lunes, 15 de abril de 2019

GP de China 2019



                   Lección de Mercedes y Red Bull








Y lo pongo por este orden, porque en este tedioso GP número 1000 volvieron a ganar los de siempre, con su enésimo doblete, aunque Red Bull, dentro de sus posibilidades, estuvo excepcional, a diferencia de Ferrari. Los de la estrella aburren y asquean. Nada en contra de sus resultados, los merecen y punto, pero escuchar desde 2017 como pasan la presión a Ferrari -o a quien cuadre- dándolos por favoritos es, sencillamente, intolerable. Decían hace unos días -lloraban en realidad- que el Ferrari era muy rápido en recta -en los circuitos eso es lo de menos- y que no sabían como poder pararlos. Pues mucho no han tenido que forzar, por lo que se ha visto. Una vez más diciendo que no eran los favoritos, para luego pasearse
Así todo, como reza el titular, han dado una lección, y no sólo de rendimiento. En primer y segundo lugar con claridad, no se han despistado ni un momento en boxes, dando incluso prioridad al segundo, Bottas, para que nunca se viese acosado. En la segunda parada, hicieron la machada de parar a los dos coches a la vez para que el segundo perdiese menos tiempo. Eso permitió a Bottas salir con casi 5” sobre Seb, en lugar de los 2-3 que habría tenido. De no haber obrado así, y de haber parado antes a Hamilton al principio, Bottas habría podido ser incluso rebasado por Vettel. Eso es hacer las cosas bien, y no como Ferrari, que en Baréin se dejaron 7” en boxes con Vettel -adiós victoria- y que aquí, perjudicaron a Leclerc primero, para verse sorprendidos, de nuevo, en las paradas por Red Bull. Lo que habrían sido unos tercer y cuarto lugares pasaron a ser un tercero-quinto. Lamentable. Además, en su celo de proteger a Seb, se confiaron demasiado y recibieron otra lección de Red Bull, que paró a Gasly al final para hacer la vuelta rápida. Por una décima la consiguió. Bien, pues eso mismo es lo que no hizo Ferrari en Australia -y lo tenían a huevo- ni aquí, en ambos casos con Leclerc. Lo peor es que creo esos puntos perdidos -los de la vuelta rápida y los de la victoria de Baréin- poco van a importar al final, ya que Mercedes sigue pareciendo intocable. Ya veremos, pero es lo que hay y, por lo visto, lo que gusta, ya que cuando Ferrari parece fuerte, muchos comentaristas piden la reacción de Mercedes para que haya lucha, pero cuando es el revés -el 90% de las veces el último lustro- callan. Se ve que están la mar de contentos, satisfechos. Todo dominio que no venga de Maranello les “pone”.



Por errores ajenos a su persona, Sainz sigue sin puntuar, pese a tener el mejor Mclaren desde 2014



En los entrenamientos, igualdad entre compañeros, salvo en RB, con Verstappen imperial sobre un Gasly que no se encuentra a gusto. Bottas superó por 23 milésimas a Hamilton, Vettel por 17 a Leclerc, Ricciardo por 4 a Hulkenberg, Magnussen por 6 a Grosjean -en Q2- y Rusell por 28 a Kubica, que parece cada vez va entonándose más, a diferencia de Giovinazzi, que no parece confirmar sus progresos de Baréin. Al contrario, más bien. Cada vez más lejos de Kimi. Cierto que tuvo problemas y no pudo calificar, pero en carrera fue muy lento. Tanto Albon, que salia de Boxes, como Sainz, que junto a su compañero Norris fue embestido por Kvyat en la primera vuelta, fueron más veloces y lo superaron.
Respecto a la carrera en sí, esta fue casi 3 minutos más lenta que la de 2004 -el coche de seguridad virtual apenás costaría 15” como mucho- y la vuelta rápida se quedó a 2”5 de la de Schumi de ese año. Sigo pensando que los F1 son rápidos en calificación, pero que aún tienen que dar más de sí en las carreras. ¿Como de rápido sería a día de hoy un F1 con reglamento de 2004? Demasiado, sin duda.
Volviendo a los pilotos, creo que Haas sacaría más partido con otra pareja, ya que rara vez confirman en carrera su velocidad de los entrenamientos. Igual no soy justo del todo, ya que muchas veces es el equipo el que falla en preparación y planificación. Así todo, se me hace que algo más se podría sacar de ese coche.
Nico Hulkenberg de nuevo tuvo que abandonar sin poder demostrar nada, aunque parece que le mantiene el tipo sin problemas a Ricciardo, de lo cual me alegro, porque pienso que Nico es un gran piloto que nunca ha tenido una verdadera oportunidad y alguna vez tengo que acertar.
Kimi saca petróleo del Alfa, y más habría sacado de no haber tenido problemas de potencia en calificación, no pudiendo entrar en Q3. Parece que está a gusto Kimi en Alfa y así muestra su mejor versión.
Como curiosidad, en la vuelta de formación Verstappen y Kubica hicieron sendos trompos. Completo el del holandés y “semi” el del polaco. Hace unos años esto les habría hecho salir en la cola del pelotón. Ahora, por suerte para ellos, no. Claro que en el caso de Kubica y Williams, daría lo mismo. En carrera el polaco, al final estuvo más cerca de Russell de lo que parece. Veremos si sigue mejorando o, si por el contrario, su regreso sigue como hasta ahora, decepcionando. Y es una pena, porque Kubica es muy majo.



Williams es la nueva "Cenicienta", por mucho. Y es una pena.



En quince días veremos si merece la pena seguir viendo la F1, porque seis años aguantando el insolente dominio de Mercedes es, para mí, insoportable. Que son unos cansinos, vamos.

martes, 9 de abril de 2019

Previo China




                           Mercedes y lágrimas








No tengo por costumbre hacer previos de carreras, como mucho hablar de lo acontecido a media temporada, al margen de los avances y novedades de la misma y nada más
Lo que me lleva a hablar del GP de China antes de su celebración no es que vaya a ser el GP nº 1000, 973 de Ferrari y 652 mío, sino lo que han dicho en Mercedes Valtteri Bottas y Toto Wolff.
Vaya por delante que desde 2015 Mercedes, la arrolladora Mercedes, siempre ha mostrado respeto por el rival, un respeto que se pasó de la raya en 2017 transformándose en algo grotesco, ya que los claros dominadores -nadie ha dominado como ellos- se pasaron de listos “respetando” al rival, dando a entender que los otros -Ferrari en este caso- eran los favoritos y que ellos a ver que podían hacer, etc, etc... para luego arrasar. Dan asco.
Ahora dicen que Ferrari les sacaba en las rectas de Baréin de a 4 a 5 décimas y que claro, en la recta de China -y en la de Baku-, más lo bien que tracciona el Ferrari, no saben que van a poder hacer. Bueno, a la hora de la verdad eran 2 décimas y huelga decir que, de haber sido 4, Hamilton no habría pasado a Vettel ni en sueños.
Dicho esto, espero tengan razón y que Ferrari domine claramente en una pista de gratos recuerdos para ellos, ya que ahí logró el Kaiser su última victoria y Kimi les dio su triunfo número 200 en la categoría.



Hasta 40CV más que la competencia le dan algunos al Ferrari. Ojalá sea verdad...



Osea, que para que tengan razón Bottas y Wolff, Ferrari debe ganar con tranquilidad, es decir, que se van a escapar y van a poder hacer lo que hacen habitualmente: fallar en las estrategias y, a pesar de todo, lograr el doblete.
Si no es así, volveremos a ver la enésima queja sin motivo del equipo Mercedes, un equipo que lo hace tan bien, que aburre, aunque nadie duda se merezcan su éxito, al margen de alguna que otra ayudita de la federación. Aunque en este caso suele ser un habitual para quién domina y aquí, el culpable es más quien lo permite que quién lo hace.
Yo creo que pese al mal estado de forma en Australia -que espero no se repita- Ferrari puede ser competitivo y dado que el año pasado estuvo fuerte, lo puede volver a ser de nuevo, pese a que algunos consideren esa pista favorable a Mercedes. Yo a Mercedes, mientras no se demuestre lo contrario, la doy como favorita siempre, pero las esperanzas no me las quitan, y creo el Ferrari podrá ganar este fin de semana.
Pronto lo sabremos y deseo de corazón que los de Mercedes tengan razón. Aquí y el resto del año.
Difícil, pero soñar no cuesta nada, y ya va siendo hora de un cambio.

sábado, 6 de abril de 2019

Pareja de ases







Voy a hablar de las parejas de pilotos que considero serían la mejor combinación, la más interesante de cara al aficionado, aunque su convivencia en el equipo tal vez no resultara. Lo dividiré por décadas. Es decir, nada de fliparse con meter a Fangio y Senna en el mismo equipo que, en caso de coches modernos, no podría ser, ya que el “chueco” no cabría. Sólo parejas de pilotos de mismas épocas.
Empezamos cuando empieza el campeonato, la década de los 50. Nada mejor que la dupla Fangio-Ascari, los dos mejores pilotos de esa generación. Ascari era, según Fangio, su rival más temido. Nada mejor que tenerlos de compañeros para ver quien era mejor. Fangio-Moss, pareja que sí se dio, también era muy buena, aunque se rumorea había prioridad para el argentino en F1, a diferencia de en los sports.
En los 60 la pareja ideal sería Clark-Moss, sin desmerecer la dupla Clark-Surtees y, de haber sido posible al final, Clark-Stewart.
Para los 70, Stewart-Rindt hubiera sido genial, lástima la que no podría ser. Stewart-Lauda hubiera estado bien, aunque para cuando Lauda estaba en forma, Stewart estaba en casita. Lauda-Hunt hubiera sido muy interesante también. De las reales, Scheckter-Vileneuve fue perfecta, seguramente la mejor de la década, la más compensada y heterogénea. Claro que para el espectáculo, nada como Petersson-Villeneuve.
En los 80 la mejor, sin duda, existió: Senna-Prost, lo mismo que existió la que a mí más me gusta de todos los tiempos: Rosberg-Mansell, de modo que aquí es difícil elegir algo mejor. Rosberg-Villeneuve y Mansell-Villeneuve habrían sido espectaculares, nunca mejor dicho, pero por desgracia, no posibles.



Schumacher-Alonso, la pareja del siglo. No pudo ser.



La década de los 90 hubiera sido la bomba si Senna y Schumacher hubieran compartido monoplaza, no fue posible por la prematura desaparición del brasileño, pero era evidente que no iba a ser de ninguna de las maneras. A mí, lo que más me habría gustado sería tener a Mansell y a Alesi en el mismo equipo. Es verdad que no sería la mejor de las duplas, pero sí la que a mí más me habría gustado, como la de Mansell-Rosberg de los 80.
El nuevo siglo trajo una genial, que no funcionó y que, bajo mi criterio, no correspondió a la realidad viendo como fue la cosa más adelante. Hablo del dúo Alonso-Hamilton. Hamilton fue mejor, pero creo que ese año todo le salió bien. Viendo la trayectoria de ambos después, creo Alonso se habría acabado imponiendo de haber compartido equipo más temporadas. Pero no quiso.
Ver a Hamilton con Vettel hubiera estado muy bien, al igual que al germano con Alonso, pero la mejor, sin duda, habría sido una compuesta por Schumacher y Alonso, que hubiera sido posible si el asturiano hubiese aceptado la oferta que Ferrari le hizo en su momento.
En nuestra década actual, Verstappen-Hamilton sería perfecto, pero dudo este último esté por la labor, al igual que Mercedes, que de momento está plegada a los deseos de su -que casualidad- estrella. La pareja más sólida esos años ha sido, en mi humilde opinión, la de Verstappen-Ricciardo, sin desmerecer a la de Alonso-Button.
Ahora, tras la llegada de Leclerc a Ferrari como un soplo de aire fresco, se me ocurre que una dupla Leclerc-Verstappen sería la repera. Y esta es posible.
Y ustedes, ¿que dupla prefieren?

viernes, 5 de abril de 2019

Senna, Prost, Mansell, Piquet


                         La banda de los cuatro








Así se los llamaba, al menos en España, a estos cuatro pilotos que dominaron las temporadas de 1986-87. Pero no es de esas temporadas de lo que os quiero hablar, es -de nuevo- del peso, y utilizaré a estos pilotos para ello.
Es bastante cansino escuchar el mantra de hoy ese que dice: “10kg son 3 décimas”, sobre todo cuando se lo escuchas a ingenieros. Que lo diga algún periodista o piloto, por eso de justificarse -a pesar de que el peso de los pilotos está compensado desde 1995- vale, pero que circule por ahí como si fuese verdad verdadera... en fin. Y luego te “zascan” que 30CV también equivalen a tres décimas.
Para no repetirme, les aconsejo lean los artículos: “El peso en la F1 moderna” de junio de 2015 y “Peso y potencia” de junio de 2017. Como sea, un par de apuntes: en turismos se ha llegado a lastrar a los ganadores con 50kg y seguían ganando y el año pasado, en Supersport 300 -motos-, se cambió el reglamento a mitad de año y a pilotos ligeros, como a la postre campeona Ana Carrasco, se los lastró con 14kg. Uds. mismos.
Yo, harto de esta mentira, voy a establecer la comparativa entre estos cuatro pilotos, cuya masa corporal era -datos de 1989- 63kg Prost, 70 Senna, 72,5 Piquet y 77 Mansell.
A partir de ahí, con la premisa de los “super” ingenieros de hoy tenemos, regla de tres en mano, que Nigel se dejaba 0”135 en calificación respecto a Piquet, 0”21 con Senna y 0”42 con Prost que, traducidos a una carrera de 60 vueltas equivaldrían a: 8”1, 12”6 y 25”2 de pérdida de Mansell sobre los pilotos antes citados.



Mansell no optó al título en 1990, pero fue el Rey del espectáculo, con actuaciones de las que crean afición.



A partir de ahí saquen uds. las conclusiones que quieran. Pueden barajar los datos como deseen. Sin duda Prost siempre es el más favorecido. El propio Mansell lo comentó en los entrenamientos de pretemporada de 1990-91 en Estoril: “¿Los buenos tiempos de Prost respecto a los míos? Los 20kg de diferencia”.
Tal vez entonces eran 20 o Nigel se vino un poco arriba, pero queda claro que siempre estuvo en desventaja, aunque yo no creo fuera determinante. Pero el que así lo crea, entonces debe valorar aún más al León británico.
En 1990 Prost superó a Mansell claramente en Ferrari. ¿Claramente? En el campeonato sin duda, en cuanto a velocidad y rendimiento más bien al contrario, pero eso sería otra historia. Lo mismo respecto a Piquet, al cual Mansell superó con claridad en todo... salvo en el campeonato.
De modo que, por mucho que se repita una mentira, esta no se convierte en verdadera, a ver si nos vamos enterando.

lunes, 1 de abril de 2019

GP de Baréin 2019


                              Crueldad intolerable








Lo que les ha pasado a Charles Leclerc y a Ferrari este fin de semana en Baréin ha sido muy doloroso, muy cruel, pero nada nuevo bajo el sol, bajo la noche en este caso. Más duele que el heredero haya sido el mismo de siempre, Lewis Hamilton, que ultimamente gana mucho, demasiado y cuando no puede ganar, está al quite por lo que pueda pasar al no bajar los brazos nunca -como en Baku y Brasil el año pasado-, por si fuera poco, cuenta con el beneplácito de la FIA para seguir sumando, como en Mónaco y México 2016. En fin, que por uno u otro motivo, harta el muchacho, la suerte del campeón, dicen. En otros casos la caradura, pero eso es culpa de la FIA, no de él.
En Sakhir Ferrari mostró el nivel que todos esperaban de ellos en Melbourne, y es de desear que entonces se debiera a un mal día -como le pasó a Mercedes en Singapur 2015, por ejemplo- porque de lo contrario, no va haber campeonato y esto va a ser muy gris, en todos los sentidos. Es por eso esperamos ver al SF90 mantener este nivel en China y, a partir de ahí, en las demás citas.
Pese a que algunos dijeran que Mercedes -antes de encontrarse con la victoria- estaba minimizando daños porque Sakhir era una pista favorable a Ferrari, hay que decir que tras lo visto en Australia, nadie daba un duro por Ferrari tan pronto, ni siquiera ellos. Así que menos ir de listos.
Ferrari dominó con 1-2 todas las sesiones y parrilla, e iban camino al doblete -con vuelta rápida incluida- cuando se tropezaron con un gran Hamilton, que volvió a dar su mejor versión por la peor de Vettel primero, a lo que luego hubo que añadir el problema de motor que relegó a Leclerc, líder indiscutible, después.



Peinado a lo "Leroy Johnson", brillante conducción + fortuna = victoria.



Hamilton estuvo soberbio, sin lugar a dudas, pero se vio ayudado por tres zonas de DRS y que este, este año, es aún más efectivo. Debo decir que efectuó su adelantamiento por fuera de la pista, lo que debería estar prohibido, pero como todo el mundo traza por ahí, hay que aceptarlo, todo bien, pero no estaría de más que la FIA se encargase de que la pista se respetase y que penalizase de verdad a quién comete errores.
Al respecto de la perdida de posición de Seb, lo que nadie dice es que en Ferrari son unos estrategas geniales, pero geniales para sus rivales. En esta pista el undercut funcionaba de perlas, otorgando más de 3” y en Ferrari se dejaron comer la tostada dos veces, lo que a Vettel le supuso unos 7” perdidos respecto a Ham. No digo que se los tuviera que meter él a Ham, pero sí sólo se hubiesen visto sorprendidos una vez, habrían perdido sólo 3” y, en caso de una por otra, nada, y en ambas situaciones hoy se hablaría del triunfo de Vettel tras los problemas de su brillante compañero. Lo más grave es que esto le pasa a la Scuderia demasiadas veces. Nada extraño si tenemos en cuenta que en Australia regalaron la vuelta rápida. Pues de seguir así, hará falta que el coche sea muy superior para compensar los múltiples fallos estratégicos del equipo. No digo deban acertar siempre, pero tanta incompetencia ya desespera. No se trata sólo de criticar a Vettel por sus fallos -de Kimi no se hablaba- sino de criticar todos los fallos para mejorar, no sólo de quien nos apetece, simple y llanamente, por joder.



Verstappen no se cansa de equivocarse y de paso, de amargar la vida a los demás.



Leclerc, la nueva estrella de la F1, primer monegasco que hace una pole -99 piloto en total- y una vuelta rápida, pronto debería obtener su primera victoria. Es un soplo de aire fresco frente a pilotos como Hamilton, Vettel y Verstappen, que muchas veces dejan mucho que desear tanto dentro como fuera de la pista, con comportamientos y conductas totalmente fuera de lugar. La calma, la educación de Leclerc, es algo muy de agradecer en una F1 que desde hace décadas no tiene un campeón digno de ese nombre. Bueno, Nico Rossberg tal vez, aunque en pista también era un poco guarreras. Diría el último fue Button.
Hamilton deportivamente felicitó a Leclerc, pero es fácil ser magnánimo cuando ganas, lo bueno es serlo cuando sufres una dolorosa derrota. Y ya vimos como obra Hamilton cuando no se sale con la suya. Esas acusaciones a Ferrari de ir a sacar de pista a los Mercedes en Inglaterra el año pasado son una buena muestra de la falta de señorío del “Leroy” este de pacotilla. Lo mismo de sus mecánicos, aplaudir los “adelantamientos” a Leclerc de Hamilton y Bottas, por favor. Entiendo se alegrasen de la avería del Ferrarista, pero aplaudir eso es del género tonto. Ya estaba superado, ¿que coño aplaudís?
Volviendo a Leclerc, “chapeau”, falló en la salida, pero se recompuso recuperando desde la tercera posición a la primera como si nada. La suerte no le sonrió, pero parece ser que pronto lo hará.
Bottas fue una sombra de lo que fue en Australia y Verstappen, que no pudo acceder al podio por el coche de seguridad -pequeño consuelo para Charles- volvió a mostrar su peor cara en su incidente con Sainz. Luego la arma cuando lo sacan de pista a él, menudo imbécil. Lance de carrera dijeron los timoratos de la FIA. Eso hubiera valido si él no hubiera estado involucrado. Como he dicho varias veces, no se deben sancionar los errores, por tanto, no a los lances de carrera. Pero cuando un piloto tiene una tendencia liarla cada dos por tres -como es el caso- debe ser sancionado. Verstappen no sabe ceder y con ello provoca accidentes, al igual que Magnussen. Es por ello que se ha de tener tolerancia cero con ellos hasta que se calmen, sino la van a seguir armando, y no es de recibo.



Tras Leclerc, Hulkenberg fue el piloto del día, pero los Renault estaban programados para sólo 53 vueltas.



Respecto a los entrenos. Grosjean fue sancionado al estorbar sin querer a Lando Norris, lo que no le impidió a este el pase a la siguiente ronda. Digo lo mismo sobre esto que sobre los lances de carrera, mientras no haya una tendencia, no se ha de sancionar. Pero ya sabemos que por esto al único que no se sanciona es a Hamilton -Brasil 2018-, pero a los demás sí.
Destacaría de la carrera, aparte de Leclerc, a Hulkenberg, de 17º a 11º en la primera vuelta y luego primero de los demás hasta su abandono a poco del final.
Parece, y es una buena noticia, que Ferari y Mercedes están por delante igualados, y por detrás todos lejos -pero cada vez más cerca, salvo Williams- con Red Bull de puente. Esta vez Mclaren fue el cuarto equipo, pero está todo tan ajustado que lo puede ser cualquiera. De hecho, lo era Renault hasta su abandono, y Raikkönen con el Alfa acabó apretando de lo lindo a Norris.
Giovinazzi y Kubica mostraron una clara mejoría respecto a lo que hicieron en Australia, y eso siempre es motivo de alegría. Lo que no lo es es el agujero dónde se encuentra metido el equipo Williams. Todos esperamos se recuperen, ya que no sería bueno perder a un histórico como ellos.
Como curiosidades, aunque no lo reflejó el cuentavueltas, el Renault de Ricciardo lideró cuando Leclerc paró, aunque este se lo ventiló antes de pasar por meta.
Por otro lado, el récord de vuelta de Pedro Martínez de la Rosa de 2005 sigue vigente, aunque no sé por qué, al fin y al cabo, bajo esa misma configuración de pista Schumacher giró en 1´30”252 en 2004 por los 1´31”447 del español en 2005.
Dicho lo cual: “China, te esperamos bajo los mejores auspicios”.