¿Que pasó?
¿Que qué pasó? Pues a ciencia
cierta, ni idea, solo puedo sacar conclusiones acerca de lo que he
leído y, a partir de ahí, saco mis propias conclusiones. Si son
acertadas o no, es algo que seguramente nunca sabré con certeza.
Por partes: en 1981 Williams y Jones
eran los actuales campeones, en ambos casos por primera vez, y entre
ellos -Williams y Alan Jones- se creó un vínculo muy estrecho por
el cual Jones se convirtió en algo más que un piloto. De hecho, si los Ferraristas tienen a Villeneuve como patrón por el que cortar a
sus pilotos, el equipo Williams, capitaneado por Fran Williams y
Patrick Head, tiene como patrón para sus pilotos al rudo
australiano. El que mejor parece ser que se adaptó a ese “rol”
debió de ser Nigel Mansell, visto el aprecio que le tienen.
A quien no tenían ningún aprecio sin
embargo, era a Carlos Reutemann, al que ficharon como número dos, y
cuyo objetivo -para el equipo- era que sumase puntos para el mundial de
constructores y apoyara sin reservas al la rutilante estrella
australiana. Si Reutemann quería ganar, eso sería sólo en caso de
que Alan no pudiese.
Brasil 1981, Reutemann supera a Jones sin contemplaciones y se desata "la guerra" entre el equipo y el argentino. |
Las cosas fueron bien en 1980, pero en
1981 se torcieron cuando, en la segunda cita, en Brasil, Reutemann
ganó la carrera de punta a punta bajo un intenso aguacero. Y no sólo
eso, aventajó en un segundo a su compañero en calificación.
Bueno, pues aunque era la segunda cita
del año y era muy pronto para dar ordenes, las dieron. Ordenaron a
Reutemann dejar pasar a Jones, cosa que Reutemann no hizo. Y a partir
de ahí, la relación se deterioró.
Cierto que Reutemann era el número dos
del equipo por contrato pero arrebatarle un triunfo tan merecido de
esa manera, no es de recibo . Curioso que nadie llame “traidor” a
Reutemann por desobedecer al equipo, cosa que sin embargo sí se hace
con Pironi, que por cierto, no desobedeció a nadie. El típico doble
rasero, depende de sí te cae bien alguien, criticas o alabas su
actitud de forma parcial. Muy bonito.
Fuera aparte de eso, Reutemann, por
desobedecer, podía tener problemas en el equipo, pero nadie imaginó
que tantos. No es la primera vez que un piloto desobedece, y no pasa
de la reprimenda, o ni eso.
Las órdenes eran claras, pero todo el mundo entiende que, deportivamente hablando, eran injustas. |
Mucho tuvo que ver la mezquina actitud
de Alan Jones y de un equipo Williams plegado sus deseos. Alan
Jones, piloto duro y curtido -recomiendo que lean sus crónicas en
Grand Prix International en 1981, llenas de humor e ironía- demostró
no ser ni la décima parte de duro como piloto que como persona. Si
bien fuera de pista era capaz de partirse la cara con quien fuera -al
GP de Italia de ese año llegó con un dedo roto por una pelea en un
bar- en la pista no lo era tanto, ya que de serlo, hubiera aceptado
la superioridad de Reutemann en Brasil y le hubiera quitado hierro al
asunto.
Pero fue todo lo contrario. Agarró una
pataleta de padre y muy Señor mío, negándose a subir al podio a
por el trofeo y manteniendo, a partir de entonces, una actitud
despótica y mezquina con su compañero.
Si Alan Jones fuera un verdadero
campeón -que no lo era- habría felicitado a Reutemann. Pero no fue
el caso, y en el equipo tiraron de forma descarada a su favor.
¿Quiere eso decir que tuvo Alan mejor
material y sabotearon a Carlos? No, ese cuento de que un equipo hace
un coche bueno y otro malo es eso, un cuento que sólo les sirve a
algunos para justificar cuando el piloto que les gusta es superado
por su compañero. Incluso hay pilotos que se creen ese cuento cuando
su compañero es muy superior. ¿No es así Jos Verstappen y Johnny Herbert? En fin.
Pero de lo que no había ninguna duda
era de que el equipo estaba con Alan, y sin duda eso mermaba las
prestaciones de Reutemann. El que las novedades, cuando las hubiere,
llegasen primero a Jones era lo de menos, al fin y al cabo eso pasa
muchas veces y no supone gran cosa, pero el vacío al que sometieron al argentino sí. No fue
nada bueno de cara a sus aspiraciones al título.
De ahí en adelante cada uno tiró por su lado. Jones destacó con actuaciones más brillantes, sobre todo en carrera, pero cometió más errores de conducción, y además tuvo varios abandonos por problemas mecánicos. Reutemann, sin embargo, jugó la baza de la regularidad, y eso le permitió llegar a la última cita, la de las Vegas, con aspiraciones al título, a diferencia de Jones.
De ahí en adelante cada uno tiró por su lado. Jones destacó con actuaciones más brillantes, sobre todo en carrera, pero cometió más errores de conducción, y además tuvo varios abandonos por problemas mecánicos. Reutemann, sin embargo, jugó la baza de la regularidad, y eso le permitió llegar a la última cita, la de las Vegas, con aspiraciones al título, a diferencia de Jones.
En las Vegas, la última cita a la que
llegaba Reutemann con un punto de ventaja sobre Piquet en su lucha
por el título, el argentino partía en la pole secundado por su
compañero Jones.
Todo apuntaba a título, pero en carrera su coche, con unos reglajes de suspensión inadecuados, se tornó inconducible y por si fuera poco, tuvo problemas de cambio.
Lo más cerca que estuvieron Reutemann y Jones fue en la pista. Fuera de ella, los separaba un abismo. |
Todo apuntaba a título, pero en carrera su coche, con unos reglajes de suspensión inadecuados, se tornó inconducible y por si fuera poco, tuvo problemas de cambio.
Alan Jones ganó la carrera y Nelson
Piquet, que sólo fue quinto, el título. Reutemann acabó octavo y
lo perdió todo.
En Williams, sin embargo, parecían
estar muy contentos celebrando la victoria de Jones, como si la
pérdida del título de pilotos les diese lo mismo. Vale que ganaron
el de constructores pero... ¿quien no quiere ganar el de pilotos,
que además es el más conocido? Pues parece que les daba igual,
contestaban casi con ironía: “parece que no acertamos con los
reglajes de suspensión del coche de Carlos...”, ni se molestaban
en disimular.
¿Sabotearon el coche de su piloto?
Nunca se sabrá, ya que si lo hicieron, jamás lo reconocerían, pero
yo, personalmente, creo que no. Creo que ningún equipo haría una
cosa así a uno de sus pilotos, ni darle peor coche, como si fueran a
hacer uno “malo”. Otra cosa es, que una vez perdido el título
pensasen: “nos quedamos sin título de pilotos, vale, una faena,
pero por lo menos lo perdió Reutemann y no Jones” y se consolaron
con la victoria de Jones, todavía creyendo que le harían cambiar de
idea y que el australiano no abandonaría la F1.
Una pena para el gran Carlos Alberto
Reutemann, el Lole, por la expresión de cuando era crío y decía
que iba a ver: “Lolechones”, el quedarse sin el ansiado y
merecido título. Si en Williams le hubiesen apoyado, hubiera sido campeón.
Por cierto, ¿saben uds. que Reutemann
ganó en 1981 el GP de Sudáfrica? Pues sí, lo ganó por delante de
Piquet, y era la primera carrera puntuable del año. Pero la guerra
FISA-FOCA, y el que los equipos partidarios de la primera: Ferrari,
Renault y Alfa Romeo, no tomasen parte, hizo que la FISA la retirase
del calendario, como hizo el año anterior con la carrera del Jarama.
Supongo que habrán caído en la cuenta de que, de haber mantenido dicha carrera en el calendario, Reutemann sería el campeón del mundo
1981.
Lo mismo si la última cita, la de Las Vegas, incluida por la FISA con "calzador" fuera de plazo, no se hubiera celebrado.
Lo mismo si la última cita, la de Las Vegas, incluida por la FISA con "calzador" fuera de plazo, no se hubiera celebrado.
Espero que estas líneas sean un pequeño homenaje.
No te acostarás....
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