miércoles, 27 de noviembre de 2013

GP de Brasil 2013

  Vettel iguala a Ascari en la despedida de Webber



Finales de noviembre, fin de temporada y ¿fin del dominio Vettel?.  Para saber eso tendremos que esperar a 2014. Mientras tanto, nos tocaba disfrutar de la última cita del año, con el majestuoso circuito de Interlagos en Brasil como maestro de ceremonias. Interlagos es un circuito precioso, pero en pro de la seguridad, en 1990 le quitaron parte de sus 7 km, reduciéndolo a poco más de 4. Con esta medida perdió parte de su encanto. Aún así, sigue siendo precioso, aunque a muchos pilotos les encantaría correr en el antiguo trazado. Que se lo digan si no a Kimi Raikkönen. Aquí ganaron los brasileños: Fittipaldi dos veces, Pace una, Senna dos y Massa otras dos, que hubieran sido tres de no tener que ceder en 2007 la victoria a su compañero Raikkönen para que ganase el título in extremis; aunque más in extremis lo perdió al año siguiente él mismo, en uno de los episodios por los que más recordado será este trazado. Barrichello estuvo a punto en 2003, pero se quedó sin gasolina en un gravísimo error de la Scuderia. El otro brasileño, Nelson Piquet, ganó en casa también, pero en el demolido Japarecagua.



Carlos Pace en su única victoria en F1, en casa con el Brabham, era 1975



Este año no iba a haber semejantes emociones, gracias a Vettel y Red Bull, cuyo aplastante dominio tras el parón veraniego se cargó toda emoción posible.

Todos los entrenamientos libres se disputaron bajo la lluvia, y en esas condiciones es muy difícil sacar conclusiones. Sin embargo, era evidente que los grandes iban estar en cabeza aunque quizá la jerarquía cambiase un poco. Como ahora los neumáticos de lluvia (los dos, mixtos y lluvia) están limitados, la actividad en pista se reduce aun más, ya que los equipos guardan las gomas de cara a “la hora de la verdad”. El perjudicado, como siempre, el público, sobre todo el que acude al circuito, que de ese modo apenas puede ver rodar a los coches, y eso que ver un F1 bajo la lluvia es uno de los espectáculos automovilísticos más bellos. Pero por lo visto están por la labor de no dejar que disfrutemos de ello porque, al margen de esto, cada vez se paran antes los entrenamientos y carrera en suelo mojado. Esto está en parte motivado por la reglamentación que impide cambiar los reglajes de calificación a carrera y que, al andar con compromisos, impide la adecuación 100% del coche al agua; y en parte porque Charlie Witting quiere que los coches corran en seco cuando llueve, lo cual es imposible. Eso y las críticas a Pirelli porque sus ruedas no van bien en agua. Pero, ¿cómo van a ir bien si apenas pueden probar? Claro, como los equipos se quejaron en 2004 de que Ferrari probaba mucho porque tenía un circuito propio… sólo que Ferrari tenía el circuíto desde 1972. Hasta que no dominaron como dominaron, nadie dijo ni mú salvo para reirse de ellos: “miralos, con tanta pasta y circuito propio y no se comen una rosca”, pero cuando empezaron a arrasar nadie se reía. En fin, que eso de prohibir las pruebas a los coches es una idiotez mayúscula. Luego que nadie se extrañe de neumáticos que no van bien en agua o que revientan.

Valteri Bottas esta vez no pudo brillar.

Los libres fueron cosa de Rosberg el viernes, y de Webber el sábado, aunque los tiempos variaban mucho en función del estado de la pista.
La calificación también se realizó en mojado, no mucho, de lo contrario se hubiera suspendido. En la Q1 adiós a Caterham y Marussia, lógicamente, y también a Maldonado y a Gutiérrez.

Los que no pasaron de la Q2 fueron los Force India, los Mclaren -Checo Pérez se estrelló al final- el Williams superviviente y Heikki Kovalainen, con el Lotus.
 La Q3 se retrasó porque…¡llovía! y claro,  hubo que esperar a que la pista mejorase, mejoró tanto que los pilotos apenas dieron una vuelta de calificación con los de lluvia-me niego a llamarlos de lluvia extrema, eso no existe, sólo hay de lluvia y mixtos-Grosjean ni eso, y cambiaron a mixtos para batirse el cobre. En el box de Ferrari pareció reinar un poco la confusión, pero al final, todos a la pista. Grosjean, el primero en salir con mixtas, se hizo con la pole provisional, pero Webber se la quitó enseguida y por detrás, un Vettel descomunal puso a todos en su sitio al dejar a su compañero a 1”2.  Esa vuelta nadie la mejoraría, ni siquiera él. Aún así Rosberg, muy brillante durante el fin de semana mojado, se colocó a penas 0”6 y Alonso a 0”8. El Asturiano, de hecho, falló en su vuelta buena, en la que hizo records del primer y tercer parcial. De no haber fallado, la primera línea hubiese sido suya, incluso la pole tal vez, aunque él mismo dijo que no la habría conseguido de ningún modo. Así que con Vettel quitándole la venda a los escépticos, la parrilla quedaba así: Vettel, Rosberg, Alonso, Webber, Hamilton, Grosjean, Ricciardo, Vergné, Massa y Hulkenberg, este último un tanto desdibujado para lo que suele hacer en esas condiciones. Pérez retrocedió de 15º a 19º por sustituir la caja de cambios.

El domingo amaneció nublado y se preveía lluvia durante la carrera, no así al principio, lo cual está muy bien, porque ver una salida detrás del coche de seguridad es como para ponerse a llorar. Si al menos salieran en paralelo como en la Indy…pero no, aquí en fila, como en el colegio. Podrían revisar eso de cara a la próxima temporada, así, al menos, no fastidiarían al 100% la salida, solo el 50.



Última arrancada del año, Rosberg líder. No aguantaría ahí ni una vuelta...




Se apagaron los semáforos y los Red Bull, como viene sucediendo últimamente, no arrancaron bien. Webber sólo cedió una plaza, lo mismo que Vettel, ante Rosberg, pero es que si el alemán no cierra a Alonso como lo hizo, hubiera partido tercero. Hamilton se aprovechó de esa maniobra y adelantó a Fernando. Massa arrancó muy bien y pasó de 9º a 6º. Tras la primera curva, Rosberg lideraba, seguido de Vettel, Hamilton, Webber, Alonso, Massa, Hulkenberg y Grosjean. Al acabar el primer giro, tanto Vettel como Alonso, ganaban una posición. Una vuelta después, era Webber quien la ganaba, siendo Hamilton su víctima casi a la vez que Grosjean destruía su V8 Renault en un avance de lo que podría ser el año que viene.
Vettel se empezó a largar a modo de 0”8 por vuelta de Alonso, el cual dejaba tirado a Rosberg que, al inicio de la séptima vuelta, cedía ante Webber, y este, empezaba su persecución al asturiano. Dado que Rosberg no andaba muy fino, dejó pasar a su compañero en la vuelta 10 y, en la 13º era Alonso quién caía ante Webber, que ya estaba a más de 9” del líder. Massa, bastante a tono en esta carrera -no así en calificación- también adelantó a Rosberg en la 14 y se colocó 5º.
Los Mclaren, que partían 14 y 19 (Button-Pérez), a la chita callando iban ganando posiciones y, sin llamar la atención, en la vuelta 15 ya estaban 7º Button y 9º Pérez con Hulkenberg emparedado entre ellos.
La carrera que había empezado en seco, amenazaba lluvia. Cada equipo tenía sus propias predicciones, y algunos aguantaron un poco más de lo debido en pista con ruedas gastadas a la espera de la lluvia para cambiar. Eso permitió a Massa, que fue de los líderes el primero en parar, adelantar a Hamilton cuando este realizó, unas vueltas después, la suya. Lo mismo le pasó a Alonso con Webber, en este caso ayudado por la lenta, 5”1 seg, parada del australiano.
Tras la primera ronda de paradas la cosa estaba así: Vettel, Alonso a 10”, Webber a sus talones, Massa, Hamilton, Button, Rosberg, Pérez, Hulkenberg, etc…

Como el tipo de neumático a elegir no resultó determinante, no hablaremos de ellos. Alonso apenas aguantó dos vueltas a la apisonadora Red Bull de Webber y volvió a su posición natural, 3º, y así teníamos dos Red Bulls y dos Ferraris al mando de la carrera, con los renacidos Mclaren 6º y 8º, nada mal y que con un poco de lluvia podrían dar un alegrón al viejo Ron, que es quien manda en realidad. ¿Alguien se cree que manda Martín Whitmarsh?. Pues lo mismo que Christian Horner en Red Bull: nada de nada. En Mclaren esta Ron y en Red Bull Dieter Mateschitz, que manda a su lacayo Helmut Marco para que vigile bajo su atenta mirada de cristal, lo que sucede en su (sus) equipos.

Tras esta disertación, la carrera seguía y Massa y Hamilton estaban librando un bonito duelo por la cuarta posición cuando la dirección de carrera decidió volver a hacer “una de las suyas” y sancionaron a Felipe Massa por pisar la raya divisoria entre la pista y los boxes. No me cabe duda de que en esa acción Massa debió de ganar unos 40 segundos o así, de modo que drive-troought y adiós a un buen resultado. La carrera en que los comisarios no sancionen una tontería será para enmarcarla.

Hamilton se quedó sin la diversión de su duelo con Massa y accedió a la cuarta posición, Felipe bajó a la octava y los Mclaren ya eran 5º y 7º, bien por ellos.
 Todo estaba más o menos estabilizado pero los pilotos, en su afán de hacer sólo dos paradas -quizá tres era más rápido pero no se querían arriesgar- pero sobre todo, esperando que llegase la lluvia que parecía inminente, aguantaban en pista yendo cada vez más despacio. Vimos algo inédito: cómo los pilotos doblados se desdoblaban de los líderes con gran facilidad. Y no hablamos de un puntero retrasado por alguna incidencia o de una carrera en agua, simplemente los coches que circulaban fuera de los puntos eran, en ese momento, los reyes del mambo gracias a sus neumáticos nuevos. En una de estas, al desdoblarse Bottas de Hamilton, se tocaron, abandonando el finlandés y …¡han acertado! sancionando con un drive-trougth al inglés, que unido a su pinchazo, dijo adiós a un buen resultado. Cierto que tuvo más culpa Hamilton que Bottas, pero no dejó de ser un lance de carrera. Como es de esperar, no se sancionan maniobras peligrosas o antideportivas, sino accidentes. De no haber sido más que un toque sin consecuencias, no lo habrían sancionado.
Eso sucedió en la vuelta 48, en la misma en la que los tres primeros entran a cambiar ruedas. Las de Vettel no estaban preparadas y tardó más de 12”, con lo que se reagruparon, siendo el imperturbable Vettel líder, con el dúo Webber-Alonso detrás a apenas 6” y acercándose, marcando (ambos) varias veces la vuelta rápida. Al final esta fue para Webber, que ganó el duelo  al correoso ferrarista y Vettel, siempre “al loro” para estos registros, decidió no hacer el indio e ir a por ella. La pista no estaba para bromas y sus ruedas tampoco, aún así, controló la (aburrida) carrera magistralmente, ya que la temida y deseada por muchos, lluvia, no llegó. Con Massa finalmente séptimo gracias a las desgracias de Hamilton, las posiciones en la vuelta 57 eran: Vettel, Webber, Alonso, Button, Rosberg, Pérez, Massa, Hulkenberg, Hamilton y Ricciardo entre los diez primeros. De ahí al final (vuelta 71) nada cambió. Vuelta de honor para Vettel, con “ceros”, para Massa, con “ochos” y con Webber sin casco y sin guantes, quien se encargó de poner la nota emotiva. La verdad es que da gusto ver vueltas de honor así, con los pilotos sin casco, como antaño hicieran Pironi, Arnoux o Berger, entre otros.

Massa se despidió de Ferrari  en casa y dando espectáculo.

Mclaren estuvo a punto de lograr el podio, pero a pesar de haber realizado la mejor carrera de la temporada, no pudieron, ¡tal vez con lluvia y la intuición de Button!
Así que se quedaron sin pódio por primera vez desde 1980.
 En el podio, Vettel quiso tener un gesto con Webber, dejando que hablase primero. Lo cierto es que no estuvo mal el detalle, pero, ¿qué quieren que les diga? Después de su robo en Malasia, lo menos que podía hacer era dejar que Webber se despidiera con victoria, lo demás son poses. Es muy fácil hacer gestos y tener buenas palabras encima del pedestal. Algunos dirán que no tenía por qué hacerlo, pero en ese caso, razón de más para que lo hiciera y haber quedado así como un señor. En mi opinión, no lo hizo porque le pudo más su afán de batir records. Al menos es el único que lo reconoce abiertamente. De no haber estado ese caramelo ahí, tal vez hubiera tenido ese detalle con su “amigo” Webber. Con 13 victorias, 9 de ellas seguidas en la temporada, iguala a Schumacher (que las logró con un GP menos) y con Ascari, aunque en la época de Ascari las temporadas eran de 7 u 8 Gps, sin contar Indianápolis. Quien logró otro record fue Max Chilton, que se ha convertido en el primer debutante en acabar todas las pruebas de la temporada.



Mark Webber, (el de los carburadores) en su emotiva vuelta de honor sin el casco, como antaño.




Despedimos la F1 hasta el año que viene y, al igual que Webber, nos dejan los motores V8 y Cosworth. En 2014 veremos si con las nuevas reglas sigue el dominio de Vettel, que ha pilotado como los ángeles. Sólo el hecho de que Alonso hiciera lo mismo impide que se le considere el mejor de la actualidad, entre otras cosas porque siempre se le coge un poco más de afecto a quienes corren en inferioridad de condiciones.
 Estoy deseando que legue 2014 y espero que la FIA no vuelva a hacer de las suyas y “congele” los motores. Una vez  basta, esto no se ha de repetir. Es contradictorio que, en lo que se vende como la “máxima expresión de tecnología del mundo del motor”, este no se pueda tocar. Es lamentable, pero claro, pese a Ferrari la F1 es inglesa, y como los ingleses no saben hacer motores pues…
 Veremos que tal se las ingenian los equipos con sus nuevos sistemas propulsores, KERS el doble de potente y durante más de 30 segundos por vuelta, eso, junto a la “ley seca”,  120 litros, mas o menos, de gasolina (es que el reglamento dice 100kg, que listos) promete una temporada apasionante.
 ¡Hasta el año que viene!

miércoles, 20 de noviembre de 2013

GP de EEUU

          Érase una vez...Vettel


 La segunda carrera en el circuito de las Américas (como si hubiese otras) se presentaba con un par de sorpresas: por un lado la ausencia de Kimi Raikkönen que se operaba la espalda y no podría participar. Yo creo que por un par de semanas más no hubiera pasado nada, y que esta ausencia se debía más al desencanto del finlandés con el equipo, que no le paga (al menos no a tiempo) lo estipulado, y a que no se veía en condiciones de ganar una carrera debido a la supremacía de Vettel. De modo que como el subcampeonato no le atrae, lógico por otra parte, aprovechó para adelantar la pretemporada. La otra sorpresa era la no renovación de Sergio Pérez por Mclaren, sustituido por Kevin Magnussen, hijo de Jan Magnussen, quien ya corrió para ellos el siglo pasado. A mediados de los 90, no hace tanto, no vayan a creer. Curioso, porque el checo lo estaba haciendo muy bien. El sustituto de Kimi para estas dos citas sería su compatriota Heikki Kovalainen, la GP2 2012 Davide Valsecchi se quedaba a verlas venir…Esto no lo pongo como sorpresa, porque es bastante habitual que el tercer piloto de un equipo, cuando le llega la hora de sustituir a un piloto oficial, el equipo pase de él, demostrando que para el rol de piloto de pruebas no siempre se escoge (más bien nunca) a alguien pensando como sustituto para los oficiales. Aunque no siempre ha sido así, de hecho también ha sucedido al revés: un piloto oificial nada bueno y uno de pruebas fabuloso. Hablo concretamente de 1993 en Mclaren, cuando el oficial era Michael Andretti y en la recámara tenían a Mika Hakkinen, sobran comentarios.

Heikki Kovalainen sustituía a su compatriota Raikkönen en Lotus.
en tanto que el piloto de pruebas de Lotus y ganador de
 El circuito de las Américas, situado en Austin (Texas) es la mejor creación de Hermann Tilke, con un trazado que tiene de todo, desniveles, curvas rápidas enlazadas, curvas lentas, fuertes frenadas y largas rectas, todo ello aderezado con unas escapatorias asfaltadas pintadas en un azul oscuro que, unido al blanco y rojo habitual de los bordillos, lo unian cromaticamente a la bandera de los EEUU. Este es un circuito para pilotos, y en él, el que no le coja el pulso rápidamente, lo pagará. Como fue el caso de Maldonado, Massa, Rosberg y, en menor medida, Kovalainen y Button, ampliamente superados por sus compañeros.
 Parece que la F1 por fin ha llegado a estados unidos para quedarse, después de tantos años intentándolo en diversos escenarios, casi todos urbanos. Y es que el éxito de las dos edicionesde este GP no tiene precedentes; incluso en Europa pocos circuitos se llenan más. Increíble,  el mundo al revés.
 Los primeros entrenamientos libres vieron a Alonso liderando la tabla de tiempos, un espejismo que el resto de sesiones se encargó de demostrar. Los Red Bull,¡como no!, eran los favoritos, y detrás de ellos había un desbarajuste total, con una máxima igualdad entre todos y una enorme fluctuación en los tiempos y en la clasificación. Lo más destacado, sin duda, el excelente rendimiento de Valtteri Bottas.
 En la Q1 vimos caer, además de a los de siempre, Caterham y Marussia, a Maldonado y a Sutil. Charles Pic, con una sanción de 5 puestos por cambiar la caja de cambios, saldría el último.
 La Q2 vería caer a Massa, a Button y, sobre todo, a Rosberg, algo inesperado, toda vez que en la Q3 entraban los dos Sauber por segunda vez en la temporada, Kovalainen con el Lotus y por segunda vez también, aunque esta vez sin agua de por medio, Valtteri Bottas, que era el héroe tapado de la jornada. Si para muchos el Ferrari va mal, qué decir del Williams.
 La Q3 vivió un duelo por la pole entre los pilotos de ReD Bull, toda vez que la tercera posición iba a ser para un efectivo Grosjean en tanto que la cuarta posición iba a tener tres contendientes, siendo Hamilton el afortunado. Con el primer juego de ruedas, que sólo tenían ellos, Webber doblegó a su afamado compañero e iba camino de hacer lo mismo en la segunda y definitiva vuelta, pero un error en el tercer sector del circuito iba a dar la octava pole de la temporada a Vettel y, visto como se desarrolló la carrera el domingo, también la victoria.
 Tras estos dos y Grosjean, estaban Hamilton, Hulkenberg, Alonso, Pérez, Kovalainen, Bottas (muy bien) y Gutiérrez.
 Como Gutiérrez fue sancionado con diez posiciones por molestar a Maldonado en la Q1, y Button con tres por adelantar con bandera roja, pasaban de las posiciones 10 y 13 respectivamente, a las 20 y 15.




Valteri Botttas estuvo magnífico en Texas.



El domingo se dio la salida en un bajo un gran ambiente, e incluso se podían escuchar los gritos de los aficionados en la parrilla de salida por encima del aullido de los motores. La salida se realiza sin problemas perdiendo una posición, más o menos, los pilotos que han salido por la zona sucia. Webber, que no ha arrancado mal, duda a la hora de “meterle el coche” a su compañero, se ve obligado a salir por la zona sucia en la curva 1 y cae al cuarto puesto. Antes de completar la primera vuelta, en la contra-recta, Sutil y Maldonado se chocan y sacan el coche de seguridad, a todo esto, Massa ha vuelto a realizar un magnífico doble adelantamiento a los que nos tiene acostumbrados ultimamente, sus víctimas, Button y Gutiérrez. El reagrupamiento ve a Vettel lider, seguido de Grosjean, Hamilton, Webber, Hulkenberg, Pérez, Alonso, Bottas, etc…
 El coche de seguridad se retira  en la vuelta 5 una vez el coche de Sutil ha sido retirado (mas que retirarlo parecía que lo estaban peritando) y Vettel empezó a marcar el ritmo, que era en torno a medio segundo más veloz que el de su inmediato perseguidor, Grosjean (qué buen fin de temporada está haciendo el francés). Un incisivo Pérez intentaba adelantar a Hulkenberg a toda costa, pero al no conseguirlo, al cabo de dos vueltas se tuvo que contentar con seguirlo mientras el grupo se estabilizaba. El que no se contentaba era Webber, que se acercó a Hamilton y en una preciosa maniobra le arrebató el tercer puesto en la vuelta 13. Todo siguió más o menos igual hasta la primera parada que, de no haber problemas, sería la única.
 Kovalainen, autor de una mala salida, estaba en tráfico tras Ricciardo y Rosberg, con lo que decidió parar en la vuelta 17 y de ese modo poder rebasarlos. Dos vueltas más tarde, en la 19, Rosberg adelantó a Ricciardo y se hacía con la décima posición (tampoco era para tirar cohetes). Massa, duodécimo tras la parada de Kovalainen, lo imita en la 21, abriendo el fuego de cara a la vuelta 22, en la cual pararon Pérez, que aguantaba a duras penas los ataques de Alonso, Di Resta, Rosberg y Ricciardo. Bottas lo haría en la 23, Hamilton en la 25 y Alonso, estirando al máximo sus ruedas paró en la 26, aprovechándose del pequeño tapón que le hizo Vergné (que no había parado) a Pérez , logrando salir justo en los morros (del coche y el suyo) del piloto mejicano.
 En la 27 paró Vettel, que había empezado a ceder terreno con Grosjean, bajando la distancia que los separaba de 9´a 6´. En la 28 paró Webber, con record de cambio de ruedas en menos de dos segundos (según Red Bull, en la tele 2´6) y el último en parar fue el efímero líder, Grosjean, en la 29. Al salir ya estaba a 10´de Vettel y ni se planteó molestarle. A todo esto, Gutiérrez, que no había parado y que llegó a marchar sexto, iba cediendo posiciones. Alonso primero, Pérez después.
 Kovalainen, contra todo pronóstico, sufrió un bajon de rendimiento y fue adelantado por Rosberg en la vuelta 31, momento en el cual realizó su segunda parada, arruinando de ese modo su carrera y dando la razón (al menos en este GP) a Davide Valsecchi, a la vez que Rosberg seguía con su pequeña remontada y se ventilaba a Di Resta en la vuelta 32. En la 34 Bottas adelantaría a Gutiérrez, el cual pararía en la 36 a realizar su parada, toda vez que Massa realizaba en la 38 su segunda y definitiva parada redondeando su nefasto fin de semana.
 Volvamos a la cabeza tras estos pequeños, pero interesantes escarceos. Alonso, a sus anchas en esta fase de la carrera, empezó su persecución a Hulkenberg, que culminó en la vuelta 44 con un gran adelantamiento al final de la recta de meta. Una vuelta antes, Ricciardo había adelantado a Di Resta.
 Entre tanto los tres primeros a lo suyo, Vettel conservando ruedas y coche, no tanto para la victoria (también), sino para marcar la vuelta rápida que últimamente la está dejando un poco de lado, y eso que es el único piloto que realmente le interesa este registro, demostrándolo siempre que puede. Webber hacía la goma con Grosjean, y le atacó cuanto pudo, llegando incluso a parecer inevitable otro doblete de Red Bull, pero al final tuvo que ceder ya que Grosjean controló la situación con maestría.
 Button adelantó a Di Resta en la vuelta 48, antes de que este último realizase su segunda e inesperada parada.
 Alonso, ¡ah sí!, no me había olvidado, siguió tirando como un poseso para cazar a Hamilton, y una vez se situó a menos de un segundo de su excompañero, sus Pirellis dijeron basta y pasó de ser cazador a  presa, ya que Hulkenberg venía por detrás “a todo ritmo” y le iba a tocar sudar.
 En cabeza todo estaba decidido, vuelta rápida incluida - para Vettel, claro - y poco importaba que a dos vueltas del final, en la 54, Button le arrebatase la décima plaza a Ricciardo. Pero lo que si importaba era la lucha por el 5º lugar entre los motores Ferrari del Ferrari de Alonso y del Sauber de Hulkenberg. El alemán, en la última vuelta adelantó al español en la primera curva, pero se pasó un poco de frenada y esto le permitió al ferrarista recuperar su puesto, y ahí acabó la lucha, Nico no tuvo tiempo para más.



Sebastian Vettel dominó en solitario el GP yankee.



La clasificación final quedó así, Vettel, Grosjean, Webber, Hamilton. Alonso, Hulkenberg, Pérez, Bottas, excelente octavo con un coche que rara vez pasa del puesto 15 en parrilla, Rosberg y Hamilton.
 Tras lo visto en esta carrera, lo más destacado es la gran carrera realizada por Valtteri Bottas, que aunque no estuvo inmerso en ninguna lucha sacó un partido excelente del material del que disponía. Con el Williams nadie lo hubiera hecho mejor. También es destacable el gran resultado de Lotus, que sin duda echan en falta a Raikkönen por los valiosos puntos que les hubiera aportado para el mundial de constructores. El finlandés tal vez también esté un poco arrepentido, porque visto lo bien que fue su compañero tal vez el hubiera podido optar, si no a la victoria, sí al podio.
 Tras este GP y el recórd, según se mire, de victorias consecutivas del Vettel, este irá a por la novena consecutiva en Brasil y así, igualar sin ninguna duda con Ascari a menos que alguien se lo impida. En Brasil nos espera el espléndido - a pesar de su mutilación en 1990 - circuito de Interlagos. En San Paulo, uno de los pocos en los que era posible adelantar sin DRS y sin neumáticos “caprichosos”. Todo esto y más, en una semana.

jueves, 7 de noviembre de 2013

GP de Abu Dabhi 2013

     El séptimo sello

 Estamos en Los Emiratos Árabes Unidos, en Abu Dabhii, en el circuito Yas Marina, de triste recuerdo para los Ferraristas y Alonsistas por el título perdido en 2010. Todavía escuece, y más cuando sigue ganando el mismo hombre. También es histórico porque en él, logro Vettel el primero de sus, hasta ahora, cuatro títulos, batiendo de paso  el récord de precocidad que ostentaba Lewis Hamilton.
El circuito en sí está muy chulo y recuerda mucho al actual Paul Ricard. Pero no por el trazado, sino por su colorido y sus descomunales escapatorias asfaltadas, pintadas a rayas azul celeste que, unido al color del asfalto, el rojo y blanco de los bordillos, le dan una pinta “Martini Racing” total.

Eso compensa el resto que, por muy bien que esté, no deja de parecer sacado de una película de ciencia ficción. Es decir, frío y aséptico. Muy al gusto de Ron Dennis, tan obsesionado como está con la limpieza, pero sin encanto. Me encanta la salida de boxes, a ver si un día alguien se estampa en ella y detienen la carrera. Está muy bonita pero es una estupidez, lo mismo que tanta escapatoria, al final los pilotos trazan por fuera de lo que es el circuito en sí. Una cosa es poner escapatorias para seguridad y que eviten abandonos de coches (lo que perjudica el espectáculo) y otra muy distinta es que se trace por fuera de la pista y que los pilotos, intentando aguantar posición, saquen adrede a sus rivales del circuito. Cosa que no harían de haber un muro o una puzolana. Eso sí que debiera ser sancionado, y no las tonterías que suelen mirar.
Los entrenamientos libres, a pesar del mejor tiempo en los primeros libres de Romain Grosjean, dejaron entrever que, de nuevo, los Red Bulls eran los claros favoritos. Los Ferrari parecían un poco bajos de forma, mientras que los Mercedes y Lotus parecía que podían inquietar a “los intocables”, los primeros en calificación y los segundos en carrera.
 Los libres dejaron bien claro la gran diferencia de rendimiento entre un tipo de neumático y el otro, con lo cual en la Q1 nadie se arriesgó a guardar un juego de blandos, ni siquiera los todopoderosos Red Bulls que, de hecho, sólo salieron a dar una vuelta con este compuesto mientras que el resto entretenía al personal danzando con ruedas duras para, al final, sacar las blandas y pasar el corte. Massa y Pérez, doblegados hasta ese momento por sus respectivos compañeros, espabilaron  y demostraron que había que contar con ellos. Esteban Gutiérrez con el Sauber y Adrián Sutil con el Force India acompañan a los “de siempre” (Caterham y Marussia) y se quedan fuera de la Q2, algo inesperado visto las prestaciones de sus coches últimamente.
 La Q2 sería dominada por los Mercedes mientras que los Red Bulls parecían andar un poco escondidos.  Sergio Pérez y Daniel Ricciardo estuvieron excepcionales y pasaron el corte espléndidamente, lo mismo que Hulkenberg, habitual de la Q3 ultimamente, los Lotus  y Felipe Massa, quedándose fuera por primera vez en 2013 Alonso. No estuvo acertado en su vuelta, aún así, el coche no daba para mucho más.
 La Q3 vería un inicio espectacular de Vettel a punto de bajar del 1.40 con el resto a poco más de 3 décimas. En la segunda intentona Vettel apenas mejoraba, Rosberg fallaba, aunque no tanto como Hamilton, que se salía de la pista, en tanto que Webber se destapaba y bajaba del 1.40  para hacerse con la pole, esta vez sin excusas de KERS por parte de  Vettel. Tras los Red Bulls, los Mercedes de Rosberg y Hamilton, 5º  fue Kimi y 6º un excelente Hulkenberg en la misma décima que el inglés y el finlandés.  Algo más alejados Grosjean, Massa, Pérez y Ricciardo.

Mark Webber, autor de la pole.

 Tras las verificaciones, los comisarios detectaron que el fondo del Lotus de Kimi no pasaba el control de flexibilidad y lo relegaron al último lugar de la parrilla.  Al parecer, ello fue debido a que se rompió una pieza al paso por la tercera curva del circuito. ¿Qué hubiera pasado de suceder esto en carrera?  Pues que Kimi hubiera sido descalificado, Lotus habría recurrido y días (semanas seguramente) después, se reuniría el tribunal de apelación de la FIA y ratificarían o no la descalificación. En Malasia en 1999 Ferrari logró el doblete, fueron descalificados y posteriormente recalificados al aceptar la FIA las alegaciones de la Scudería. ¿No hubiera sido posible entonces, que el Lotus de Kimi Raikkönen partiera desde la 5ª plaza? Se arriesgaba a un castigo mayor, pero por otro lado podría obtener un mejor resultado. No sé si existía esa posibilidad, pero creo que es justo que la hubiera y que el equipo decidiera que camino tomar.
Domingo, se apagan los semáforos y los Red Bulls salen mal, sobre todo el del poleman Webber quien desciende hasta la tercera posición tras Vettel, que se vio favorecido por la corta recta de salida que impidió que ambos Mercedes lo superaran al encontrarse sin hueco. El peor parado fue Hamilton, que iba camino de la primera posición y,  al verse encerrado, cayó hasta la 5ª plaza tras Grosjean.  De modo que Vettel lideraba, seguido de Rosberg, Webber, Grosjean, Hamilton, Hulkenberg, Massa , Alonso, Pérez, etc…
 Felipe y Fernando lucharon durante la primera vuelta por la posición, saliendo el brasileño victorioso. A todo esto, Kimi decía adiós al tocarse con un Catherham en la primera curva. Más rápido que su abandono sería su estampida del circuito, sin nada que le pudiera interesar.

Raikkönen largandose a toda prisa del circuito.
Se largó al hotel en menos que canta un gallo. Button tenía un toque en la salida y paraba a cambiar el morro, con lo cual si ya tenía pocas esperanzas de lograr un buen resultado, ahora ninguna.
  Vettel empezó a largarse como tiene por costumbre mientras que por detrás estaba la acción.
Checo Pérez, contra todo pronóstico, entraba en la vuelta 5 a cambiar ruedas, abriendo la veda y cayendo hasta la 17ª plaza. Apenas dos vueltas después era Hamilton el que paraba y retrocedía hasta el 12º lugar. Sólo una vuelta después paraban Grosjean y Webber saliendo 8º y 9º respectivamente. Rosberg aguantaría hasta la vuelta 10 y sale 6º. Vettel, mientras tanto, a lo suyo, rodando más rápido que nadie a pesar de que otros tenían ruedas nuevas, para en la vuelta 15 sin perder posición y disipa cualquier duda sobre quién va a ser el ganador de la carrera, salvo accidente o avería.
 Alonso, tercero y sin paradas, para en la vuelta siguiente mientras que Massa aguanta hasta la vuelta 18 quedando la clasificación así: Vettel, Di Resta (sin parar), Rosberg a 25´, Webber, Grosjean, Sutil (sin parar),Hamilton, Massa, Hulkenberg, Bottas (sin parar) Pérez, Alonso etc…
 En la vuelta 20 Di Resta para, y Webber se ventila a Rosberg (los Red Bulls ya corren hasta en las rectas), y Alonso poco a poco va ganando posiciones, primero cae Pérez y después Bottas.
 Hamilton no podía con Sutil y, de su lucha se aprovechó Massa para adelantarlo. Una vuelta después caería Sutil a la vez que Alonso adelantaba a Hulkenberg.  Al final  Hamilton adelantaría a Sutil, a la vez que paraban por segunda vez en la vuelta 27 Hulkenberg y Pérez, teniendo un pequeño incidente en la calle de boxes, lo que acarreó una sanción para el alemán y su adiós a un buen resultado. Alonso aprovechó la segunda parada de Hamilton en la vuelta 29, se aupó al 6º lugar y se lanzó a todo ritmo a por su compañero Massa.
Los cuatro primeros, Vettel, Webber, Rosberg y Grosjean, realizarían sus segundas y últimas paradas poco después sin problemas y ninguno de ellos vio peligrar su posición, ni tampoco pudo mejorarla. Vettel, además de tener el mejor ritmo de todos, gestiono como nadie las ruedas,  y con 30´de ventaja podría haber puesto ruedas blandas o incluso hacer tres paradas, aunque optó por lo seguro y se fue tranquilamente a por su séptimo triunfo consecutivo y undécimo del año.



Massa brilló a gran altura en Adu Dhabi, aunque finalmente no pudo con Alonso.



 ¡Ah!,  esto en la cabeza, pero hay vida tras los cuatro primeros. Massa, que estaba realizando una de sus mejores carreras y plantaba cara a Alonso por primera vez en años (si exceptuamos Brasil 2012) rodaba 5º por delante del español cuando realiza su segunda parada en la vuelta 37, un poco antes de lo aconsejable quizás y demostrando el equipo muy poca fe en el brasileño, quitándoselo de en medio a Fernando para que este pudiera hacer más comodamente la mejor táctica, que era aguantar un poco más en pista para hacer la segunda parada a poco del final y “volar” con blandos camino del 5º lugar. Mientras tanto, Massa era 9º y vuelta a empezar. De modo que mientras Ferrari le despejaba el camino a su otro Ferrari, Bottas y Sutil se pasaban de frenada en su duelo por el último punto. Bottas por muy poco, y Sutil haciendo un recto descomunal saltándose la chicane de manera muy poco “sutil”. Mientras que Bottas en su maniobra cedía la posición ante Pérez , Sutil aprovechaba para mantenerse  delante de ambos. Mientras tanto, los comisarios hacían mutis por el foro.
  Alonso se estiraba hasta la vuelta 44, hacía una parada regular en 3´ y al salir de boxes vio como Vergne, intentando mantener la posición, lo mandaba fuera de la pista. El Asturiano no se achantó, mantuvo el pie a fondo y pasó con más riesgo del necesario, por delante. Era 7º, delante de él estaban Hamilton y Di Resta. Massa, adelantó a Vergne y se coloco en su posición final 8º, en tanto que Alonso se convirtió, gracias a sus neumáticos blandos, en el hombre más rápido en pista. Hamilton y Di Resta iban a caer, la cuestión era cuándo. Hamilton lo hizo en la vuelta 49 y en la 50 Di Resta.
 Vergne, sin ruedas, fue alejándose de las plazas de los puntos y en ellas entraron Sutil y Pérez, 9º y 10º respectivamente. Posiciones que invertirían en la última vuelta. Una última vuelta en la que Alonso volvió a marcar la vuelta rápida de nuevo, ya que no dejó de tirar por si le metían una sanción por su adelantamiento a Vergne . Divertida esta F1, en la que te echan de pista y encima te pueden sancionar.
 Al final la cosa quedó así: Vettel, Webber, Rosberg, Grosjean, Alonso, Di Resta, Hamilton, Massa, Pérez, Sutil, etc…
 Vettel y Webber nos obsequiaron con unos trompucos (esta vez sin sanción, menos mal) y Alonso al hospital al haber sufrido en su “excursión” unos 28G de compresión en su columna, unos 1300 kg de nada… pero bueno, que está bien el muchacho y lo veremos en Austin, Texas, el mejor circuito de Tilke. Ahí veremos si Vettel bate el record de victorias consecutivas, camino lleva. Aunque según se mire.  Ascari tiene 9 consecutivas y no 7, todo depende de si se cuentan o no las 500 millas de Indianápolis, que eran puntuables pero que se corrían con el reglamento yankee y los coches de F1 no eran competitivos allí. Por eso no acudían. Mejor que no se lo digan a Vettel, por si se ablanda y quiere dejar que Webber se despida con una victoria. ¡Hasta entonces!