miércoles, 23 de marzo de 2016

GP de Australia 2016

                 Mercedes, menos sola en el poder



Aunque tanto la clasificación de la parrilla como la de carrera los Mercedes lograron un 1-2 que invita a creer que nada ha cambiado, la demostración de los Ferrari en carrera da lugar a esperanzas de un campeonato reñido. La bandera roja  y el fallo táctico de Ferrari propiciaron un doblete de Mercedes que de lo contrario no se habría producido, y es no hay nada como tener estrella…









Hamilton se anotó su pole nº 50 en una sesión de clasificación esperpéntica. Afortunadamente parece que la van a cambiar volviendo al anterior a partir del siguiente GP.  Para la carrera se podía esperar un claro dominio Mercedes, pero  no fue así.
La  arrancada se tuvo que abortar a causa de los problemas del Red Bull de Kvyat que abandonó. A la segunda fue la vencida y el Ferrari de Vettel se coló entre los Mercedes y, tras traccionar mal a la salida de la curva 1, Rosberg y Hamilton (2º y 3º) pasaron a 3º (Rosberg) y 6º (Hamilton) dejando a los Ferrari  en cabeza.







Tras el primer paso por meta la cosa estaba así: Vettel, Raikkönen, Rosberg, Verstappen, Massa, Hamilton , Sainz, Hulkenberg, Ricciardo, Alonso, etc…
Los tres primeros se marcharon a razón de 1” por vuelta, con Vettel manteniendo 3” sobre Raikkönen y este 1” sobre Rosberg. Hamilton adelantó a Massa en la tercera vuelta fácilmente. Parecía que íbamos a ver a un Hamilton desencadenado y remontando, nada más lejos de la realidad…no pasó de ahí.
La cosa estaba más o menos estable hasta que se iniciaron las paradas. De los de cabeza fue Rosberg el que se anticipó, nunca mejor dicho, a todos, y es que volvieron a pillar en “bragas” a Ferrari. Vettel entró justo después y mantuvo el liderato por los pelos. Por cierto, que Vettel volvió a montar superblandos mientras que Rosberg optó por los blandos.
Poco a poco fueron parando los demás  y como este año hay tres tipos de neumáticos hubo muchas opciones distintas. Kimi, al igual que Vettel, volvió a los superblandos, que para eso se guardaron un juego el sábado,  y Hamilton puso los medios con intención de no parar más.
La cosa andaba así justo antes del espeluznante accidente de Fernando Alonso:  Vettel, Rosberg, Raikkönen, Ricciardo, Verstappen, Sainz, Hamilton, Massa, Grosjean (impresionante con el Hass) Hulkenberg, etc…






El accidente de Alonso, que colisionó con el Hass de Gutiérrez a más de 300 km/h en la vuelta 16, pudo tener las peores consecuencias. Afortunadamente no pasó nada.
La carrera se detuvo en la vuelta 19 después de dar tres giros neutralizada,  y como la FIA mantiene esa estúpida norma de permitir ajustes en los coches y cambios de ruedas con bandera roja, esta empezaba de nuevo.  Sólo que con salida lanzada. Y le vino al pelo a Grosjean, que no había parado y así lo hizo, sin perder ni tiempo ni posición.
En Mercedes decidieron montar a Rosberg los medios, para que no parase más, mientras que Ferrari mantuvo los superblandos, lo que fue un error, ya que tras el relanzamiento, Vettel apenas logró abrir brecha, y su objetivo, una vez sabido que los Mercedes no iban a parar era alejarse lo máximo de Hamilton, al cual le vino de perlas el parón.
Raikkönen apenas duro un par de vueltas más y con el motor roto abandonó echando llamas por el “snorkel”






La carrera estaba en la vuelta 22 y los líderes eran: Vettel, Rosberg, Ricciardo, Verstappen, Sainz, Hamilton, Massa, Grosjean, Hulkenberg, etc…
Ni los Mercedes ni Grosjean iban a parar más, eso permitió a Hamilton, cuando todos los que le precedían pararon, colocarse segundo a 10” de su compañero Rosberg con Vettel, cuya parada fue lenta -5”6- a más de 11”
También fallaron en la parada del Toro Rosso de Verstappen –no iban a fallar sólo en el de Carlos- y se reincorporó tras su compañero e histérico, pidió por radio en repetidas ocasiones que lo dejase pasar.
Sainz estaba bloqueado tras el Renault de Palmer, y Verstappen perdió los nervios. Al final ambos adelantaron al Renault, para quedarse de nuevo bloqueados tras el grupo formado por Grosjean, Hulkenberg, Bottas y ellos mismos. No contento con sus protestas –se ve que no recuerda como él no dejó pasar a Sainz en Singapur el año pasado- tocó a Sainz en la anteúltima curva del circuito. No pasó nada, pero los dos se pudieron quedar ahí.
Por delante sin novedad, un pequeño fallo de Hamilton permitió a Vettel, que había reducido la diferencia a apenas 2”, se colocase a su rebufo. Pero sin opciones reales a pasarlo, de ahí que tuviese una pasada de frenada dadas sus ganas de hacerlo.
Ricciardo también estuvo genial, a la chita callando, y tras una monta final de superblandos, marcó la vuelta rápida definitiva y adelantó a Felipe Massa para finalizar cuarto. Massa realizó una carrera tranquila a lo suyo y acabó quinto sin hacer nada extraordinario, pero en una actuación muy correcta, muy sólida.
Así que nuevo doblete de Mercedes con Rosberg y Hamilton, seguidos de: Vettel, Ricciardo, Massa, Grosjean, Hulkenberg, Bottas, Sainz, Verstappen, Palmer, Magnussen, Pérez, Button , Nasr y Wehrlein.



Rosberg empieza como acabó el pasado año: ganando.



Ha sido un  GP interesante con muchos elementos destacados.
Lo mejor ha sido constatar, de nuevo, lo seguros que son los F1 actuales. Alonso salió ileso de un accidente del que seguramente 15 años atrás no lo hubiera hecho. No puedo olvidar el “accidente” de Alonso el año pasado en la curva 3 de Barcelona.  Fue casi como si aparcara y el coche no sufrió daño alguno. Sin embargo estaba inconsciente, estuvo varios días ingresado en un hospital y se perdió la primera carrera del año.
¿Y  nos quieren hacer creer  que fue por el inexistente accidente? Curiosamente no hay imágenes de su cámara, ni de la de Vettel  -que venía por detrás- ni de las de pista. Curioso, ¿no? Algo pasó y no lo han querido contar. ¿Desvanecimiento, calambrazo? Vete a saber, pero choque no.
En Australia el Mclaren quedó hecho trizas y Alonso salió sin inmutarse, a Dios gracias –y a la tecnología- y reabrió el tema del cierre del habitáculo, que bajo mi punto de vista no se debería cerrar. Hulkenberg tampoco está de acuerdo con esa medida que parece se tomará el año 2017. Cierto que los pros superan a los contras, pero lo mismo puede decirse de las ruedas descubiertas.  Al final la cuestión es dar un equilibrio entre tradición y seguridad. Y a día de hoy los F1 son segurísimos.






Animo a todos a que vean el choque entre David Coulthard y Alenxander Wurz  en Australia en 2007 en el cual el coche de Coulthard le pasa a centímetros de la cabeza del austríaco. Lo que reafirma la necesidad de habitáculos cerrados. Pero es que de no tener las ruedas descubiertas eso jamás habría sucedido. Que cada uno saque sus conclusiones, pero al menos yo, el tema de habitáculos cerrados  y demás me lo planteo desde 2007,  y no desde lo de Bianchi o lo de Alonso en Spa 2012 como la mayoría.



Hamilton estuvo impecable en los entrenamientos. No así en carrera. Va siendo hora que asuma sus errores.



Me llaman la atención las quejas de Hamilton y Verstappen en este GP. El primero acusó, sin pique ni aspavientos, pero acusó,  a su compañero de arrinconarlo en la primera curva y provocar que bajase al sexto lugar…
¡Hombre, y lo dice Hamilton precisamente!, experto en esas lides y que sin ir más lejos el año pasado en Suzuka y Austin mandó fuera de pista (a la escapatoria asfaltada) a su compañero Rosberg arruinándole la carrera en ambas ocasiones.  Al margen de que Rosberg le dejó espacio, Hamilton debería hacérselo mirar, parece que no se da cuenta de que a lo que él juega también pueden jugar los demás. Si te molesta tanto, entonces no lo hagas tú.
Y lo mismo para el niñato subidito ese de Verstappen, un engreidillo que se cree que por ser un piloto muy bueno y de futuro hay que aguantarle sus imbecilidades. A lo mejor las hace simplemente porque es imbécil y no hay que darle más vueltas. Ya se sabe, por mucho que enchufes el árbol, si no hay luces…
Pero es que Max, babión, lo que no se puede –debe en realidad- es desobedecer las órdenes de equipo y luego llorar patéticamente por radio pidiéndolas cuando a ti te convienen. Si fueras consecuente, no lo harías, pero tú no eres ni consecuente ni nada.  Bueno, sí, eres un buen piloto, pero eso no lo justifica. Está claro que te crees con derecho a ello, aunque no lo tengas. El caso es que eres un mimado de mierda de Red Bull y te consienten tus estupideces y  mamonadas, dándote de paso, prioridad en la mayoría de las ocasiones aunque vaya en contra de los intereses del equipo.
A ver si te enteras, querubín, que así no se anda por la vida. Tal vez con los años aprendas, o tal vez no. Por cierto, si eres tan superior a Sainz,  tan buen piloto y eso, ¿por qué pides que te deje pasar? ¿Por qué no lo pasas tu, listillo? Anda y arranca por ahí…



Toro Rosso y sus pilotos brillaron con fuerza en Melbourne. Lástima que Verstappen no esté a la altura como persona.



Respecto a la competición en sí, a destacar la excelente carrera de Grosjean con el nuevo –y de verdad- equipo yankee Hass que, este sí, monta motores Ferrari igualicos a los del SF16-H a diferencia de Toro Rosso, que monta los del año anterior. Puntuó en su debut, y puntuó de ”verdad”, siendo sexto. Ya me entienden. Claro que le favoreció la interrupción de la carrera, pero oye, aprovechó la oportunidad.
La carrera fue dominada por Ferrari más de la mitad de las vueltas y perdieron toda opción de victoria al errar la táctica cuando la carrera se interrumpió. Apenas se pudo distanciar Vettel, con superblandos, de Rosberg, con medios, pero así todo dio la impresión de que el Ferrari puede estar ahí. Ojalá. Sin la interrupción tal vez hubiese ganado. A ver en Barhein…



Grosjean llevó al nuevo equipo Hass a un brillante sexto puesto y ganó el premio a: "mejor piloto del fin de semana"





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