El documental
Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid y que hoy es el 53 cumpleaños de Michael Schumacher, escribiré unas pocas palabras sobre el documental que sobre su persona a tenido a bien realizar Netflix.
No es cuestión de hablar de todos los documentales de F1, y menos ahora que parece se están haciendo un montón, pero cuando se trata de una de las figuras más legendarias es casi obligatorio hacerlo, y para ello esta es la mejor fecha.
El documental dura casi dos horas y narra, a grandes rasgos, la carrera deportiva de Schumacher. Como es obvio, pasa muchos detalles por alto, fórmulas de promoción, sports y demás, ya que de comentarse todo, a poco que uno se centre, más que un documental, habría que hacer una serie, cosa que por otra parte, tampoco estaría mal.
Es un documental amable, como suelen serlo todos en tipo de situaciones. Raro sería -no conozco ningún caso- en el que se hace un documental sobre un deportista célebre para criticarlo, aunque hubiese motivos para ello. Y con Schumi los hay, como con otros tantos. Algunas situaciones se pasaron por alto, y otras se trataron con amabilidad. Uno no puede estar de acuerdo en todo, y respecto a Spa 1998 yo tengo una opinión distinta a la comentada en el documental, lo mismo que respecto a Jerez 1997, aunque sin quitarle su responsabilidad, que es que lo hizo aposta, aunque aquí lo tratasen de otra manera, como una reacción instintiva. ¿Quién sabe?
Personalmente, lo que más me gustó, de largo, fue lo que dijo Damon Hill, rival durante muchos años, que me pareció de un caballero de verdad. Dijo, respecto a lo acaecido en Adelaida 1994: “ estando un punto por delante en el campeonato, no sé que habría hecho yo en su situación”. Que diga esto quién perdió un título por una maniobra, cuando menos cuestionable, es toda una muestra de señorío. Luego algunos, como yo, pueden hablar de las cuatro carreras de sanción de Schumi, tan cuestionables o más que dicha maniobra, pero a efectos de los que sucedió aquel día, “chapeau” para Damon Hill.
No todo es competición en el documental. |
El documental esta bien, entretiene y gustará a los fans del Kaiser, toda vez que quien busque críticas feroces, o duras, se sentirá decepcionado, pero es que este no es el lugar, como tampoco lo era el de Senna, que trató ciertos temas comprometidos de Ayrton con mano izquierda. Respecto a este documental, del que algunos dijeron era “la mejor película sobre la F1”, sin duda pasándose de frenada tres pueblos, decir que el de Schumi, no se queda corto, es igual de bueno. Ambos lo son, pero en realidad, ninguno es excepcional. He visto otros documentales, más cortos eso sí, de otros pilotos, Gilles Villenuve por ejemplo, y son igual de interesantes. Un documental excepcional es: Ferrari, race to inmortality”, comentado en este blog, al igual que el de Senna o “F1 life on the limit” que es genial.
De modo que, y como resumen, véanlo, les gustará y se entretendrán, incluso aunque quieran escuchar críticas, es un buen documental sobre un piloto, un gran piloto, y los no fans verán la otra cara del Kaiser, una cara amable, generosa como ninguna otra con su equipo. Fue a él al que yo escuché por primera vez la frase: “ganamos y perdemos juntos” y, en su caso, era verdad. Otros no pueden decir lo mismo, salvo palabras vacías.
Ocho años después de su fatídico accidente, Schumacher sigue en la mente y los corazones de muchos aficionados y es todo un detalle que Netflix se haya acordado de él.
Suerte Schumi, y mucha fuerza, sin duda la necesitas.
Nunca me cansaré de repetirlo, no conozco un piloto que haya sacado a la escudería del pozo en el que estaba inmersa, igual los hay y sería un buen motivo para otro artículo... Saludos
ResponderEliminarCierto, el nivel de compromiso ha sido insuperable.
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