domingo, 10 de julio de 2016

GP de Inglaterra 2016


Hamilton domina, Verstappen deslumbra y Ferrari naufraga.







El GP de Inglaterra es el GP de “casa” de la F1, no en vano casi todas las escuderías tienen su sede ahí. Mercedes, Red Bull, Force India y Renault corren bajo las banderas alemana, austriaca, de la India y Francia, pero sus equipos están en en Inglaterra, no sólo por “comodidad”, sino porque adquirieron equipos que anteriormente eran ingleses.
Se libran de la quema, Ferrari (obviamente), Toro Rosso (que era Minardi), ambos con sede en Italia, Sauber en Suiza y Hass, en estados unidos, aunque el parte del coche se monta en las instalaciones de Dallara, en Italia.
Pilotos ingleses apenas tres: Hamilton, Button y Palmer, y eso que en la F1 no ha llegado el brexit, pero vamos, que claramente es el GP de casa para la mayoría. Eso sin contar que quienes mueven el cotarro y todo el tibilorio son también british.
Las aguas llegaban un poco turbias en Mercedes tras lo acontecido en la última vuelta en el GP anterior y aunque les permitían seguir luchando entre ellos, les advertían de severas sanciones en caso de que volvieran a colisionar o a sacarse de pista. Y es que ya llevan unas cuantas...
Fuera aparte está la salida de tono de Lauda -luego se retractó echando la culpa al mensajero- contando que en el GP de Europa Hamilton destrozó por una rabieta -al estrellarse en calificación- la habitación del hotel en el que se alojaba, aunque pagó los daños. Creo que de ser cierto esto (ni confirmo ni desmiento, cada cual que saque sus conclusiones), en primer lugar Lauda debería haberse callado. Y en segundo, no dice nada en favor de Hamilton. Un cabreo en el acto, tirando el volante por los aires, golpeando con el mismo el coche (como Mansell en Australia 89), tirando el casco o los guantes, etc... en el momento del accidente por frustración se entiende. Pero pasado ese momento, no. Y menos destrozar una habitación. Eso no es normal, es para hacérselo mirar.
En Ferrari y Pirelli alegaron que el pinchazo de Vettel en Austria no fue causado por un excesivo desgaste de las ruedas, sino por restos en la pista. Así todo, estaban en las últimas.
Ferrari anunció el viernes la renovación de Kimi Raikkönen, cortando por lo sano más especulaciones. El finés declaró: “me alegro, porque así dejareis de preguntarme por mi futuro” la verdad es que tiene gracia el condenao. Más en serio alegó alegrarse de la confianza depositada en él por la Scuderia.



Raikkönen se mostraba "eufórico" por su renovación con Ferrari.



Los libres vieron siempre un claro dominio de Mercedes, que no auguraba, al menos de cara a la pole, nada bueno. Red Bull se mostraba superior a una Ferrari en dificultades toda vez que Alonso brillaba.
Los últimos libres vieron el fortísimo accidente de Ericsson, que no pudo participar en la sesión de calificación al no dar tiempo a reconstruir su coche, aunque por precaución lo mandaron al hospital. Repito lo absurdo que es esto. Con muletos no pasaría, como deseo que en la cita final con el título en juego, esto le pase a un candidato al título y toda la emoción de esa carrera se vaya al traste. A ver si de una vez nos damos cuenta de dónde se ahorra y dónde no. Y no sólo eso, sino de lo que es razonable y de lo que es una completa estupidez.
En la Q1 los Mercedes dominaron, pero fueron terrenales y dejaron al primero de los demás, un entonadísimo Max Verstappen, a sólo medio segundo. Máx ya daba síntomas de que sería harto difícil superarlo. Lo bien que lo está haciendo el bravo piloto holandés realza más a nuestro Carlos Sainz, que le mantuvo el tipo la mar de bien en Toro Rosso.
Button, al que el GP de casa siempre se le ha atragantado, incluso en 2009, el año de su título, se abstuvo por un exceso de confianza de realizar un segundo intento y no pasó el corte. Cosas que pasan.
Tras el inglés otro inglés: Palmer. Tras ellos dos se quedó Haryanto, que superó de nuevo a Wehrlein, demostrando que por muy piloto de pago que sea, no desmerece en absoluto. Wehrlein y Nasr fueron los dos últimos.
En la Q2 los Mercedes, y Hamilton sobremanera, se fueron a otro nivel, mientras que Verstappen se consolidaba y Vettel se mostraba más a tono. Raikkönen hizo un trompo arruinando su primer intento, al segundo se pasó de frenada y perdió otra oportunidad. Pero había tiempo y logró hacer la vuelta buena después para salvarse.



Ericsson "arreglando" el Sauber.



Los que no se salvaron fueron: Pérez, Massa, Grosjean, Gutiérrez, Kvyat y Magnussen.
Visto lo visto ya se sabía que la pole era cosa de dos, y de nuevo Hamilton impuso su ley a la primera. Pero por poco tiempo, ya que anularon su registro por apurar de más en la curva 9, lo que es Copse de toda la vida, vamos. Estoy a favor de la tolerancia cero en este tipo de acciones, lo que pasa es que Hamilton sólo estaba encima del bordillo, mientras que en otras partes de la pista, los pilotos trazaban por fuera del mismo sin consecuencia alguna. Por lo visto los comisarios sólo actuaban en determinadas curvas “porque en ellas se gana tiempo” Pues no, la pista se ha de respetar siempre, y si no se quiere estar cada dos por tres sancionando, que pongan grava, hierva o los pianos amarillos de Austria. Lo que sea para que el piloto que se pase de “verdad” pierda tiempo y así nos quitamos problemas. Da por saco ver en muchos circuitos a los coches con las cuatro ruedas fuera. Por fuera pero por asfalto. ¡Penoso!
Hamilton se rehízo para lograr la pole en 1,29”287, no tan rápido como en Q2 (1,29”243) pero de sobra para ser pole -con récord de la pista- en casa. Y ya lleva 55 el chaval. A este ritmo pronto superará al indiscutible Rey de la pole de la era moderna: Ayrton Senna da Silva y luego, al Kaiser Michael Schumacher.
Rosberg fue segundo y no pudo en ningún momento molestar a su compañero, aunque esperará hacer una mejor salida para poder imponerse a Hamilton en su casa.
Verstappen confirmó todos los pronósticos y fue un claro -y cómodo- tercero seguido de su compañero y de los Ferrari de Raikkönen y Vettel. Esta pista se le da bien al finlandés, ya el año pasado dominó claramente a su compañero hasta que llegó la lluvia. Vettel se quedó con la imagen de la clasificación con una espectacular cruzada, pero poco efectiva -no se puede tener todo- en Stowe.
Bottas, Sainz, Hulkenberg y Alonso completaron los diez primeros. Hulkenberg y Alonso también perdieron su mejor tiempo por pasarse en Stowe. Veremos como sancionan los comisarios estas acciones en carrera. Un Alonso que de vez en cuando vuelve a sus peores tiempos y recalca su “alegría” por los malos resultados de Ferrari. Como si los de Mclaren fuesen mejores. Una pena que justifiques cosas que no hace falta justificar. Acabaste una etapa en Ferrari e iniciaste otra en Mclaren, deja a la Scuderia en paz, que salvo porque no pudo darte un gran coche, se ha portado contigo la mar de bien.



Alonso demostró que Mclaren sigue progresando.



Decepción de nuevo en Williams y muy bien Sainz, muy superior a su compañero Kvyat.
Vettel, con su enésimo problema en la caja de cambios, retrocedió por sanción de sexto a undécimo. Contento estará.
Para el domingo anunciaban lluvias, y esta llegó antes de la carrera. Cuando se dio la salida no llovía pero la pista estaba mojada, de modo que se procedió a salir detrás del coche de seguridad, lo que impidió el ataque de Rosberg a Hamilton en la salida, el punto flaco del inglés ultimamennte.
Lo de salir detrás del coche de seguridad es una mamarrachada. No se para que narices Pirelli se molesta en hacer ruedas de lluvia, las mal llamadas de lluvia extrema, porque cuando hacen falta no se usan porque sale el coche de seguridad. Con hacer mixtas les basta y les sobra.
Culpar de timorato a Charlie Whiting, o decir que ya está mayor para esto sería lo fácil, pero lo cierto es que Charlie es un director de carrera que refleja la sociedad moderna de bienestar en la que en Europa estamos instalados. Todos sabemos muy bien cuales son nuestros derechos pero no así con nuestras obligaciones, siendo totalmente incapaces de asumir nuestras responsabilidades, y culpando a las autoridades, estado, sociedad o a quien sea de nuestros males. Pero nunca, nunca jamás culparnos a nosotros mismos. Divago esto porque la F1 es un reflejo de la sociedad y todos queremos espectáculo, adelantamientos y carreras en lluvia, pero si luego pasa algo, en lugar de aceptar los hechos y ver que ha fallado -si es que ha fallado algo- buah, buah, sniff, sniff, a señalar con el dedo y a buscar culpables. Culpamos a la FIA por no parar la carrera -que pedíamos a gritos instantes antes no parar- etc... porque eso es lo que pasa, que muchos aficionados no aceptan que el automovilismo es un deporte de riesgo. Se niegan a aceptarlo. Pero lo es, de bajo riesgo afortunadamente, pero de riesgo. Si queremos riesgo cero, entonces a correr con consolas. Y por eso tenemos espectáculos bochornosos como este. Pues que se aclaren de una vez, o se corre en lluvia o no se corre, pero estas payasadas, que datan desde Japón 2007, sobran. ¿Llueve? Pues a correr, y punto.



Fórmula 1, "espectáculo" en estado puro.



Con el coche de seguridad en pista, Hamilton estuvo a punto de estrellarse contra él cuando calentaba los frenos. Hubiera sido la mar de divertido. Tal vez eso sirviera para que no lo sacasen tan a menudo innecesariamente, como era el caso. Afortunadamente no pasó nada, y  para cuando se retiró el coche de seguridad en la vuelta número cinco, muchos pilotos entraron en tromba a boxes a poner neumáticos intermedios. Sí la pista está para intermedios no se que hostias pinta el coche de seguridad en ella. Como mucho acepto salida lanzada.
Los cuatro primeros no pararon y Ricciardo, el cuarto, lo hizo a la vuelta siguiente, manteniendo por los pelos posición con Raikkönen, heredando Pérez la cuarta plaza, y le vino al pelo, porque Wehrlein se salió de pista en Abbey (un clásico hoy) provocando la salida del coche de seguridad virtual, el cual duró lo suficiente para permitir a los cuatro primeros: Hamilton, Rosberg, Verstappen y Pérez no sólo mantener posición, sino apenas perder tiempo. Lo que en Canadá no pudo aprovechar Vettel, en Silverstone estos cuatro sí.
El coche “virtual” se quitó pronto y la carrera, con todos con mixtas, estaba así: Hamilton, Rosberg, Verstappen y Pérez claramente por delante de: Ricciardo, Raikkönen, Sainz, Massa, Bottas, Hulkenberg, etc...
Hamilton, que contaba con 4” sobre Rosberg gracias a su gran giro inicial, aumentó hasta 7” cuando Rosberg se fue quedando sin ruedas y era acosado por Verstappen, el héroe del día. Pérez iba poco a poco descolgándose -bastante hacía- y Ricciardo dejaba tirado a Raikkönen sin contemplaciones a la vez que iba a la caza de Pérez. Bottas hacía un trompo y se descolgaba definitivamente de las primeras posiciones.
Rosberg claudicaba ante un gran Verstappen en la vuelta quince, poco antes de que Raikkönen fuese el primero en montar ruedas de seco.



Gran duelo Verstappen-Rosberg, en la pista ganó  Rosberg, en los despachos Verstappen.



Tras Raikkönen paró Vettel, y luego el resto. Eso dio lugar a que Nasr llegase a marcar la vuelta rápida momentaneamente. Vettel se marcó un trompo y perdió lo ganado.
Todos con seco y en la vuelta número veinte la cosa andaba así: Hamilton, Verstappen a 7”, Rosberg a 10” y el resto a un mundo.
Pérez era el líder “de os demás” por poco tiempo ya que Ricciardo lo adelantó en la vuelta veintiuno.
La curva Abbey vio muchos fallos de pilotaje, Raikkönen falló dos veces, como Verstappen. Hamilton, Pérez, Alonso y Haryanto una. Y las que me dejo.
Alonso se salió espectacularmente, pero pudo volver a pista perdiendo cualquier opción a puntos, a diferencia de Haryanto, que ahí se quedó.
Ver tanto fallo de pilotaje y sin abandonos es bueno por un lado. Pero que Rosberg -que no falló- viera como Verstappen se salía de pista dos veces y se reincorporaba por delante de él sin apenas perder tiempo no creo que sea justo. Eso sí, sanción a Palmer por un cambio de ruedas “peligroso” y muchos pilotos fuera de pista a lo bestia sin que pase nada. No olvidemos que de no estar Abbey como está, varios de los pilotos que ahí se salieron, no se hubieran reincorporado tan campantes. Hay que premiar el pilotaje, y perdonar tanto error no es justo.
Vettel adelantó a Massa de manera bastante cuestionable, no se lo llevó por delante de milagro, y de no haber escapatoria los dos se habrían quedado ahí. Hay que controlar más, y los cinco segundos de penalización que se llevó merecidamente pudieron ser más. Aunque Massa, que se defendió antes de Alonso de manera aún más agresiva, no tenía mucho de lo que quejarse.
Apenas una vuelta después, en la treinta y ocho, Rosberg por fin adelantaba a Verstappen y se ponía a marcar vueltas rápidas para intentar alcanzar lo inalcanzable: a Hamilton.
Kimi en su ataque final logró pasar en la vuelta cuarenta y seis a Pérez, a la vez que Rosberg tenía problemas de cambio y pasaba de atacar a Hamilton a defenderse de Verstappen. Por los mensajes de radio que recibió para solventar el problema le cayeron diez segundos de penalización. Max, que aparte de talentoso y bocazas parece tener una flor en culo, heredaría el segundo lugar, aunque eso se sabría después de finalizado el gran premio. El que no podría heredar la novena plaza de Vettel -que tampoco era gran cosa- por los cinco segundos de penalización del alemán, fue Kvyat. Y es que al ruso este año no le sale nada bien.
Nada varió y la carrera concluyó con Hamilton por cuarta vez ganador del GP de su país secundado en el podio por Rosberg y Verstappen.
Ricciardo, Raikkönen, Pérez, Hulkenberg, Sainz Vettel y Kvyat completaron el resto con derecho a puntos.






El héroe del día fue Verstappen, que nadie lo dude, y el fracaso se repartió entre Ferrari y Vettel. Ferrari no se adaptó bien a Silverstone, y además, su coche no parece ir nada bien en agua. Vettel por su parte, no estuvo fino,cometió errores y no fue rápido. Al menos Kimi salvo la honrrilla con el quinto puesto final en su GP 100 con Ferrari y haciendo valer su renovación. Y es que el Ferrari no daba para más aunque no es su posición real. Un mal fin de semana, sin más.
Mclaren rozó los puntos, pero no pudo ser. Alonso con ruedas nuevas al final se quedó a un tris de marcar la vuelta rápida, que fue para Rosberg.
Buena carrera de los Force India y de Carlos Sainz, que también tuvo un error de pilotaje, pero ¿quien no lo tuvo? Decepción en Williams, aunque no tanta como en Ferrari.
El campeonato se aprieta y Hamilton está ya a sólo 1 punto de Rosberg. En quince días más, en Hungría. Circuito en dónde Red Bull debería ir bien y Ferrari, justo ganador el año pasado, también. Tal vez haya una bonita carrera, o un paseo Mercedes. Lo veremos y yo se lo contaré.
Por cierto, hoy era una carrera difícil, y no me cabe duda de que dos genios hubiesen sacado partido de ella: Senna y Schumacher. Y no me olvido de Jean Alesi, que si bien no era tan bueno como estos dos -casi nadie lo es- en determinadas circunstancias era su igual, incluso mejor. Y hoy era una de ellas. Su capacidad, como demostró varias veces a lo largo de su carrera -sobre todo en Japón 1995- de correr y adelantar con neumáticos de seco en pista húmeda, superando a rivales pisando la zona húmeda mientras ellos iban por la seca, le hubieran venido al pelo hoy. Hubiera puesto a todos los “gallos” de la F1 actual en su sitio.



4 comentarios:

  1. Qué cierto es lo de Alesi-Schum..
    Por otro lado, parece ser que los Pirelli de agua no funcionan y encima la estúpida norma de no poder reglar el "botijo" para lluvia, además del cague que se tiene a raíz de la muerte de Jules... Cuando no se saben hacer las cosas de la manera debida en tiempo y lugar se recurre a lo sencillo y cutre, que es sacar el caldero de seguridad a hacer el indio y estropear la carrera aun más de lo que ya están.

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