¿Quién es mejor?
Senna, sin lugar a dudas. Es cierto
que, como dijo Luis Pérez Sala, cuando compartieron equipo durante
dos años, ganaron un título cada uno. Empate técnico. Pero viendo
el resto de resultados y analizando las carreras, el triunfo del
brasileño es inapenable. Y además, dado que ninguno de los dos es
santo de mi devoción, nadie me puede acusar de tirar por uno u otro,
en este caso por Ayrton.
Para mí esta comparativa es más
sencilla que la típica de: ¿cual es el mejor piloto de todos los
tiempos? Pregunta a la que por cierto, respondí en mi artículo: “El
mejor piloto de toda la tierra” de enero de 2018.
Fácil es discernir quien es mejor: si
Hamilton o Bottas o Alonso o Massa. Pero entre Alonso y Hamilton, la
cosa es más peliaguda, decantándome por el primero, pero no de un
modo definitivo, a diferencia de lo que sucede en este caso. Ahora
verán por qué.
Para empezar, bajo mi punto de vista,
ambos merecieron un título, sólo que al revés: Prost el de 1988,
donde sumó más puntos, siendo más regular pero un poco menos
brillante. No ganó porque había que restar los cinco peores
resultados, cosa que a mí nunca me pareció justo. Senna, por su
parte, mereció el de 1989, campeonato en el que claramente sí fue
mejor que Prost, como veremos a continuación.
Durante sus dos años juntos en
Mclaren, Senna ganó 14 carreras por 11 de Prost, logró 26 poles
frente a 4; siendo superado por el francés tanto en vueltas rápidas:
12-6, como en puntos: 186-154.
Esto deja bien claro que Senna era
mucho más veloz en calificación, pero no tanto en carrera,
cometiendo más errores, de ahí los mayores puntos de Alain, pese a
su menor número de victorias.
Pero todo hay que analizarlo, a veces
no es tan sencillo.
Empezaré por la calificación. Dado
que entonces calificar no era tan importante como ahora, Prost no se
empleaba a fondo -o eso decían- limitándose a marcar un buen tiempo
para, acto seguido, preparar la carrera, al estilo de lo que hacía
Niki Lauda en 1984. De hecho, fue el propio Niki el que dijo:
“hubiera sido muy interesante ver al Prost de 1984 frente al Senna
de 1988”. Así todo, las poles de Senna en Mónaco ´88 y Suzuka
,89 con 1”5 y 1”7 sobre Prost, son muy significativas.
Aclarado esto: las carreras. En 1988
Senna tiró dos por la borda por errores propios: Mónaco e Italia,
heredando Prost la primera.
En 1989 peor aún, y de ahí que
considere mejor a Ayrton que Alain, ya que 1988 no es definitivo. Y
es que esa temporada Senna, al margen de arruinarse el sólito el GP
de casa y el de Inglaterra -los obviaremos- perdió por avería en
Phoenix, Montreal y Monza, heredando Prost dos triunfos. Y luego está
lo que pasó en Japón, donde Senna mereció ganar. (Ver artículo:
GP de Japón 1989 de enero de 2016). Es decir, que Senna podría
haber ganado hasta seis carreras más y Prost tres menos, quedando
el marcador entonces en 20-8. Puede parecer exagerado, y en parte lo
es, pero es una muestra de como Senna fue generalmente más veloz que
Prost en carrera, no sólo en calificación. Sus errores están ahí,
y si los descontamos, entonces la cosa queda en 18-9.
Es por ello que considero a Ayrton
mejor que Alain, al margen de que era un referente en agua, a
diferencia de Prost, que no estaba a gusto en ella. Respecto al mayor número de abandonos de Ayrton, no lo considero relevante. Sea como sea, son
dos grandes, y Alain es más rápido y bueno de lo que se le
recuerda. Le hizo mucho daño convivir con Senna, sin embargo, se
defendió bien.