De excursión
Tras el GP yankee, Lewis Hamilton se ha
coronado cuasi-campeón del mundo. Para no ganar, debería mejorar
con creces su "brillante" actuación de 2007, en la que
tiró por la borda un título que tenía en el bolsillo, para
regocijo de Raikkönen y de todos los Ferraristas; ¡gracias Lewis!
El caso es que Hamilton ha cimentado su
título en la segunda mitad de la temporada, de hecho, más que
cimentarlo él, lo ha perdido Ferrari con accidentes y averías.
Singapur, Malasia y Japón han sido un trio de carreras infernal para
la Scuderia, en donde han perdido todo lo ganado hasta entonces. No
hace falta decir que, en condicones normales, Ferrari podría haber
ganado en más de una de estas citas y que, por tanto, el campeonato
estaría a día de hoy abierto.
Pero las carreras son así y no hay que
darle más vueltas. Hamilton lo tiene tan "chupao" que le
vasta con igualar el desatre de Vettel en esas tres citas en lo que
queda de temporada y sería campeón sin despeinarse.
Respecto del desastre de Ferrari, me
gustaría decir que ver a Kimi quedarse sin salir en Malasia no es de
recibo. Ya lo comenté el año pasado con Grosjean cuando en Singapur
y Brasil no pudo correr a causa de un fallo de frenos y un accidente
respectivamente. De tener un muleto habría corrido, lo mismo que
habría corrido Kimi en Malasia de disponer uno. No es de recibo esa
absurda reglamentación que impide su uso. Ni se ahorra dinero ni
nada. Al contrario, más trabajo, ya que en caso de rotura de chasis,
hay que cambiarlo todo a otro "desnudo", lo que supone un
trabajo extra totalmente innecesario, como le pasó a Alonso en
Monaco 2010, o este fin de semana a Vettel y, en caso de avería
antes de ir a parrilla, abandono, como los antes mencionados. Peor
para el espectaculo sin ahorrarse ni un mísero duro. Como escribí
en su momento, hará falta que se quede en tierra un aspirante al
título, a ser posible en la última cita, para que se den cuenta de
lo ESTÚPIDO de dicha norma.
A ver si los nuevos dueños lo cambian,
no sólo acercar más la F1 al público -que está muy bien-, sino
cambiar normas estúpidas. Los muletos han de volver, se debe
permitir cambiar reglajes en caso de lluvia, no deben estar limitados
los juegos de ruedas de agua, etc...
Sainz debutó brillantemente con Renault. |
Respecto al GP en sí, debutó en
Renault Carlos Sainz, algo que yo no me esperaba, la verdad, y de
manera muy brillante, con un espectacular adelantamiento a Pérez que,
sino fue el mejor del fin de semana, fue porque tanto Vettel como
Verstappen también tuvieron lo suyo. Fue un brillante séptimo.
En Toro Rosso volvió Kvyat en
sustitución de Pierre Gasly, que se ausentó de la carrera para
luchar por el título de la Súper Fórmula, sin conseguirlo, ya que
un tifón suspendió la carrera de Japón.
El neozelandés Brendon Hartley
sustituía a Sainz en Toro Rosso, y sustituirá a Kvyat en México a
pesar de que el ruso lo ha hecho mucho mejor este fin de semana, de
hecho, llevó el Toro Rosso a la novena posición final, lo que no
está nada mal.
Max Verstappen renovó, de manera
sorpresiva y pese a sus múltiples quejas, hasta 2020 con los
energéticos, toda vez que Alonso confirmó que se quedaba, ¿a dónde
iba a ir?, en Mclaren. Una Mclaren que, una vez roto con Honda, va
mejor que nunca en prestaciones, no así en fiabilidad. El caso es
que la mejor clasificación de Mclaren estos tres últimos años han
sido quintas posiciones. Este año ni eso, lo mejor una sexta, lo que
en términos de puntos de antaño, significa un único y mísero
punto. Es de supner que con Renault llegarán tiempos mejores.
En calificación vimos otra norma a
cambiar, esa que deshace el desempate entre pilotos en razón de
quien logra el tiempo antes, cuando lo lógico es que en casos así
prevalezca la segunda mejor vuelta. Ricciardo y Kimi empataron pero
fue el australiano el que partiría por delante al hacer su tiempo
unos segundos antes. Sin embargo era Kimi quien tenía la segunda
mejor vuelta, de hecho, había sido, a lo largo del fin de semana
constantemente más veloz que el aussie. Curiosa forma de premiar la
velocidad. Nadie se quejó. En fin, pilarín, hayá ellos.
Gran remontada de Verstappen sin su merecida recompensa. le duró poco la alegría. De ahí, al llanto (pataleta en realidad) |
La carrera no tuvo historia de cara a
la lucha por la victoria una vez que Hamilton recuperó
brillantemente la posición a Vettel -que lo había superado en la
salida- controlando desde entonces la carrera con comodidad. Su
adelantamiento pilló por sorpresa a un Vettel que no se defendió.
Claro que Mercedes dio un poco de emoción cuando llendo de sobrados
apuraron sin necesidad la parada de Hamilton. Si llega a ser 0"5
más lenta, Seb se pone líder. Esos riesgos no tienen sentido.
Vettel no tuvo ritmo en ningún
momento, y cuando vieron que Bottas se le acercaba, optaron por
copiar la estrategia de Verstappen, lo cual le llevó a marcar la
vuelta rápida por una milésima y hacer un brillantísimo
adelantamiento -en compensación por su modorra inicial frente a
Hamilton- a Bottas por el exterior en la curva 1 con un doblado -que
no influyó- por medio.
Acto seguido Kimi se dejó pasar, muy
pronto a mi juicio, porque perdió un tiempo precioso y no había que
olvidar que Verstappen venía fortísimo por detrás. Una vez se
deshizo de Bottas, el tulipán iba a por Kimi. Yo pensaba no podría
con él pero, ¡zas!, Kimi entra incomprensiblemente abierto en la
curva 16 y Verstappen, el implacable, ascendió a una merecida
tercera posición.
Pero fue desposeido de ella por salirse
del trazado. Reglamento en mano, sanción justa, pero claro, si luego
miramos la condescendencia de los comisarios con otras maniobras
mucho más punibles, uno no entiende esta descalificación. Es cierto
que acortó el trazado y que ganó una posición, pero no es menos
cierto que, de haberse abierto un poco más, no se habría saltado el
trazado y habría adelantado igual. Es decir, que el acorte del
trazado en realidad no influyó, y muchas veces se usa este
razonamiento para no sancionar. Mucho más grave fue cuando Hamilton
se saltó las tres primeras curvas de México el año pasado en la
salida, o la chicane en Mónaco defendiéndose de Ricciardo. Ambas
maniobras quedaron impunes, cuando debería haber sido sancionado con
dureza. Por mucho menos otros, como esta vez Verstappen, se la cargan
con todo el equipo.
Por cierto, que Kimi se dejó ir tanto
al entrar por meta, que casi no sube al podio pese a la sanción de
Max.
Brendon Hartley debutó en F1 en Toro Rosso, pero fue el "regresado" Kvyat el que les dio los puntos. |
Las quejas de algunos sectores llamando
a la FIA: "Ferrari International Assistance", como hizo
Verstappen padre, no dejan de tener gracia si uno no lo toma en
serio, porque en caso contrario la cosa cansa. Para empezar, Ferrari
no reclamó, actuaron de oficio los comisarios y, para continuar, no
es Ferrari la más mimada de la FIA. En algunos aspectos sí, pero en otros no. La FIA siempre es más tolerante con los constructores, ya
que Ferrari "siempre va a estar ahí", mientras que los
constructores son más volátiles, dependiendo más de resultados y
dádivas. Conviene tenerlos contentos para evitar que un directivo
vea la lista de gastos por correr en F1 -esos coches que ni siquiera
tienen guardabarros- y cancele el proyecto. Mercedes, ahora mismo,
podría irse por aburrimiento.
Volviendo a lo de Max, la culpa es de
tanta escapatoria asfaltada que perdona errores, incentiva a
sacar de pista a rivales en caso de lucha por posición o, simple y
llanamante, a trazar por fuera cuando conviene.
En este GP vimos como Ricciardo se
lanzaba en plan "banzai" desde las quimbambas a por Bottas
y, de no ser por la escapatoria asfaltada, o abandona Bottas, o los
dos. Y eso no es de recibo. Debió -él sí- ser sancionado.
Y luego vamos a los pilotos que se
equivocan y no ganan -ni pierden- tiempo, como Vettel, por ejemplo,
que se salió de pista en la curva 19, al igual que muchos otros
durante el fin de semana, y todo quedó en nada. ¿Que hacer?
¿Sancionar o no sancionar? Difícil decirlo, el caso es que con
hierva o puzolana el error habría tenido su precio -y con un muro ni
te cuento- pero así, es difícil decidirse. Se suele sancionar, en
esos casos, por reiteración. Lo malo es que muchas veces que se sale
un piloto en esas condiciones bajo la presión de otro -como Max el
año pasado ante Seb en ese mismo punto- también se mira hacia otro
lado, y eso no es justo. En mi opinión, para evitar esto, lo suyo es
poner pianos más altos y un tramo de hierva o grava para evitar que
los errores sean gratis sin merma de la seguridad. Eso, o sancionar
siempre.
Pérez no brilló en Austin, buscará resarcirse, dentro de siete días, en casa. |
En una semana Hamilton se coronorá,
salvo imprevistos, como campeón, lo que hizo Mercedes por cuarta vez
consecutiva este fin de semana. Veremos que bromitas nos depara la
cita mejicana, que el año pasado dio para mucho, como una piñata.
Como siempre, muy buen resumen. ��
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo, por cierto (bajo mi punto de vista) la celebración de Hamilton patética, la pataleta de los Verstappen (independientemente de que puedan tener su punto de razón) barriobajera y ofensiva y grandes actuaciones de Alonso y Sainz.
ResponderEliminarAsí es. ¿La celebración de Hamilton? Lo cierto es que no me fijé.
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