martes, 29 de septiembre de 2020

GP de Rusia 2020

 



                 Hamilton contra Hamilton





O contra la FIA, pero teniendo en cuenta la ristra de favores que le llevan haciendo desde su debut, diremos que más bien él contra él.

Todo empezó el sábado cuando Hamilton rompió los pronósticos y mostraba un ritmo muy superior al de su compañero Bottas, normalmente muy a gusto en el trazado ruso, no olvidemos que en 2018 fue aquí donde Bottas, obedeciendo órdenes de equipo, cedió la victoria a Hamilton. No hay que acordarse sólo de Austria 2002, ¿ehhh?

El caso es que Lewis cometió un pequeño error al salir demasiado abierto de la última curva y, reglamento en mano, su vuelta era anulada. Esto sucedió en la Q2 en su primer intento y con “medias”. No problemo, había tiempo y no le hacía falta siquiera cambiarlas. De nuevo en pista y a toda pastilla, Hamilton volaba, pero Vettel se estrellaba y provocaba una bandera roja que abortaba la vuelta del campeón. Con 2´15 de tiempo y varios coches por delante en el carril de boxes, Hamilton no se la jugaba y salía con blandos para pasar el corte.



El ángel caído.


Finalmente hacía la pole con autoridad ante un decepcionante Bottas que se vio superado por un brillante Verstappen, que saca la esencia del Red Bull. Su compañero Albon calificó a 1”2 del holandés. Tanto Verstappen como Bottas partían con medias, la mejor opción.

Vista esta situación y dado que la primera frenada se encontraba a más de un kilómetro, Hamilton no quería dejar ningún cabo suelto y practicó la salida donde creyó iba a ser más parecido a su lugar de partida. Preguntó a su ingeniero si podía practicar un poco más adelante, al haber mucha goma en dónde tenía que hacerlo. Ante la respuesta afirmativa, avanzó un poco y realizó dicha práctica en un lugar prohibido. Malentendido con su ingeniero, pero error. Y doble, ya que lo hizo un par de veces. Total: sanción de 10 segundos, 5 por cada una.

Arrancada y Ham sale bien con sus blandas pudiendo aguantar el envite de Bottas, pero una vez paró y cumplió la sanción en la vuelta 16, pareció bajar los brazos. En ningún momento puso en aprietos ni a Bottas, ni a Verstappen. Acabó a más de 20” cuando la sanción era de 10”. De haber partido con medias -y haber aguantado la primera frenada primero- seguramente habría ganado, pero partiendo como partió, con las blandas, creo el resultado habría sido el mismo, salvo que habría luchado por el segundo lugar con Verstappen.



Verstappen sitúa al Red Bull un escalón, o dos, por encima de sus posibilidades.


La pataleta de Hamilton, aduciendo: “me quieren parar” y chorradas por el estilo, son las típicas de un niñato acostumbrado a que le dejen salirse con la suya. Y que no se queje, que le quitaron la sanción de dos puntos del carné de superlicencia -en su lugar multaron a Mercedes-, que lo habría dejado con dos, a punto de perderse una carrera si la volvía a armar. Ya que tanto lo quieren comparar con Schumacher, que le sancionen con cuatro carreras, como al Kaiser en 1994, a ver si gana el título. Y en su caso con el mejor monoplaza de largo, no como el Benetton B-194, no hay más que ver los resultados de los otros Benetton.

En la carrera Sainz se estrelló en la primera vuelta al irse largo y no esquivar el muro de la curva 2 a la hora de regresar a pista. Stroll, tocado de forma involuntaria por Leclerc, también abandonaba en la primera vuelta.

Leclerc fue uno de los héroes del día, sacando petroleo de un Ferrari que no da para más. Su sexto lugar está muy por encima de las posibilidades del coche. Su compañero Vettel, para nada manco, acabó décimo tercero a más de 50” de Charles. Está claro quién saca más partido de su coche a día de hoy si tomamos como referencia a sus compañeros: Verstappen y Leclerc.



Leclerc tiene cara de bueno, pero en pista es un monstruo.


Por eso Vettel, que se estrelló el sábado, no pudo celebrar como le hubiera gustado su GGPP 250, lo mismo que Kimi -aunque a él le de lo mismo- su 323, récord ex-aequo con Barrichello. En la siguiente cita, ya será en solitario. Y apunten el dato, si todo va como espero que vaya, Verstappen llegará a las 400.

El que no pudo igualar el récord de victorias fue Hamilton, que ya hemos dicho se lo tomó muy mal. Bueno, sin repetirme sobre quien es mejor de los dos, que a todas luces es el Kaiser, el hecho de que sus récords caigan es algo que a mí no me sorprende. Cuando Alonso triunfó tan joven ya pensé que esos récords podrían caer a sus manos. Luego pensé lo mismo con la irrupción espectacular de Hamilton. Incluso con Vettel después. Sólo hace falta estar donde cuadra. Y Hamilton, que pareció diluirse tras sus dos primeros años excepcionales, con Button poniéndole contra las cuerdas, lleva desde 2014 -siete años- con el mejor monoplaza de largo-, algo jamás visto. Rosberg le apretó, pero sin él y con su talento y con una leve oposición de Bottas, los récords eran sólo cuestión de tiempo.

Volviendo a sanciones, destacar Ricciardo, que por una tontería similar a la de Hamilton recibió 5” de castigo pero, a diferencia del inglés, se lo tomó con deportividad en una demostración de clase que deja al campeón -que ironía- a la altura del betún.



Checo Pérez demostrando por qué merece seguir en la F1.


Respecto a la carrera, se debe reconocer la gran actuación, aparte de las de Verstappen y Leclerc, de Checo Pérez, el primero tras “los tres tenores”, y eso que todavía no ha podido tener las mismas actualizaciones que su compañero Stroll. Veremos como le va cuando las tenga. Sea como sea, ha sido sustituido por Vettel en el equipo que, a partir de 2021 se llamará Aston Martin. No voy a cuestionar la decisión pero diré que, al igual que Nico Hulkenberg, Checo Pérez es merecedor de un asiento en la F1.

Antes de despedirme, felicitar al nuevo CEO de la F1, Stefano Domenicalli. Parece que antiguos miembros de Ferrari mandan en la F1: Todt, Brawn... y ahora Domenicalli. Pero que nadie se engañe, no va haber trato de favor a Ferrari ni nada por el estilo, como tampoco lo habría sobre Mercedes* en caso de haber entrado Toto Wolff, que fue vetado por Ferrari. No se lo tomó muy bien el amigo, lo que no me sorprende. Sea como sea, creo lo hubiera hecho bien, como espero lo haga Domenicalli. Pero si no trae de vuelta a las azafatas, de entrada, para mí, lo estará haciendo mal, muy mal.

Saludos cordiales.


*Como si la FIA y la F1 no favorecieran ya a Mercedes...

lunes, 14 de septiembre de 2020

GP de la Tosacana 2020



                   Emoción con cuentagotas






El que fue el GP 1000 de la historia de Ferrari -1027 en total- tuvo la emoción artificial que vino dada por las dos salidas extras que hubo a causa de sendas banderas rojas, de lo contrario, habríamos visto otro monólogo Mercedes tipo Spa.

Volviendo a la celebración de Ferrari, esta pintó el coche con el rojo burdeos del primer Ferrari, el 125S, junto al anagrama 1000GP en amarillo. Precioso, sin duda. Ciertamente es raro ver un monoplaza más bonito que el Ferrari. Los Lotus JPS también lo eran, el resto, salvo excepciones, no llegan a rivalizar nunca en belleza con los de Maranello, cuyo color rojo siempre los hace lucir más. Ya puestos, Ferrari debería haber equipado a los mecánicos a juego. Estas cosas, cuando se hacen, hay que hacerlas bien, lo mismo que la FIA -o quien sea- pintando el coche de seguridad de rojo. ¿Que coño pintas el anodino Mercedes de rojo? ¡Pon un Ferrari!

Para mi era toda una alegría ver a Mugello como escenario de un GP, algo que llevo deseando desde hace más de 20 años.



Será lento, pero mira que es bonito el "condenao".


Durante ese tiempo vi muchas carreras de motos y unas pocas del DTM/ITC, sin darme cuenta jamás de lo estrecho de la pista -salvo en la recta- y de su enorme velocidad. Esto último por no hacer la cuenta, ya que el 1´15 de la pole si bien fue más rápido de lo que pensaba, se debió a que no tenía los datos precisos. Me sonaba un 1´20 de Ferrari a principios de siglo, pero era 1´18. En ese caso, esperar 1´16 era lógico, y el 1´15 también. Volviendo a la velocidad, me suponía que era más o menos como nuestro Montmeló, no me esperaba ni en broma los 251,278km/h de la pole. Pero como dije, eso fue por no hacer el número.

El fin de semana fue un monólogo Hamilton que, las pocas veces que pudo quedar en entredicho su superioridad, la suerte del campeón -la flor en el culo si prefieren- le ayudó. Esto comenzó en la calificación con el trompo de Ocon que impidió a Bottas realizar su segundo intento. Intento que, aunque nunca lo sabremos, creo le habría dado la pole. A todo esto, Ocon parece a sueldo de Hamilton, ya que en Brasil 2018 se llevó puesto a Verstappen al desdoblarse, lo que permitió a Lewis ganar.

Antes de la salida, de nuevo el numerito de la FIA y Hamilton contra el racismo. Todos estamos contra el racismo, pero lo que hacen la FIA y Hamilton, por muy buenas intenciones que tengan, no sólo es estúpido y ridículo sino, hasta cierto punto, contraproducente. Por desgracia hay racismo en el mundo, y no sólo el de blancos contra negros que proclama el mulato este. Están los nacionalismos y muchos más. Mucho postureo pero luego se corre Baréin y Abu Dabi, donde la mujer es tratada como un perro. ¿Te vas a poner una camiseta a favor de la igualdad de las mujeres en esos países Lewis? No tienes huevos. Pero si lo haces, seré el primero en aplaudirte.



Chaval, aburres a un santo. Nada peor que un tonto con buenas intenciones.


Retornando a Bottas, cuando estaba por delante en la primera salida, la bandera roja permitió a Hamilton recuperar. Dicho lo cual, aunque creo que Bottas habría hecho la pole y demás, mi opinión es que en carrera Hamilton tenía más ritmo y, por tanto, no hay excusa, salvo la de que quizá exigimos a Bottas demasiado. Valtteri es un buen piloto, pero nada más, mientras que Hamilton es un crack, de los mejores de todos los tiempos, aunque no entre los cinco mejores por mucho que por números vaya a ser el mejor.

Lo más destacado de la calificación fue el 5º lugar de Leclerc y la máxima igualdad de la parrilla, ya que desde dicho lugar hasta el final había un segundo y una décima.

En la primera salida Bottas se puso líder y Verstappen, que había tenido problemas en parrilla, no se puso segundo al quedarse sin toda la potencia eléctrica. Acabó en la grava en una colisión múltiple en la curva 2 junto al ganador del GP de Italia, Pierre Gasly. Sainz se marcó un trompo y Vettel, que no lo pudo evitar, dañó su alerón.

Coche de seguridad, salida lanzada y... moquetazo en plena recta, ya que al retirarse tarde el coche de seguridad, Bottas, reglamento en mano, fue lento hasta justo la linea de meta, lo que confundió al pelotón que aceleró antes y formó una melé al frenar Latifi. Magnussen, Sainz y Giovinazzi fueron los daños colaterales. Todos fuera.



Sin comerlo ni beberlo, Sainz y Magnussen se quedaron a dos velas.


Hamilton -el de Fuji 2007 y Baku 2017- dijo: "esto es lo que pasa cuando el coche de seguridad apaga las luces tan tarde". Razón no le falta, pese a que él también la ha armado bajo el coche de seguridad.

Bandera roja y salida parada en la que Hamilton recuperó el mando para no abandonarlo jamás. Leclerc era tercero, haciendo soñar a los tifosi. Si ya había hecho podio y calificado quinto, ¿por qué no otro? Pues porque el nivel del Ferrari no es el que vimos en las primeras carreras, de media tabla, sino el de las dos últimas, del fondo de la misma, y el pobre Charles a partir de la décimo séptima vuelta -octava lanzada- se fue hundiendo en la tabla a razón de un puesto por vuelta hasta que paró en la veinte. Es evidente que la posición catorce en parrilla de Vettel es más representativa del verdadero nivel de Ferrari.

Ahora ya no me cabe duda de que el motor no es lo principal, es el coche, ya que tanto Haas como, sobretodo, Alfa, les ponen contra las cuerdas. ¿Seguro no pueden volver al del año anterior? No me sé el reglamento, pero me suena que no, por costes... ¡Vaya una chorrada! Como lo de los muletos y reglajes de agua que tantas veces he comentado.

La carrera iba liderada cómodamente por Hamilton, seguido de Bottas, Ricciardo, Stroll, Albon, Pérez, Norris, Kvyat, Russell, Vettel, Leclerc, etc... cuando el accidente de Stroll -al parecer por un pinchazo- provocó otra bandera roja.



Doblado quedó el Merced... ¡perdón! Racing Point de Stroll.


La nueva salida permitió ver a Ricciardo como fugaz segundo al superar a Bottas, para luego ser superado por este y por Albon en su sprint final para conseguir, al fin, su primer podio. Esta vez no había ningún Hamilton a su lado para impedírselo sacándolo de pista. De no haber abandonado Verstappen...¿quién sabe?

Pérez, Norris, Kvyat, Leclerc, Raikkönen y Vettel completaron los pilotos con derecho a puntos por delante de Russell y Grosjean, destacando a Kimi, que superó a Leclerc en la última salida y se despegó lo suficiente para sólo ceder ante él, ya que tenía una penalización de 5 segundos por entrada incorrecta a boxes, la misma que la FIA no le puso a Hamilton en Alemania 2018 en su típico doble rasero, en la que Hamilton y Mercedes se suelen salir casi siempre con la suya. De ahí, quizá, que Hamilton fuese a reclamar en Italia, sorprendido de que, por una vez, no le dejasen hacer lo que le sale de los cojones.

De modo que en el sprint final, los Ferrari no pudieron seguir el ritmo de Alfa Romeo. No hay excusa, por mucho que Kimi tuviera las ruedas un pelín más frescas. Triste celebración del GP número 1000 de la Scuderia, 435 con Enzo. Ferrari, por varias razones, no va a realizar su peor temporada, pero un nivel tan bajo no se veía desde 1992-93.



Raikkönen y el Alfa pudieron con los Ferrari. Ver para creer.


Y de aquí a Rusia, carrera en la que lo único que podemos esperar es que Bottas, a sus anchas en esa pista, le gane a Hamilton, porque todo lo demás, sería pedir demasiado.



En el nombre del padre. Mick Schumacher con el F2004 del Kaiser.



lunes, 7 de septiembre de 2020

GP de Italia 2020

 


                La segunda de “Minardi”





Y es que la primera victoria de Pierre Gasly es también la primera de Alpha Tauri, lo que otrora era Toro Rosso y antes, la entrañable Minardi. Red Bull la compró y salvo, pero a cambio de su alma. ¿Que ganan ellos con estos nombres? Yo creo que nada, pero donde manda patrón...

Antes de entrar en materia de la que ha sido la mejor carrera de la temporada, quisiera comentar unas cosillas, cosucas que decimos por estos lares.

La compra del equipo Williams por parte de Dorilton Capital salva al equipo y su nombre, al menos de momento, ya que no sé hasta que punto fiarme de Dorilton. Sea como sea, les deseo lo mejor, no me gustaría que otro histórico desapareciese. Ya hemos perdido a muchos: Brabham, Ligier, Lotus, Tyrrell, Minardi... toda una pena.

En consecuencia, Claire Williams abandona el equipo fundado por su padre, al parecer, por decisión propia para dejar a los nuevos dueños libertad total. También una lástima que ella no haya podido mantener el legado de Sir Frank, pero culparla es a todas luces injusto.

Yendo a otro histórico, al HISTÓRICO, Ferrari, es evidente la han pifiado con el coche de este año, cuajando uno de los peores, sino el peor, GP de casa de su historia. Vale que el motor es peor al del año pasado por no poder tener las especificaciones que tenía -ya sea por vulneración del reglamento o por interpretación- pero lo mal que va el coche no es sólo motor, ya que Alfa y Haas, con el mismo, le plantan cara. Y ya sabemos lo lejos que estaban el año pasado -y los demás- respecto a Ferrari. De haber hecho un coche decente, Ferrari estaría mucho más adelante, aunque lejos de Mercedes, ya que para eso se necesita algo excepcional, más aún con un motor a la baja.



La familia Williams se despide de una F1 cada día más huérfana.


No sé si Ferrari podría replantearse volver al coche del año pasado, porque peor no iría, pero creo que el estúpido reglamento lo impide. Ese reglamento que también impide usar muleto o cambiar reglajes en caso de lluvia. Pero bueno, si los equipos no protestan, será que están contentos así.

Los entrenamientos vieron la lucha por la pole entre los Mercedes, ganada de nuevo por Hamilton, aunque no por mucho, logrando hacer la vuelta más rápida de la historia de la F1 a 264,363km/h, dejando el récord de Kimi de 2018 atrás. Sainz, sin rebufos ni tonterías, fue el primero de los demás, toda vez que Red Bull no estaba particularmente fuerte aquí.

El GP tenía toda la pinta de ser un bodrio como el anterior, pero el coche de seguridad, entre otras cosas, se encargaron de cambiarlo.

En la arrancada Hamilton no dio opción, a diferencia de Bottas que, superado en primera instancia por Sainz, fue siendo adelantado sucesivamente por Norris, Pérez y Ricciardo, librándose de Verstappen por los pelos. Daba la impresión de que el coche tenía problemas. En principio Valtteri creía tener un pinchazo, pero no era el caso, y los problemas de temperatura no explican su pobre carrera. No progresó nada pese a tener un coche entre 0”5 y 1” más veloz que el resto.



Vettel sin frenos. De haber habido un muro...


La carrera marchaba tranquila, con Hamilton a su royo controlando y con Sainz como sólido segundo escapándose del pelotón. Como nota más destacada el pobre, lamentable y paupérrimo, rendimiento de los Ferrari, que encima de lentos, eran poco fiables, ya que el pobre Vettel se quedó sin frenos en la vuelta seis, abandonando luego de llevarse los corchos de la primera chicane al hundírsele el pedal. Leclerc, por su lado, no podía aguantar al Alfa de Raikkönen.

La tranquilidad acabó cuando Magnussen abandonó por pérdida de potencia aparcando el coche en un lugar seguro, pero claro, los comisarios decidieron meterlo a boxes sin necesidad ninguna y, por tanto, sacaron el coche de seguridad y cerraron el pit lane. ¡Inaudito!

Eso provocó el error de Hamilton y Giovinazzi, que hicieron lo esperado, parar. Creo que a todos nos sorprendió que el resto no lo hiciera. Pero al estar los boxes cerrados, había que permanecer fuera. A Ham y Giovinazzi les metieron una sanción de 10” parados en boxes. Puede parecer mucho pero es lógico. Lo que no fue lógico es que sancionaran casi de inmediato a Giovinazzi y se lo pensaran más con Hamilton.



Sainz fue el mejor tras los intocables Mercedes, pero la victoria se le escapó.


Cuando se abrió el carril de boxes, casi todos pararon -Stroll no- y la cosa se reorganizó así de cara a la resalida: Hamilton, Stroll, Gasly, Raikkönen, Giovinazzi, Leclerc, Latifi, Sainz, Norris, Bottas, etc... Los que estaban delante de Sainz -Ham y Giovinazzi aparte- era a causa de haber parado antes del coche de seguridad o, como Stroll, por seguir en pista sin parar.

Y de la resalida pasamos a bandera roja al empotrarse Leclerc en la parabólica.

Y con la bandera roja, todos a cambiar ruedas y a reparar, ya que el reglamento lo permite. Creo ya lo he comentado, pero así todo, no está de más repetirlo, en caso de bandera roja no se debe permitir cambiar ruedas ni reparar y, en caso de hacerlo, uno ha de ser sancionado. Esa chorrada de que es por seguridad, si hay un pinchazo o algo... por favor. Si pinchas en carrera o tienes desperfectos, paras y lo arreglas, o abandonas, no te paran la carrera para tí. Una cosa es el reagrupamiento del coche de seguridad, que es injusto pero que da emoción, y otra muy distinta lo de la bandera roja. Eso sí, mucha seguridad, pero luego no se dejan usar muletos ni cambiar reglajes de seco a mojado... en fin. Y respecto a la emoción, cambiar ruedas en bandera roja se la puede cargar, sino recuerden el GP de Mónaco 2011, en la que la carrera se detuvo a pocas vueltas del final por dicha bandera y, al permitir cambiar ruedas, nos quedamos sin el precioso final que teníamos entre manos, ya que el líder, Vettel, tenía las ruedas en las lonas, mientras que Alonso y Button, a su espalda, las tenían a medio uso y nuevas respectivamente. También puede suceder al contrario, cierto, pero justo no es. El coche de seguridad lo acepto, pero lo de la bandera roja, no. Al fin y al cabo, con coche de seguridad, si tienes que reparar, pierdes tiempo, a diferencia de con la detención de carrera.



Por una vez, la suerte no estuvo del lado de Hamilton... ni de Mercedes.


Respecto al numerito de Hamilton yendo a dirección de carrera durante el parón... no sé que pensar: o bien una pataleta de alguien no sólo acostumbrado a ganar, sino a salirse con la suya, o simplemente alguien que fue a enterarse de qué había hecho mal.

Tras estas disertaciones, volviendo a la carrera, esta se inició con otra salida parada, lo que fue genial y que vino de perlas a Gasly, que superó a un Stroll, que cambió ruedas en bandera roja con nada de pérdida, y que se hundió siendo superado también por los dos Alfas y por Sainz luego de una bonita lucha con este último. Hamilton, que partía primero, se puso último a casi medio minuto tras cumplir su sanción. Giovinazzi la realizaría dos vueltas después, justo al límite, heredando su lugar.

A Sainz le costó seis vueltas superar a Raikkönen para colocarse segundo, estando ya a 4” de Gasly. Y ahí empezó su recuperación a falta de veinte vueltas. Los 4” que atesoraba Gasly, más unas ruedas más frescas, le permitieron aguantar el tirón del hijo del “Matador” cruzando la meta victorioso con Carlos pegado a su alerón. No sé si con una vuelta más gana Carlos, pero sin duda que Gasly agradeció el banderazo.

Sainz me recordó a su padre, al no estar nada contento. Y es que acabar segundo tras el inaccesible Hamilton es genial, pero con él fuera de juego y siendo el más rápido, duele. La Diosa fortuna estuvo del lado del francés. Sin bandera roja lo mismo gana Ham, ya que con lo que tardaron en sancionarlo podría haber abierto un gran hueco y luego reengancharse.



Gasly, Sainz, Stroll, podio sin Mercedes.


Verstappen también abandonó, Stroll fue tercero por delante de Norris y un gris -que no negro, ¿eh?- Bottas, incapaz de aprovechar el mal día de Hamilton, que acabó séptimo tras Ricciardo, con un ritmo aplastante, aunque sus adelantamientos no lo fueron tanto.

Kimi, que al igual que Giovinazzi salió con blandos al final en una decisión, a mi juicio, arriesgada, acabó hundiéndose para acabar fuera de los puntos. Una pena para Alfa, claro que el otro Alfa, pero con “PH”, triunfó, y así se pudo escuchar el himno italiano en el podio, con la segunda victoria del equipo de Faenza en Italia, primera de su segunda “encarnación”.

¿Sigo siendo el único que lamenta el cambio de nombre? Lo digo por Minardi, no por Toro Rosso. Parece que sí. En general no me gustan esos cambios, aunque hay excepciones, como Renault, que el año que viene se llamará Alpine-Renault. Un nombre mítico que se incorpora a la F1 sin que Renault deje de estar.

Y ahora al GP de la Toscana, en Mugello, propiedad de Ferrari en su GP número 1000. Peor que en Monza no les puede ir, digo yo.

A todo esto, si bien se batió el récord de velocidad en entrenamientos, en carrera prevaleció la vuelta rápida de Barrichello de 2004 y el de distancia de Schumacher de 2003, este último ayudado por el coche de seguridad y posterior bandera roja. Aunque tenía la pinta de que iba aguantar un año más. Si aguantan el que viene, aguantarán muchos más, ya que los coches de 2021 se prevén mucho más lentos.

Nos vemos en la Toscana.

martes, 1 de septiembre de 2020

GP de Bélgica 2020

 



                  Carrera para olvidar






De modo que...¡olvidémosla!

Vayamos a lo interesante, al menos, a lo que a mí me lo parece:

1- Carlos Sainz no corrió al tener problemas su motor, o unidad de potencia -power unit-, que dicen los listillos. A ver cuando espabilamos, empezando por la FIA, siguiendo por los equipos y terminado por los aficionados. No es lógico que un piloto no corra por una avería poco antes del GP, es una estupidez. Es algo que se resuelve de un modo muy sencillo: MU-LE-TO, que no supone sobrecoste y que ahorra trabajo, mucho, a los equipos que, en caso de un daño en el chasis, como Alonso en Mónaco 2010, no tendrían que andar montando todo el coche de nuevo en un chasis “limpio”. Pudiendo, en ese caso, hacer los entrenos cronometrados -a saber cuantos puntos se perdieron por eso- y, en el caso de Sainz, análogo a los de Kimi y Grosjean -Malasia 2017 y Singapur y Brasil 2016 respectivamente-, habría podido tomar la salida.

¿Tenemos que esperar a que un candidato al título en la última cita se quede en boxes para reaccionar ante esta estúpida norma? Me temo que sí, dado que ni pilotos, equipos, ni aficionados, dicen ni mú. Al final tenemos la mierda que merecemos.



No hubo año peor en F1 para Ferrari que 1980 con el 312 T-5


2- Nadie esperaba a los Ferrari en Spa por mucho que ganaran el año pasado, pero que fueran tan mal... ni de coña. Lucharon contra los Alfa y los Haas, coches a los que deberían superar sin problemas. 13 y 14 en parrilla para acabar en carrera 12 y 13, que no fue peor por la ausencia de Sainz. Y vete a saber si Giovinazzi y Russell los podrían haber superado. Para encontrar un resultado conjunto peor, tenemos que ir al GP de Inglaterra de 2010 , donde Alonso y Massa fueron 14 y 15 respectivamente. Claro que ese año luchó Alonso por el título y ese GP fue una anomalía. De todas formas no llegarán al nivel de 1980, el peor año que han tenido, llegando a calificar hasta a 4 y 5 segundos de la pole -sin lograrlo el del vigente campeón Jody Schecketer en Canadá-, sin podios y con la quinta plaza como mejor resultado, todavía estamos lejos, muy lejos.


3- Lewis Hamilton logró el récord de la pole de Spa en 1´41”252 a 249,026 km/h, pero no nos emocionemos, en 2018 ya giraron el propio Lewis y los Ferrari de Kimi y Seb en Q2 en 1´41”5, pudiendo haber bajado a los 40 altos en Q3 de no haber llovido. De modo que récord sí, pero sin fliparnos.


4- Lewis de nuevo, no voy a repetirlo mucho, por no cansar ni perder el tiempo: Es un grande, muy grande, pero no tanto como Schumi, Senna, Fangio y Clarck, al menos, por muchos récords que logre. Creo que, en análogas circunstancias, otros grandes pilotos habrían logrado lo mismo que él, incluso más. Y es que no me imagino a Schumi -por ejemplo- perdiendo un título contra Nico Rosberg. Es más, ni me lo imagino llegando a la última cita jugándoselo con él, sino que habría ganado de calle varias carreras antes. Se podrían poner más ejemplos. Pero no es necesario, para eso vean mi artículo de agosto de 2019: “Los récords de Hamilton”.



Hamilton debería ir a Guinea Ecuatorial, para que vea la otra cara del racismo.


5- Otra vez Lewis: que no se ande con chorraditas con lo del racismo y diga no le parece razonable en Bégica suspender el GP. Si tan implicado está, que no corra él y se atenga a las consecuencias, pero que deje a los demás tranquilos. ¡Vale ya de tanta pamplina, que a “su” título no tiene huevos de renunciar!


6- Daniel Ricciardo fue el héroe del día, cuarto a 18” de Lewis -que no aflojó-, conservando las ruedas mejor que nadie y marcando la vuelta rápida en la última vuelta. Un par más, y se ventila a Verstappen.


7- Racing Point, lo miren como lo miren y lo vendan como lo vendan, el RP20 es un Mercedes W10 pintado de rosa. Si realmente quisieran hacer cumplir el reglamento, ese coche no podría correr y Mercedes, que no ha sido objeto de espionaje ni robo, sino que forma parte de esa trampa, también tendría que pagar de algún modo. Por menos otros fueron descalificados -Tyrrell en 1984- claro que también, por más -Mclaren en 2007-, casi se va de rositas.



Pues sí, hubo carrera, o al menos coches yendo deprisa.



8- Muy mal los comentaristas, todos, de Movistar F1, no por su comentarios, que pueden gustar o ser más o menos acertados, sino por no dominar, no querer hacerlo más bien, la lengua de Cervantes. Algún que otro anglicismo se puede escapar, nos pasa a todos, pero es ridículo decir: “warning” y “track limits”. Con lo fácil que es decir: “avisos” y “límites de la pista”. Y podría seguir con otros muchos más ejemplos, pero creo esos son los más ilustrativos. No creo ahora se justifiquen diciendo no hay palabra en español, como cuando se justificaron -sin razón- por decir: “drag” que, sencillamente, se dice resistencia. Lo de aerodinámica, dado el contexto, se sobreentiende. Puedo aceptar algún anglicismo, como “stop and go”, “slick” y cosas así, casi por costumbre, aunque se pueda decir en español, pero tanta tontería, no. Más ampollas y menos “blisters”, amigos.


Dicho lo cual nos vemos en el GP de Italia.


PD, ¿a alguien le importó el resultado de esta carrera? A mí, desde luego, no.