todo lo contrario que Button,
cuyo coche era: ”el peor que he conducido en mi vida”.
Pero la carrera de Alonso no iría mucho más lejos al tener
que abandonar por problemas de frenos en la vuelta 25, cuando era 14º y rodaba
a casi 1 minuto de los líderes. Al detenerse en boxes casi se lleva
involuntariamente por delante a un mecánico por este motivo. El caso es que tal
y como iba declaró que podría haber acabado 8º o 9º. Un poco optimista en mi
opinión. Creo que acabar 12º a espaldas
de Verstappen es más realista.
Maldonado, autor de una brillante carrera también, perdió
muchas posiciones en boxes al tener que arrancarle los mecánicos la parte
dañada de su alerón trasero perdiendo toda opción a puntuar. Finalmente,
abandonó a causa del dichoso alerón. Menuda racha lleva.
En cabeza Rosberg a lo suyo, controlando a Vettel y Hamilton
detrás, mordiéndose las uñas por no poder adelantarlo. Ya que adelantar a
Vettel en pista era tarea casi imposible, decidieron cambiar de táctica pasando
de dos a tres paradas, para algo habían salvado un juego de blandos. Hamilton
se detuvo de nuevo en la vuelta 32 reincorporándose quinto tras Raikkönen, al
cual adelantó con pasmosa facilidad. En Ferrari decidieron mantenerse fieles a
la táctica inicial y no cubrieron posición, algo que parecía posible porque de
nuevo la parada de Hamilton fue lenta (casi 5”) y además encontró un poco de
tráfico. Craso error. El inglés, de vuelta rápida en vuelta rápida, dio cuenta
en apenas cinco vueltas de Bottas, y pocas más le hicieron falta para enjugar
los 23” de la parada extra con respecto a Vettel que tenía que hacer. El
segundo puesto era suyo.
Vettel paró por segunda y última vez en la vuelta 40 y su
ritmo con duros fue muy malo. Tan malo era que incluso habiendo cubierto
posición con una parada extra da la impresión de que Hamilton lo hubiese podido
pasar en pista. Pero al menos habría tenido una posibilidad.
Rosberg se detuvo en la vuelta 45, dejando momentáneamente
el liderato a Hamilton, liderato que recuperó cuando el inglés paró por tercera
y última vez en la vuelta 50.
Con los tres primeros puestos decididos estaba por ver si
Kimi, que en su primera detención puso duros (al contrario que el resto), iba a
poder con su compatriota Bottas. Los 11”
que llegó a tener el de Williams sobre el Ferrarista en la primera parte
de la carrera, se fueron reduciendo a poco más de 6” tras las últimas
detenciones de ambos. El rush final de Kimi le permitió dar alcance a Bottas,
pero en las últimas vueltas ni el uno ni el otro estaban muy sobrados de
neumáticos y Kimi en ningún momento pudo poner en peligro la cuarta posición de
Bottas.
Doblados por el duo de finlandeses estaban la parejita de
Toro Rosso. Carlos Sainz, muy hábil conservando neumáticos, mostró un ritmo
final fortísimo y adelantó con autoridad a su compañero (y favorito de los
jefes) camino del último punto… que se convertirían en dos cuando en la vuelta
final adelanto a su “hermano mayor” Kvyat, el cual, en su intento de mantener
la posición, a punto estuvo de causar el abandono de ambos.
La pareja de finlandeses, Bottas y Raikkönen, en su duelo final por la cuarta posición. |
En resumen: Rosberg cruzaba la meta victorioso logrando su primera victoria de la temporada y el enésimo doblete Mercedes desde 2014. Vettel completó el podio y por detrás: Bottas, Raikkönen, Massa, Ricciardo, Grosjean, Sainz, Kvyat, Verstappen, etc… Merhi fue décimo octavo y último.
En resumen, poco ha cambiado. Ferrari parece estar un poco
más lejos en un día en el que sus novedades parecieron no funcionar. Para que
haya campeonato, todos dependemos de que Ferrari sea capaz de tener la forma
que mostró en Malasia donde ganaron con autoridad. Pese a que todavía hay
quienes equivocadamente se creen que en Malasia la victoria vino dada por el
coche de seguridad, lo cierto es que no fue así, lo mismo que en las demás
carreras no pudieron estar a la altura de los Mercedes, ahí sí. Y si eso no se
repite pronto, el campeonato será cosa de dos. Nos quedamos en sus manos.
Respecto a Ferrari en esta carrera, debo comentar que me
parece absurdo calificar mal adrede (Raikkönen) por salvar un juego de ruedas
que luego no se usaron. Para eso, mejor calificas como es debido y Kimi hubiera
sido al menos cuarto en carrera. Claro que si tenemos en cuenta que el título
de constructores ya casi está en mano de Mercedes, salvo sorpresa mayúscula, y
que nadie cuenta a día de hoy con Kimi para el campeonato, el hecho de perder
algún que otro puesto menor no parece importar mucho. Aunque no debería ser
así.
Reb Bull y Toro Rosso con muchos problemas en sus motores
Renault, pronto empezaran a tener penalizaciones. De hecho, Ricciardo ya lleva
el cuarto y último motor permitido.
Excelente Carlos Sainz, Verstappen también y Merhi, ¿qué
decir? Soy de los que piensan que los equipos hacen los dos coches iguales,
pero en casos como el de este equipo, sin apenas medios, podría ser que el
coche de Roberto (que no paga) frente al de su compañero Stevens (que sí lo
hace) sea inferior. Menos potencia y peor chásis dicen que tiene el
castellonense. Tal vez sea cierto, porque Stevens lo está barriendo y lo cierto
es que Merhi no es nada malo; de hecho, el año pasado en la Formula Renault y
con menos participaciones, mantuvo en jaque hasta el final a Carlos Sainz. De
modo que malo no debe ser.
En quince días llega Mónaco, GP especial dónde los coches
corren de verdad, ya que allí este año podría caer el record absoluto de la
pista en poder de Kimi Raikkönen desde 2006 en 1.13”532. Teniendo en cuenta que
en el resto de pistas la diferencia es de 6 a 8 segundos, la cosa no está mal.
Se agradece que de vez en cuando caiga un record. No es normal la lentitud que
en los últimos años arrastra la F1.
Saludos.