lunes, 15 de enero de 2018

Dan Gurney se va



                                      Adiós








Ayer nos dejó Daniel Sexton Gurney, más conocido como Dan Gurney, a la edad de 86 años tras no poder superar las complicaciones de una neumonía.
Su mujer Evi, declaró: "con una última sonrisa en su hermoso rostro, Dan se fue a lo desconocido justo antes del mediodía de hoy".
Poco puedo decir del gran piloto estadounidense Dan "the man" Gurney, ya que desarrolló la mayor parte de su actividad deportiva cuando yo aún no había nacido siquiera.
Es por ello que todo lo que sé de él -lo poco que sé- lo he leído en libros y revistas, habiéndolo visto en acción muy pocas veces.
De modo que citaré sólo unas pocas cosas que sé de él, las que considero más destacables.
Antes de nada decir, que por razones totalmente ajenas a la razón, Dan Gurney es un piloto que me encanta, que me cae bien.  No cito en pasado porque para mí sigue igual, presente en mi memoria. Eso no ha cambiado ni lo hará, siempre me gustará. No suelo ser fan de pilotos que no he visto, y mucho menos si no han pilotado para Ferrari, pero siempre hay excepciones. Y Dan es una de ellas.* (Ver comentarios)



Gurney con su Plymouth Barracuda en sus tiempos de la Trans Am



Sin duda que las buenas palabras que siempre lei sobre él influyeron mucho pero, sobre todo, verlo y escucharlo en los extras de la película "Grand Prix", donde se veía en él a un tipo cercano, alguien con el que podías charlar y, sobre todo, contar, hizo de él un referente para mí, un héroe. Esa fue la impresión que me causó.
Empezaré por ahí, por parte de lo que dijo en esos extras. Hablaba de su admiración por Jim Clark y de como se derrumbó de emoción al escuchar en boca del padre de Clark en el funeral de este, que él era al único piloto al que su hijo temía.
Gurney corrió en todo lo corrible en su época como piloto y, en 1967, por citar un año, entre F1, Le Mans, Indy y Nascar, se pasó media vida en aviones volando de un continente a otro para correr un fin de semana aquí, y otro allá, como magnificamente relató Tomás Saldaña en Eurosport con motivo de las 24 horas de Le Mans del pasado año.
De paso, se convirtió en el primer piloto en ganar carreras de F1, Indy, prototipos -Can Am incluído- Trans Am y Nascar.
Cuando ganó con el monstruso Ford GT40 de siete litros en Le Mans 1967 junto a su compatriota A.J. Foyt, en el podio regó a los asistentes con champán, creando involuntarimente lo que sería la ceremonia del podio tal como la conocemos hoy día, y no sólo en el mundo del motor.
Fue constructor, creando los maravillosos Eagle Westlake de F1, posteriormente también de Indy, también muy bonitos.



Gurney con su Eagle Westlake en Nurburgring.



En esa época, la de constructor-piloto, creó el famoso "flap Gurney" que era, más o menos, una pestaña que se colocaba a la salida del alerón, generando más carga.
Todo esto es sólo una mínima parte, y es que no estoy capacitado para hacer una minibiografía siquiera de tan gran piloto, tan gran hombre, ni tampoco puedo decir nada personal de él, porque me pilló a contrapie. Pero eso no quita para que lo admirase y lamente ahora su muerte.
Tuvo una larga y prospera vida que vivió como quiso, al máximo, pero eso no quita para que sienta un pequeño vacío en mí corazón automovilista por su pérdida.

Como dijo su famila: Godspeed



3 comentarios:

  1. Para que vean mis grandes lagunas respecto a este gran piloto, he puesto en el artículo: "No suelo ser fan de pilotos que no he visto, y mucho menos si no han pilotado para Ferrari, pero siempre hay excepciones. Y Dan es una de ellas".
    Y sin embargo, Dan Gurney sí pilotó para Ferrari. No muchas veces, pero lo hizo. En 1959 corrió cuatro GGPP de F1 con Ferrari, sus cuatro primeros GGPP. Es decir, que debutó con Ferrari, nada menos.

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  2. Sabía que Gurney corrió para Ferrari, y no sólo en F1, pero yo no lo consideraba un piloto de la Scuderia sencillamente porque trascendió más alla de ella. Sus mayores éxitos y logros fueron con otros vehículos, algunos de cosecha propia.
    El que corriese para Ferrari no lo hacía más querido para mí -ni menos- porque me gustaba de cualquier modo. Su amabilidad, junto a otras muchas cualidades, hacían de él un ídolo.
    Pilotó para Ferrari, peroo no era un piloto Ferrari, al menos no para mí, como podría ser Surtees, Parkes o Bandini, era más un piloto buscavidas, capaz de correr en todo y que n o se ataba a nada.
    Podría poner varios ejemplos de pilotos que corrieron para Ferrari que no se consideran pilotos Ferrari, aunque cada cual siempre tendrá una opinión, y no se me ocurre nadie mejor que mario Andretti, que ganó carreras con Ferrari en F1 y, sobre todo, en Sports.
    Sin embargo, yo no lo ubico como piloto Ferrari, no sé si me entienden. Pues con Gurney, igual. De ahí mi error en el artículo.

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