El hundimiento
Ferrari llegaba a su segundo GP de casa, en Imola, aunque cronologicamente sea el primero- con la merecida vitola de favorito. Sin embargo, el Red Bull se mostró muy superior, con sus dos coches claramente por delante y, en Ferrari, poco pudieron hacer. Si a eso le sumamos errores y mala suerte, la cosa le salió redonda a Red Bull y a un Verstappen que, de verse hundido en Australia, ahora se veía como el más fuerte, recuperando de una tacada 19 puntos, y Red Bull 38.
Pero si de hundimientos queremos hablar, nada como el de Mercedes y, sobre todo, Lewis Hamilton. Cierto es que un brillante Russell logró una gran cuarta posición que, en condiciones normales habría sido octava. Pero es que peor le fue a Hamilton, en la que fue posiblemente su peor carrera en la F1. Partió décimo cuarto y ahí acabó. Pero sin los abandonos de los españoles más la salida de pista de Ricciardo -que eliminó a Sainz- habría sido décimo séptimo.
La llegada a Europa trajo de vuelta las carreras al sprint, con las novedades comentadas en los previos: la pole sería la pole, no el ganador de la mini-carrera; y se repartirían más puntos.
Doblegado por Verstappen el viernes y el sábado, el domingo tampoco pudo con Pérez. Una mala parada y la falta de DRS no ayudaron. El trompo fue el colofón. |
Bueno, pues para mí este formato es un MIERDA. Visto y probado, no me hace más interesante el fin de semana de Gran Premio y se carga la tradición, amén de que la lía todo a nivel estadístico. El ganador de la carrera corta, no suma esa victoria a su palmarés, como tampoco suma la vuelta rápida, vueltas en cabeza, etc... Tampoco se corren dos GGPP, aunque haya dos carreras. ¿Me dejo algo? Seguro que sí. Gracias Liberty Media, gracias, Domenicalli y Branw por esta sandez, por este sinsentido. Cambiar lo que funciona de modo radical sin necesidad nunca ayuda. Estaría bien recapitulaseis y eliminaseis este formato absurdo.
Pero la llegada a Europa trajo algo bueno, la renovación de Carlos Sainz por Ferrari por dos años más, renovación más que merecida pese al garrafal error de Australia. Una pena que Ricciardo no le dejase celebrarlo.
Tras los libres uno en mojado y con Ferrari al comando -que hizo ver a muchos una superioridad que no existía- llegó la cuali. Esta fue en condiciones mixtas: empezó en seco y acabó en mojado. Además duró una eternidad por las muchas banderas rojas. Tanto parón y parsimonia aburre al personal.
Bottas fue quinto, acechando al cuarto, su antiguo coche. ¿Quién lo hubiera pensado hace apenas unos meses? |
En resumen, que en Q1 se quedaron los Alpha Tauri de Tsunoda y Gasly, muy fuera de forma; Latifi, que lo raro es que pase, Ocon, con problemas en su Alpine y Albon, que al reventar un freno -primera bandera roja- se quedó inédito. En Q2 se quedaron los Mercedes, por primera vez desde Japón 2012, con Russell undécimo y Ham décimo tercero. Schumacher fue doce, Zhou catorce y Stroll quince. En esta sesión, en la que amenazaba lluvia y había que hacer el tiempo al principio, el renovado Sainz se estrelló -otra banderita- y, aunque pasó, en Q3 ya no rodó y partiría décimo.
La lucha por la pole fue en agua y la logró de forma contundente Verstappen, por ocho décimas sobre Leclerc. Logró su tiempo con bandera amarilla, lo que le hizo aminorar, de lo contrario la habría logrado por más de un segundo. Claro que si en lugar de bandera amarilla sacan la roja, o hubieran sacado la roja con tanta celeridad como en Australia quince días antes, Max no habría hecho la pole. Cuando Max acabó la vuelta, sacaron la bandera roja... La causa fue el Alfa de Bottas tirado al borde de la pista, sin molestar en absoluto.
Y ya no hubo más, porque el último intento fue cancelado por otra bandera roja, en este caso de Norris cuando calentaba ruedas, lo que dejó a Leclerc sin posibilidad de responder -él decía poder hacerlo- conformándose con el segundo lugar. Lo cierto es que se dejó la pole en el primer sector por más de un segundo. Está claro que no iba forzando. Pero peor le fue a Pérez, en los tiempos de Max de no ser por un error. Séptimo al final. Norris, que se creía capaz de ir a por Leclerc -un poco optimista el chaval- fue tercero, un gran Magnussen cuarto, Alonso quinto -los tres en una décima-Ricciardo sexto, el mencionado Pérez séptimo, Bottas octavo y Vettel noveno.
Hamilton: décimo tercero y gracias. Seguramente su peor actuación como piloto de F1 |
Antes de la carrerita del sábado, los segundos libres, tan falsos, o más, que los primeros, con Russell al mando.
La carrera corta se inició de modo inmejorable para Ferrari, Leclerc y los tifosi, al ponerse Charles primero. Todo parecía ir bien, pero le salieron ampollas en la rueda delantera derecha y tuvo que ceder ante Verstappen, que esta vez cuidó mejor las ruedas que el Ferrari, Pérez remontó épicamente hasta el tercer lugar, con vuelta rápida incluida -aunque no aparezca en las estadísticas-, por delante de otro que también remontó muy bien, aunque con menos ritmo: Carlos Sainz, enmendando así los dos su mala calificación. Los Mclaren de Norris y Ricciardo acabaron por detrás, con Bottas y Magnussen cerrando el copo de puntos. Alonso, no muy fino -ni él, ni su coche- fue noveno. Vettel retrocedió hasta el décimo tercero, justo delante de su “amigo” Hamilton. Russell, a todo esto, seguía el once.
Como bien dijo Sainz al finalizar, necesitaban encontrar algo para poder plantar cara a Red Bull el domingo.
La CARRERA, es decir, la de verdad, empezó con suelo húmedo que se iba a ir secando. Todos partieron con mixtos. Los Ferrari, a diferencia del día anterior, la pifiaron en la salida. Leclerc cuarto y Sainz quinto, con la mala fortuna de ser embestido por Ricciardo en la primera variante quedándose en la puzolana. Quince días antes, una mala calificación, más las prisas, arruinaron su carrera. Esta vez, bien colocado y sin errores, fue sacado de pista. Está claro que no era su fin de semana. Ni este, ni el anterior.
Ricciardo arruinó el fin de semana de Sainz... y el suyo. |
Y poca historia la carrera. Una carrera dominada con mano de hierro por los Red Bull. Decir que Schumi trompeó y tocó a Alonso, lo que le causó el abandono, Leclerc rapidamente recuperó hasta el tercer lugar y, tras perseguir durante toda la carrera a Pérez, tratando de ser segundo, hizo una parada final poniendo blandos -Red Bull calcó la táctica- trompeó y cayó al noveno lugar, recuperando hasta el sexto al final pese a otra parada.
Russell, sexto en la primera vuelta merced a su gran salida, acabo cuarto tras los RB y el Mclaren de Norris, que corrió en solitario, aguantando el ataque final de Bottas, que recuperó los 11” que Russell le llevaba tras perder un montón de tiempo en boxes al no entrarle la rueda delantera derecha.
Vettel recuperó hasta el séptimo lugar por delante de Tsunoda, Magnussen y Stroll. Eso fue lo más destacado para bien, ya que para mal, Hamilton: partió catorce y ahí acabó, incapaz de adelantar a Gasly. Claro que los 5” que le metieron a Ocon por su salida de boxes entorpeciendo a Hamilton -sanción rigurosa si dicen se puede luchar en el carril de boxes-, permitió a Albon, Gasly y Hamilton recuperar una posición, aunque de poco sirvió.
Vettel realizó una sólida carrera y finalizó séptimo dando puntos a Aston Martin, los primeros de 2022. |
A todo esto, tardaron muchísimo en permitir el DRS, que seguramente habría permitido a Leclerc situarse segundo, aunque luego tendría que contener a Perez, que no sería fácil, y poco más. Carrera aburrida en la que Max también marcó la vuelta rápida y recortó un montón de puntos a Leclerc, situándose segundo del mundial a sólo 27 puntos, sobre todo teniendo en cuenta que estaba a 46. Logró su segundo Gran Chelem. ¿Cómo se le llamaría si hubiese marcado la vuelta rápida de la carrera corta? Porque sólo le faltó eso y liderar todas las vueltas de esa carrera que, a efectos estadísticos, no cuenta.
Sobre Ham y MB, al margen del mal día del hebdocampeón, que acabó doblado, decir que esta vez no fueron el tercer coche, este fue el Mclaren, ellos fueron el quinto, porque el Alfa también fue mejor. De todos modos, yo no los doy por muertos. En otras circunstancias sí, de hecho, para el título, aparte de Ferrari y RB, no cuento con nadie más, y es que al igual que con Red Bull en 2014, Ferrari en 2005, o Mclaren en 1992, me cuesta eliminarlos de la ecuación por mal que vayan. Ya veremos.
Sea como sea, en quince días Miami, y ahora es Red Bull la que llega con toda la vitola de favorita, y con la Scudería buscando una vendetta.