martes, 31 de octubre de 2017

Hamilton y Mercedes campeones por cuarta vez



              Campeones de perfil bajo







Es una manera suave de decirlo, porque no me refiero con ello a que no hayan sido los mejores, sino a que desde principios de año están tirando balones fuera, quitándose presión, y eso no es de recibo.
No me gustan los prepotentes ni tampoco los llorones. Lo mismo que me hubiera parecido de muy mal gusto escuchar a Mercedes y Hamilton -en la linea Verstappen- decir en Australia algo así como: "que se vayan todos para casa, el título es nuestro, los vamos a machacar", tampoco me gustaron sus declaraciones de perfil bajo en la linea: "Ferrari es la favorita".
Fue lamentable escuchar esto a princios de temporada, luego repetido a lo largo de la misma. Mercedes venía de ganar tres títulos de pilotos y constructores seguidos, se mire como se mire, eran los favoritos.
A lo largo del año, además, Mercedes se mostró como el mejor coche, por poco pero lo fue, por lo tanto, el seguir en esa linea no era razonable. De cambiarse los pilotos entre los dos mejores equipos, hoy el campeón sería Seb.
Con esto no quiero decir que Seb sea mejor que Ham, ni mucho menos. Creo que ambos tienen un nivel parecido y que, en este caso, la diferencia la ha marcado la máquina. Ham superó a Seb y Bottas a Kimi, Mercedes ha ganado, en lo que va de temporada, 11 carreras y ha obtenido 13 pole positions por 4 y 5 de Ferrari respectivamente. El que quiera creer que la diferencia la ha marcado Lewis, hayá él, pero lo cierto es que Ham ha tenido más máquina -más veloz y fiable-, y si a eso le añadimos la auto-eliminación de Seb en Singapur, creo que el hecho de que Ham no se haya proclamado antes campeón es lo que hay que mirar.



El W08 siempre estuvo un paso -o medio- por delante del SF70H



Los problemas de Mercedes con los neumáticos no fueron tales, sino simplemente que Ferrari les apretaba. Mercedes gozó de un ligero margen sobre Ferrari a lo largo de toda la temprada y eso es lo que ha decidido el título a favor de un Hamilton cuasi imperial, ya que no hay que olvidar sus altibajos. Claramente superado por Bottas en Rusia y Mónaco, tampoco brilló en Austria ni en Hungría, aunque cuando estuvo en forma, estuvo imparable.
Ninguna crítica a los merecidísimos entorchados de Mercedes y Hamilton. La primera realizó el mejor monoplaza y el segundo pilotó como se esperaba de él. Se podría especular sobre sí Verstappen, Alonso o Seb lo hubieran hecho mejor con el W08 del británico, pero indudablemente eso no iba a cambiar mucho las cosas, Hamilton es un grande y pocos lo habrían hecho mejor, en caso de hacerlo. Como fuere, los halágos que recibe son exagerados. Creo que un término medio entre estos y lo que dijo Alonso: "Hamilton lo ha tenido muy fácil al retirarse Rosberg", encajan más en la realidad de las cosas. Cualquiera no hubiera sido campeón con su coche, cierto, pero era el mejor sitio en el que había que estar sentado para conseguirlo. Todo lo que no hubiera sido el campeonato, hubiera sido un fracaso, a diferencia de Ferrari.



Bottas no igualó el nivel de Rosberg, pero cumplió su cometido con dos victorias y fue renovado.



Y no porque Ferrari no pudiera ganar el título o porque los Mercedes partieran como favoritos -aunque lo negasen- tras sus éxitos anteriores, sino porque al Ferrari siempre le faltó un pelo.

El rush final de Red Bull no ayudó tampoco a una Scuderia que, entre accidentes y averías, sirvió en bandeja de plata -nunca mejor dicho- el título a sus rivales de Sindelfingen afincados en Inglaterra.

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