Sopor
El GP de Mónaco 2018 supone mi 37º
aniversario en la F1 para un total de 634 GGPP porque su edición de
1981 fue “mi primer GP”. Claro que no he podido ver todos esos
GGPP a causa de la pésima cobertura de TVE, pero desde el GP de
Italia 1993 hasta la fecha, sólo me he perdido dos: Australia 1997 y
Brasil 2009, lo que supone he visto 435 GGPP completos en directo y,
de un modo u otro, el resto.
Esta carrera también coincide con el
tercer aniversario del blog “en serio”, ya que se inició
precisamente en esta carrera en el año 2015.
La primera publicación, sin pulir,
apenas un folio, fue 15 días antes con el GP de España y a partir
de Mónaco, lo que se ve a día de hoy. Alguno pensará, “la
primera cita del blog es el GP de Italia 2013, ¿como se come eso?”
La explicación es sencilla: blogger
permite publicar viajando atrás en el tiempo -pero sin Delorean- y
lo que hice fue ir publicando los artículos que había hecho con
anterioridad para la revista Mil Lagos Racing en el blog.
Todo esto viene a cuento como
entradilla comunicarle a mis pocos, pero apreciados lectores, que por
motivos laborales, de aquí en adelante el blog puede sufrir un
parón. Lo mismo sigo publicando con regularidad, que no. Se irá
viendo. Algo pondré, sin duda, pero quizá no tanto.
Los Rosberg, Keke y Niko, se pusieron a los mandos de los monoplazas que los llevaron al título en 1982 y 2016 respectivamente. |
Entrando en materia, las chicas volvían
a esta cita, ya que Mónaco no está de acuerdo con esa absurda
prohibición y Liberty cedió.
Por partes: es una buena noticia que
las chicas hallan vuelto, sobre todo para quienes pensamos que su
prohibición es simple “postureo” y que no tiene sentido de
ningún tipo. Pero eso de que vuelvan sólo aquí... pues no, eso no
está bien. Si algo está mal -y la prohibición de las chicas lo
está- lo que hay que hacer es cambiarlo.
Si Chase Carey realmente piensa, como
así parece a raíz de sus declaraciones: “las chicas en parrilla
no encajan con la imagen que queremos dar de la F1”, lo que tiene
que hacer es no permitir su presencia en ningún evento. Lo contrario
es reconocer que realmente no cree en lo que dice y que se limita a
lo expuesto anteriormente: “postureo”.
Chase Carey, el "gato bigotón", y su lío con las mozas de la parrilla. |
Cede en Mónaco pero para los demás,
ajo y agua, ¿no? Australia las tuvo, pero no pudo ponerlas en
parrilla, Rusia -como mínimo- también las quiere, ya veremos en que
queda.
Aplaudo la reivindicación de Mónaco
a favor de las chicas, pero no su razonamiento: “no somos Spa o
Monza”, dando a entender que son superiores, que no lo son.
Repito, la prohibición de las chicas
es una memez, por eso es bueno que vuelvan, aunque sea a modo de
excepción. Pero no nos equivoquemos, si algo está mal, está mal
para todos. La prohibición se basa en la falsa premisa de no querer
mujeres objeto, que eso está muy mal. Pues bajo ese estúpido
razonamiento, son igual de objeto en Mónaco que en Spa, Monza o
dónde cuadre. Así a ver si nos dejamos de mamarrachadas. Eso es lo
que pasa cuando se hacen tonterías, que se vuelven en tu contra.
Llama mucho la atención y da risa, la
doble vara de medir del tipo este cuyo apellido, Carey, debe
significar “caradura”. Le parece bien prohibir las chicas en
todos los sitios salvo en Mónaco y, de igual manera, le parece mal
el canon histórico de Ferrari mientras que a Mónaco le permite el
suyo, es decir, no pagar canon -o uno insignificante-, por celebrar
el GP, a diferencia del resto. Que curioso.
Sería para otro tema hablar de estos
cánones -ya hable un par de veces del de Ferrari en mis artículos
“Liverty Media Vs Ferrari” de enero de 2017 y “Ferrari amenaza
-de nuevo- con abandonar la F1” de noviembre de 2017, por si a
alguien le interesa- pero al respecto de Liberty, no cuadra quieran
quitarle el canon a uno, Ferrari, y dejárselo a otro, Mónaco. O a
todos o a ninguno. Y francamente, yo creo Ferrari es mucho más
importante para la F1 que los creidillos de Mónaco, el casino este
ambulante de pijolandia. Le vendría bien “caerse” del calendario
un par de años para que se le bajasen los humos.
Curioso que quien tire contra las
chicas y Ferrari sean precisamente los americanos, que son los que
más tradición tienen de animadoras y que profesan un amor al
Cavallino sólo superado en Italia. Contradicciones de la vida.
Max arruinó su GP en los libres 3 en una sesión sin importancia. |
El jueves -tradición manda- empezaron
los libres y gracias a los nuevos compuestos más blandos y a unas
condiciones óptimas, se superó el récord absoluto de la pista, a
cargo de los dos Red Bull, con Ricciardo bajando al 1”11 por
primera vez en la historia. Red Bull mostraba sus credenciales en los
primeros libres, como hizo en Barcelona Mercedes. A todo esto hubo un
parón en los libres 2 por unos defectos en las alcantarillas que
hubo que soldar. Nadie es perfecto.
Los libres 3 del sábado vieron como el
máximo favorito de cara a la pole junto a su compañero Ricciardo,
Max Verstappen, la pifiaba a la salida de la piscina, en un accidente
“calcao” al que tuvo él mismo en 2016. Las caras en su box lo
expresaban todo. Pero lo mejor es verlo por el lado positivo. En caso
de dos RBs en primera fila, lo mismo acaban su carrera en Santa
Devota.
La calificación en Mónaco es de las
más bonitas de la temporada, a diferencia de sus carreras, que
suelen ser de lo peor, y en ella el máximo favorito, Daniel
Ricciardo, cumplió los pronósticos logrando la pole en 1”10”810
a 169,654 km/h. Fue el único en bajar a 1”10, lo que no es para
nada una sorpresa, ya que viendo los tiempos de los libres, eso era
lo mínimo que había que esperar. De hecho, yo esperaba algo más.
Se mejoró la pole de 2017 en 1”4, lo que entra dentro de lo
razonable.
Ferrari y Mercedes acechaban por
detrás, al tresbolillo Seb-Ham-Kimi-Bottas precediendo a Ocon,
Alonso, Sainz, Pérez y Gasly. Hasta Pérez, todos bajaron el récord
de 2017. El último tiempo, el de Magnussen. Se quedó a sólo 2”6
de la pole.
Los Haas decepcionaron, pero ellos ya esperaban sufrir. |
Destacar que Mclaren no fue tan bien como esperaba y que Toro Rosso estuvo muy competitivo, al contrario que Haas.
Unas pocas gotas de lluvia caían poco
antes del inicio de la carrera bajo un cielo encapotado bajando las
temperaturas y amenazando con hacer sufrir “graining”
-granulación- a los neumáticos.
La salida fue a las 15:10, aunque ya
puestos, ya que lo trastocan todo, lo suyo hubiera sido a las 15:30,
como antaño, que era cuando acababan de comer los Grimaldi, hasta
que Bernie lo unificó a las 14:00, como en el resto de GGPP de
Europa, Británico incluido.
La carrera fue soporífera,
recordándome mucho a la vivida en 2013, cuando todos estaban
acojonados por la durabilidad de las Pirelli e hicieron la carrera a
dos por hora. Pues este año igual, en lo que parece ser una
constante. Por lo visto se prefiere guardar gomas e ir más lento a
cambio de ahorrarse una parada. No es la forma más bonita de correr
pero es lo que hay.
Eso le vino al pelo a Ricciardo, que
así pudo defender con bastante tranquilidad su primera posición
-nunca en entredicho- pese a algunos problemas en su unidad de
potencia así como en su caja de cambios.
La carrera fue tan lenta, que Ocon y cía. mantenían ritmos tan buenos como el de los mejores. |
Los problemas hubieran sido graves en
un trazado convencional, donde hubiera sido superado fácilmente,
pero aquí no tanto, y mucho menos si nadie se atrevía a forzar. Y
nadie se atrevió. Pero si el cuarteto perseguidor en lugar de
aguantar neumáticos hubiera ido a dos paradas, las cosas hubieran
podido ser bien distintas. Pero nadie optó por esa táctica. Y Mercedes y Ferrari, con dos coches en cabeza, deberían haberlo intentado con uno, ya que no perdían nada.
Alonso sufrió su primer abandono del
año y, viendo como se comportó su MCL33 seguro que hubiera
preferido correr las 500 de Indianápolis en busca de su “triple
corona”.
Sainz acusó la táctica errónea de
Renault y acabó décimo, luego de sufrir un adelantamiento ilegal de
Verstappen. Ilegal pero sin importancia dado el puesto que se
jugaban. El caso es que eso de saltarse chicanes para adelantar -o
evitar ser adelantado, como Hamilton aquí en 2016- parece ser que no
importa. De haber un muro, nadie habría adelantado. Está bien la
seguridad y evitar abandonos, pero adelantamientos cortando la pista
no. Pero a Whiting no le da para más su cabecica.
Pierre Gasly fue un excelente séptimo
con el Toro Rosso en esta lenta carrera en la que los nueve primeros
acabaron en 25 segundos. Penoso.
Como penoso era decir que Ricciardo se
había quedado sin 160CV e incluso ¡sin dos velocidades! Su carrera
fue muy meritoria y sin problemas habría ganado con autoridad, pero
las cosas como son: tuvo problemas, pero no tan acuciantes como
quieren hacernos creer. Sin 160CV y dos velocidades menos -una si
tenemos en cuenta que no se usa la 8ª en Mónaco- el tipo este acaba
a dos vueltas. Menos majaderías.
Problemas en el cambio, vale, perdida
de potencia, también, pero no nos pasemos, que no fue para tanto.
Para empezar, la parte eléctrica da 163CV durante 33,3 seg por
vuelta, es decir, que como mucho habría perdido 70CV. Y eso en el
peor de los casos. Y viendo como salía de las curvas y como llegaba
a fin de las escasas rectas, con un Vettel incapaz de presionarlo,
dudo mucho tuviera mucha pérdida. Y lo mismo para lo del cambio.
Ni Williams, ni Sirotkin, estuvieron afortunados en el principado. |
Pero claro, a algunos les encanta
fliparse. Alonso dicen ganó en Imola 2005 con 200CV menos, y ahora
esto. Me descojono. Con el Kers veíamos adelantamientos por ese
extra de 80CV durante escasos segundos, Kimi se quedó sin potencia
eléctrica en Hungría 2015 y empezó a perder 4” por vuelta antes
de abandonar, etc... vamos, que le cuenten esos cuentos a su tía.
Grande Ricciardo, sin duda, pese a su
asquerosidad de la botita que no tiene ninguna gracia, controlando
magistralmente con problemas gestionando como nadie las ruedas. Pero
sus problemas no fueron tanto. De haber sido como cuentan, ni acaba
la carrera.
Carrera penosa en la que al final todos
se reagruparon. Que coches claramente más lentos como el Force
India, el Toro Rosso y el Renault acaben pegándose a los líderes,
no tiene perdón.
Hubo un nuevo récord de vuelta
absoluta de Verstappen, mejorando la de Schumi de 2004 en 2 décimas.
Aunque a tales efectos no cuenta, ya que el trazado se acortó 3
metros en 2015. En ese caso, mejoró la de Pérez del año pasado en
6 décimas. Nada del otro mundo.
Fue triste ver a los Williams los
últimos en esta carrera. A nadie gusta la situación de este equipo,
el tercer histórico de la F1. Están mucho peor que Mclaren, que ya
es decir. Pero es que los de Grove no tienen ni la mitad de pasta que
los de Woking. Por si fuera poco, recibieron una sanción brutal
-stop and go de 10 seg.- por un fallo burocrático, montar las ruedas en parrilla en el coche de Sirotkin fuera del tiempo establecido. Luego vemos a
pilotos cortar medio circuito en la salida -Hamilton en México 2016-
que se quedan tan campantes, mientras que por una parida sin
importancia, que es mejor saldar con una pequeña multa,
hiper-sanción. Bueno, pasa en todos los ámbitos de la vida, por
tanto, sorpresa poca, pero hay que decirlo. Me pregunto si con un
candidato a la victoria hubieran sido tan duros. Creo recordar que a
Kimi en 2008, por algo parecido, sólo le hicieron pasar por boxes.
De no ser porque ahora igual tengo un
parón de publicaciones, ni me habría molestado en contarles nada
acerca de este tostón.
Hasta la próxima.