Adiós
Por una afección coronaria, ayer día 27 de enero, falleció el ex-piloto y propietario del equipo de competición: “Campos Racing”, Adrián Campos a los 60 años de edad.
Nacido en la localidad valenciana de Alcira, al igual que el tetracampeón de motociclismo Jorge Martínez “Aspar”, el 17 de junio de 1960, Adrían Campos es recordado por correr en F1 en el equipo Minardi, al que llegó en 1987 llevando consigo el patrocinio de Lois. Por cierto, cuando se supo de su fichaje, alguién lo paró por la calle y le dijo: "a por Prost", y no de coña...
Sus padres, Adrián Campos Bialcanet y Carmen Suñer Picó, formaban parte de la alta sociedad valenciana y su abuelo materno, Luis Suñer, que era uno de los más importantes empresarios, fue secuestrado por ETA en 1981 durante tres meses, un secuestro que el presidente de entonces, Adolfo Suárez, tomó como un asunto de estado.
Con el F3000. |
Una de las empresas de su abuelo era la heladería Avidesa, que permitió, entre otras cosas, al joven Campos correr la F3000 de 1986. Los resultados no fueron buenos, pero en la última cita, la del Jarama, lo medio arregló acabando séptimo, justo por delante del otro español, Luis Pérez Sala que, pese a ganar dos carreras y acabar cuarto el campeonato, no fue el elegido por Minardi. No sé si fue alguien de Minardi el que declaró: “habláis de Sala, pero Campos va por delante”. Lo que era cierto, pero sólo en esa carrera.
Debutó en F1 en 1987 con Minardi marcando tendencia, ya que luego serían muchos otros pilotos españoles los que debutarían en F1 también con Minardi: Luis Pérez Sala, Marc Gené, Fernando Alonso y, ya como Toro Rosso: Jaime Alguersari y Carlos Sainz.
Su carrera en F1 fue corta, apenas 17 GGPP tras intentar calificar en 21 entre 1987 y 88. Su debut, en el GP de Brasil se saldó con una descalificación tras adelantar a coches en la vuelta de formación, ya que por un problema mecánico no se pudo alinear en su posición y creyó poder colocarse en ella tras dicha vuelta. Cuando en el telediario lo comentaron sin más explicaciones, me pareció surrealista porque, ¿cómo no iba a saber que no se podía adelantar en la vuelta de reconocimiento?
Precioso el Minardi M187, pero nada más. |
En Mónaco no pudo correr al accidentarse en los entrenamientos en lo que no fue un gran año. El Minardi Motori Moderni era chulo, pero no era ni rápido, ni fiable, de modo que el bueno de Adrián sólo acabó un GP, el de España en Jerez precisamente, en décimo cuarto lugar. Claro que a su compañero Nannini no le fue mucho mejor, acabando sólo dos GGPP, ambos en undécimo lugar: Hungría y Portugal. Curiosamente, de no haber abandonado en el GP de Alemania, habría sido cuarto en una carrera que parecía nadie quería acabar.
Adrián nunca superó a su compañero en calificación, pero estuvo cerca en más de una ocasión, y ya sabemos que Nannini era muy bueno. Lo que se solía decir, aunque no sea muy correcto en su caso: “no era manco”.
En 1988 Nannini ascendió a Benetton y Luis Pérez Sala fue su nuevo compañero, que lo superó en los dos primeros GGPP, tanto en calificación, como en carrera. En el segundo de ellos acabó su segunda carrera de F1, esta vez en el puesto dieciséis, por el undécimo de su compañero Sala.
A partir de ahí, hundimiento total: no calificación en tres carreras seguidas: Mónaco, México y Canadá, dándose la curiosa circunstancia de que en los libres, sin presión, lograba los tiempos que le hubieran permitido correr. Visto lo visto, optó por retirarse. Su lugar lo ocupó Pierluigi Martini.
Broche: Campeón de España de Turismos en 1994 con Alfa Romeo. |
Su carrera deportiva no tuvo mucha continuidad después, pero antes de retirarse logró el título de campeón de España de turismos en 1994 con un Alfa Romeo 155 y se dio el gustazo de correr Le Mans en 1997 con un Ferrari 333SP junto a Michel Ferté y Charles Neaburg.
Después fundó Campos Racing, equipo de carreras que compitió -y compite- en varias categorías y en la que se fogueraron pilotos como Marc Gené, Fernando Alonso, Antonio García y Alex Palou. Su punto culminante fue la creación del equipo de F1 Hispania Racing Team (HRT), culminante por correr en la cima del deporte del motor, no así por sus resultados. Eso sí, en categorías inferiores, Campos Racing es sinónimo de garantía.
Siempre me gustó su casco, sencillo con la bandera española en grande -curioso que los subnormales de aquí no le tildaran de facha, palabra cuyo significado desconocen- totalmente inconfundible.
Sin éxito pero en Ferrari: Le Mans 1997. |
En paz descanse, señor Campos.