Ferrari contra Ferrari
El GP de Rusia es, por motivos que no
vienen a cuento, uno de los que más me apetece gane Ferrari, y por
tanto, las derrotas allí sufridas en 2017 y este año, me duelen
especialmente.
En 2017 fue una salida cañón de
Bottas la que les birló el triunfo y este, fue la propia Ferrari la
que sirvió en bandeja de plata la victoria al correoso Hamilton.
Fue la segunda vez que Hamilton, sin el
mejor coche, gana este año. Eso no quita para decir que tiene el
mejor coche de largo y que Ferrari le ha ganado tres carreras
consecutivas con un coche no tan bueno como el suyo, pero si lo
suficiente como para lograrlo.
En Rusia, casi al igual que en Baréin,
Ferrari fue el mejor y ellos mismos se condenaron al fallar su
mecánica. Y de ahí el titular, Ferrari contra Ferrari; porque si en
Baréin Leclerc perdió la carrera por un fallo en su motor, aquí la
perdió por el fallo del motor... de su compañero Vettel, que
provocó la salida del coche de seguridad virtual.
Volviendo al principio, Ferrari tenía
que confirmar si lo de Singapur fue un espejismo y, visto lo visto,
parecía que no. Red Bull, Verstappen más bien, también parecían
fuertes, pero luego se vio que no tanto -además de arrastrar una
penalización-, mientras que Bottas, normalmente a sus anchas en el
trazado de Sochi, no parecía tan fuerte como en años anteriores.
La suerte le sonrió por partida doble a Hamilton. |
Leclerc marcó la pole con autoridad,
la cuarta consecutiva y sexta del año, mientras que Hamilton volvió
a hacer un último intento genial para colocarse en primera linea
precediendo a un Vettel que no acaba de cuadrar una calificación
perfecta en las últimas citas. Bottas fallaba y era quinto tras
Verstappen, pero heredaba su posición por la penalización del
holandés, que caía hasta el noveno lugar, favoreciendo a Sainz,
Hulkenberg, Norris y Grosjean, todos ellos en un pañuelo.
De esa guisa, la carrera iba a ser
entre los Ferrari y Hamilton, habiendo optado este último -al igual
que su compañero Bottas- a salir con medios por blandos de los
Ferrari. No creo fuese una opción mejor, pero si que me preocupó la
posibilidad de un coche de seguridad una vez hubieran parado los
Ferrari, como así ocurrió. Mierda “pal” profeta, que se dice.
En la arrancada Vettel pasó de tercero
a primero gracias a la mala salida de Hamilton -al que casi pasa
Sainz-, al rebufo de Leclerc y quizá, a la candidez de éste
último, que no defendió la primera frenada.
A partir de ahí, empezó un “carrusel”
de mensajes de radio en Ferrari que iban a ser la comidilla de todos
los amantes de las “noticias del corazón” de la F1, es decir, de
las mamonadas.
No discuto Leclerc tuviera su parte de
razón, pero Vettel tenía más ritmo. No es comparable a lo del
“multi 21” de Malasia 2013, donde se aprovechó de las órdenes
-Webber relajado y sin posibilidad de réplica- para ganar. Aquí se
puso primero y demostró tener más ritmo. No era razonable que,
escapándose de su compañero, tuviese que perder un par de segundos
para dejarlo pasar, segundos que iba a recuperar un Hamilton que
estaba al acecho con otra táctica, justo en el momento en el que los
Ferrari debían cobrar ventaja. De haber sido los Ferrari 1” por
vuelta más veloces que el resto, de acuerdo, pero con Hamilton ahí
pegado, no se podía hacer tal maniobra. Por eso y porque Seb era más
veloz.
Carambola: Seb abandona y el coche de seguridad quita del liderato a su compañero. |
Al igual que en Singapur pero al revés,
cuando Seb paró por estar sin gomas, aquí le pasó lo mismo a
Leclerc, permaneciendo Vettel cuatro vueltas más, justo cuando
empezó a ceder terreno con Hamilton. Eso propició que Leclerc lo
adelantase. De un modo u otro, Seb le había devuelto posición.
Quizá lo mejor hubiera sido parar antes a Seb, pero por otro lado,
convenía apurar las gomas, no fuera a ser que, al final, les pasase
como en Austria, ser superados por un rival con ruedas en mejor
estado. Entonces sucedió lo que sucedió, el Ferrari de Vettel
abandona y se provoca un coche de seguridad virtual -a pesar de estar
el Ferrari en posición segura- que al durar tanto, permite a
Hamilton parar y ponerse líder. Fin de la historia. Que luego
Ferrari sacrificase la segunda posición en busca de la victoria es
lo de menos, ellos mismos se fastidiaron.
¿Que quieren les diga? Yo hubiese
metido a Vettel en boxes aunque reventase toda la unidad de potencia,
sabedor de que aquí se sacan coches de seguridad a la mínima
-muchas veces sin necesidad- para amarrar la victoria. Creo es mejor
una penalización en el siguiente GP para Vettel y ganar aquí, que
no tenerla a costa de no ganar. ¿Pecaron de ingenuos? No lo sé. Lo
que sí sé, es que a tenor de como fue el final de carrera, sin el
coche de seguridad virtual, gana Leclerc, porque Hamilton no lo
habría podido adelantar.
De nuevo Sainz brilló con luz propia. Red Bull se equivocó dejándolo ir. |
Apuntes
-Sainz estuvo espléndido y fue el
primero del resto
-Cuarta carrera consecutiva sin batir
récords de pista, en este caso por llevar Pirelli compuestos más
duros, desconozco si pasó lo mismo en las tres anteriores.
-Hamilton dice “nunca nos rendimos”,
pero eso es fácil cuando llevas seis años con el mejor coche de la
parrilla de largo -sin contar con las ayudas de los comisarios- y
desde hace tres, con un compañero bueno, pero nada más.
-Mercedes arrasa y todo le sale bien,
pero todo imperio acaba, lo mismo el año que viene ya no se ríen.
-Creo que Vettel, pese a todas la
críticas, va a seguir en Ferrari al menos un año más, y creo se lo
merece.
Ahora a ver si Ferrari confirma lo
visto tras el parón veraniego el resto de temporada.
En cuanto a lo de Vettel (y el VSC), paró donde paró por un tema de seguridad. La primera orden que le dieron fue la de "box, box", pero antes de llegar a la entrada de boxes, le dijeron que detenga el auto y salga con cuidado, ya que había mucho riesgo de que se electrocute. Creo que Ferrari buscó con todas sus ansias pararlo en boxes, pero viendo que corría peligro, tuvieron que actuar.
ResponderEliminarInteresante. De ser así, siguen siendo muy peligrosos estos monoplazas. Ya vimos lo que le pasó a Alonso en 2015.
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