jueves, 22 de julio de 2021

GP de Gran Bretaña 2021

 



         "Nada me apartará de mi objetivo"





Con esas palabrejas se expresaba el arrogante Lewis Carl Hamilton lleno, por lo visto, de orgullo tras su actuación en Silverstone.

Si nos ceñimos a su victoria, esta es brillante respecto a su compañero Bottas, al que doblegó sin problemas pero, en computo gloval, pese a la penalización de 10”, no es gran cosa, ya que necesitó casi toda la carrera para doblegar a un brillante -este sí- Charles Leclerc, que llevaba un coche entre siete décimas y un segundo por vuelta más lento. De modo que, me lo vendan como lo vendan, fue a falta de tres vueltas cuando Hamilton enmendó algo que debía haber estado resuelto a media carrera, y eso siendo generoso.

Luego tenemos su acción, sacando de pista a Verstappen. Es evidente que no lo hizo aposta, tan evidente como que, una vez Max fuera, su primer pensamiento fue que su coche no estuviera dañado, el segundo que no le sancionaran con dureza -como a Seb en Baku 2017 por mucho menos- para poder ganar, y el tercero, ya de soslayo, que Max no se hubiera hecho daño porque, por mucho que digan a veces: “nos jugamos la vida” la realidad es que con las medidas de seguridad actuales -y las de hace un buen puñado de años- el riesgo, sin llegar a desaparecer, no es como antaño. De hecho, casi es peor bajar un puerto en bici en ciclismo, que una carrera de F1, por no meterme en estadísticas de sí tomamos más riesgo al coger el coche a diario nosotros que un piloto al subirse a un monoplaza. Resumiendo, que le importaba tres cojones lo que le hubiera podido pasar a Max, él quería ganar y, como bien dijo, no iba a dejar que nada se interpusiera en su objetivo. Tras la carrera se quejó de insultos racistas en las redes... ¡pues anda que si llega a ser Schumi el que hace esa maniobra! Lo hubieran escaldado el triple, y eso sin contar conque seguramente la sanción sería mayor.



No hace falta ser Aristóteles para ver que Hamilton la pifió.


Lamentable actitud de este tipo que encima se cree un referente, cuando lo que es es un fraude. ¿Que le hubiera costado pedir perdón cuando es evidente que fue culpa suya al 100%? Nada, y habría quedado de puta madre. Pero no, su arrogancia, su estupidez, le impiden hacerlo. Pues hombre, gracias por no mentir, ya que la pasta de la que estás hecho es de sobra conocida para quien quiera ver. No hay más que recordar tu pataleta de Mónaco. Un niñato es lo que eres y, respecto a piloto, eres muy bueno, pero fuera de los cinco mejores. Tu mejor acción como piloto fue fichar por Mercedes.

Dicho esto, la sanción. ¿Fue justa? Creo que sí, 5” hubieran sido pocos, de 10” para arriba está bien. Luego está la cuestión de si habría que haberle puesto una sanción mayor para que no ganara, o descalificarle. Ya que no fue su intención sacar de pista a Max -sólo quería pasarlo a toda costa- quizá descalificarlo es demasiado. Pero por otro lado, al ser la tercera vez en tres años que hace algo así (Albon en Brasil 2019 y Austria 2020) tal vez, por reiteración, merecía más castigo. Si a eso le sumamos lo peligroso del toque, en Copse casi a 300km/h, entonces la descalificación hubiera empezado a cobrar sentido.



Hecho un cisco quedó el Red Bull, pero aguantó el impacto.


No me olvido de Verstappen, el que zigzageó a 300km/h en la recta de Kemmel por delante de Kimi -tras haberlo sacado antes de pista en Les Combes- en 2016, reconociendo, por si alguien lo dudaba, haberlo hecho aposta. No sé si ha cambiado el chaval, ojalá que sí, aunque lo veo difícil, pero lo que quiero decir es que la situación podría haberse dado perfectamente a la inversa y estaríamos en las mismas. No me imagino lo contrario, aunque lo deseo. A ver si de una puta vez se reconocen los errores. Esto es, para mí, lo peor. Puedo perdonar a Hamilton que sacase a Max de pista, pero que busque excusas de mal pagador diciendo: ”no me dejó espacio”, cuando cabían dos coches, y otras sandeces que dijo tras el GP, como: “no sabía que Max estuviese en el hospital, pero eso no ensombrece mi victoria”, no, ya que es de una falta de humanidad terrible, típico del fascista que es, señalando a quienes no piensan como él y no le siguen en su postureo progre.

Aclarado esto, el héroe.


Gran segundo puesto de Leclerc con sabor agridulce. Mereció el triunfo.



Charles Leclerc fue el héroe del fin de semana. Se encontraba primero tras el toque entre los líderes y, cuando se realizó la segunda salida, creo que todos esperábamos no le durase esa posición ante Hamilton ni dos telediarios. Pues vaya si le duró, y eso a pesar de tener unos pequeños problemas de motor. A Hamilton le hizo falta todo su talento para poder ganar, celebrándolo a lo grande, ya que lo tuvo que sudar. Pero vuelvo a decirlo, con ese coche, tenía que haberlo resuelto tras la parada. Y eso como muuuuuy tarde. De modo que de gran carrera, nada. Leclerc en cambio, Cum Laude. Impresionante la mejora de Ferrari en Silverstone, circuito donde a priori, iban a sufrir, aunque ya se vio el sábado en la minicarrera que podían ser el tercer equipo. Y casi ganan...

Tras los dos ganadores, se situó un anodino Bottas, que se limitó a cubrir el expediente y a ayudar a Hamilton como el número dos que es. Claro que de poco le va a servir ya que seguramente no será renovado y Hamilton no le va a devolver la victoria de Rusia 2018. A este respecto, muchas críticas a Schumi -y con razón- por lo de Austria 2002, pero al menos él si que devolvió el triunfo a su compañero. Y no sólo en Indianápolis...

Los Mclaren fueron cuarto y quinto, con Norris y Ricciardo, este último ya más a gusto con el coche, precediendo a Sainz. El español tenía ritmo de sobra para superarlos a los dos, pero una mala calificación, seguida de una accidentada carrera al sprint, donde tuvo que remontar desde el puesto 19 al ser sacado de pista por Russell, más una pésima parada en boxes en la que se dejó una decena de segundos, se lo impidieron.



70 años de la primera victoria de Ferrari en F1. Leclerc llevaba un casco conmemorativo, pero a Ferrari nunca se le han dado bien las efemérides.


Fernando alonso fue séptimo en una sólida actuación, aunque cuando más destacó fue en los inicios de carrera, llegando a rodar quinto en la carrera al sprint y sexto en la normal. Stroll acabó justo detrás, enmendando un mal fin de semana en el que estuvo claramente dominado por Vettel, que rodaba como se espera de un campeón como él, hasta que trompeó luchando con Alonso en la segunda salida y arruinó su carrera.

Ocon, a la chita callando fue noveno, sin el brillo de Alonso, pero a la hora de la verdad, muy cerca del español y, cerrando los puntos, Yuki Tsunoda superando a su compañero Pierre Gasly.

¿Y Pérez? Se autoeliminó en la carrera al sprint al trompear en la eses y, partiendo desde boxes en carrera, a diferencia de otras veces, no pudo remontar bien. Marchaba en décima posición a falta de cuatro vueltas cuando le hicieron parar para hacer la vuelta rápida y así quitársela a Lewis Hamilton.

George Russell, al que todos dan por hecho se sentará en el segundo Mercedes el año que viene, estuvo velocísimo en calificación, octavo, pero en las carreras no puede aguantar el ritmo y de momento no consigue puntuar. Fue décimo segundo, como su posición en parrilla, en la que le lastró una sanción de tres puestos por su incidente con Sainz.



Vettel lucía en su casco un pequeño homenaje hacía el desaparecido Carlos Reutemann.


Antes de hablar sobre el nuevo tipo de fin de semana que se experimentó en Silverstone, quisiera hablar sobre velocidades punta. Cualquiera con dos dedos de frente sabe que una alta velocidad punta se consigue, más por aerodinámica, que por potencia. Por eso muchas veces, el Force India, con el mismo motor que los Mercedes, tenía más velocidad punta, y no salia por radio Hamilton diciendo memeces de por qué corrían tanto. Digo esto porque, tras ser el Mercedes de Hamilton el más veloz en Baku, más que nada por montar menos ala, llegando a ser, en la recta y con DRS, ocho décimas más veloz que Checo Pérez, estuvo lamentándose -voy a intentar no escribir lloriquear- en Francia y la doble cita de Austria, de la gran velocidad punta del Red Bull. Bueno, pues aquí era al contrario, el MB le sacaba 10 km/h a los RB que eran, esta vez, los más lentos. Ya sabemos que es debido a que el Red Bull cargó más el coche y por tanto, nadie puso en duda, como sí hizo Mercedes, el motor de nadie. Nadie especuló con más potencia para Ham en esta carrera, cosa que ellos sí hicieron con Verstappen en Francia y Austria. Normal que estemos hasta los cojones de Hamilton y su equipo, que parece son ellos los únicos que pueden ganar. Dan, sencillamente, ASCO, y mira que en general, el que domina, acaba hartando, pero estos los superan a todos e largo, no los hay más pelmas. Ver como iba el Mercedes de Hamilton en las primeras vueltas de ambas carreras y cuando le tocó superar a Norris y Leclerc impresionaba, pero que yo sepa nadie a puesto en cuestión la legalidad de su motor.



Con vueltas estelares, Russell hacía rugir a Silverstone.


Respecto al nuevo formato, independiente de que la carrera corta sea más o menos entretenida, al haber un día más de emoción, el fin de semana mejora... pero no lo suficiente. No para mí, que soy un tradicionalista y me gustan los GGPP tal como están. Un fin de semana de Gran Premio es eso, un fin de semana de Gran Premio, de uno, no de varios. Por lo tanto, hacer una carrera al sprint no me gusta, por mucho que digan no cuenta, sólo marca la pole, etc... porque además, es un contrasentido.

El viernes se realiza la calificación tal y como la conocemos, que es practicamente inmejorable, pero en ella consigues la nada, porque no haces la pole, sales primero en la carrera al sprint, pero estadísticamente no eres nada. Y no tiene sentido hagas la “pole” y esta se desvanezca, como tampoco tiene sentido que al día siguiente corras una carrera, y tres cuartos de lo mismo. Bueno, casi. Al ganador le consideran pole -en principio así pasa a las estadísticas- y le dan tres puntitos -dos al segundo y uno al tercero-, pero como ganador de la carrera que es, no aparece en ningún sitio, la carrera, por tanto, no cuenta como GP y la vuelta rápida de la misma, como si no existiera, lo mismo que los kilómetros en cabeza y demás. Muy mal, si lo hacen, que lo hagan con todo. Una pole es una pole, que viene de una calificación a una vuelta o, si quieren, de varias, como en la F1 en 2005 o en Indianápolis, pero no de una carrera y, el ganador de esta, no es un poleman, es el ganador de una carrera, con su vuelta rápida, kilómetros en cabeza, etc... Eso daría lugar a GGPP con más de una carrera y no me gusta, pero si es lo que quieren hacer, que lo hagan bien, como en otros campeonatos: F2, Superbikes, Turismos, etc... el resto son tonterías.



La FIA presentó el nuevo F1 de cara a 2022.


Sin más me despido hasta Hungría, casi mitad de campeonato, un campeonato que creo va a tener más carreras polémicas como esta y si no, al tiempo. Hamilton a abierto la caja de pandora del juego sucio y tal vez sea difícil cerrarla. Así todo, creo que por pilotaje Max es mejor y logrará el título a menos que Mercedes recupere el terreno perdido porque, a día de hoy, están en tablas.

Y respecto a Hungría, creo esta pista le irá mejor a Red Bull que a Mercedes, una pista en la que Ferrari podría dar la campanada. Lo iremos viendo.


PD Hace unos días falleció Carlos Alberto Reutemann, no hubo ningún homenaje durante el Gran Premio, sólo uno se acordó de él, ¿adivinan? Sí, fue Sebastian Vettel, de los pocos, sino el único piloto que es un verdadero aficionado.



1 comentario:

  1. Totalmente de acuerdo, le saca de la pista, le arreglan el coche, le ponen una sanción que a priori se sabe que va a poder recuperar la primera plaza... Suma y sigue con el favoritismo para el niño

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