miércoles, 26 de julio de 2023

GP de Hungría 2023

 



                                

                               De récord




Con su victoria, Max Verstappen lograba la décimo segunda victoria consecutiva de su equipo -y séptima suya a dos del récord de Vettel-, superando a Mclaren, con once seguidas en 1988. Veremos si pueden con las catorce -si quitamos las 500 de Indianápolis- de Ferrari entre 1952-53. Bajo otro rasero, con el triunfo de Pérez y Verstappen en las esprint de Baku y Austria, otros podrán aducir que ya lo han igualado.

El GP llegaba con dos novedades. La más destacada el regreso de Ricciardo tras ser licenciado de Mclaren, en una época en la que el alegre -a veces demasiado, rayando en lo cargante- Daniel Ricciardo, no lo era tanto. Nick de Vries, con un gran debut el año pasado en Monza, se hizo con el volante en Alpha Tauri para este año, pero los resultados no le han acompañado y ya sabemos que Helmut Marko no se lo piensa dos veces, ni da segundas oportunidades. A la mínima, a la calle.

La segunda novedad -que se iba aprobar en Imola-, concierne a la clasificación. Se pasaba de trece juegos de ruedas por fin de semana a once y obliga a usar compuesto en cada sesión calificativa: duros en Q1, medios en Q2 y blandos en Q3. Nada que objetar salvo el limitar el número de ruedas. Luego resulta que se permiten cambios de ruedas gratis bajo bandera roja por motivos de seguridad -cosa que no sucede en carrera, en la que si vas con las ruedas en las lonas no te obligan a parar- y ahora van y limitan el numero de ruedas. Si hablamos de seguridad para unas cosas, luego no podemos, por costes y caprichos, hacer lo contrario. Contradicciones de la F1.



Zhou estuvo impecable en los entrenamientos, pero falló en carrera.


Los libres, dominados por Russell, Leclerc y Hamilton respectivamente, fueron lo que no eran desde hacía décadas: indescifrables. Desde hace unos años hasta acá, los libres daban buenas pistas sobre lo que iba a suceder. En este GP no.

En calificación volvimos al absurdo de los límites de pista que, pese a lo que pasó en Austria este año, no se aplica en carrera. No con la misma severidad. No me creo que ni en Silverstone, ni aquí, ningún piloto no mereciese sanción por saltarse los límites de pista durante el desarrollo del Gran Premio.

En Q1 Zhou y Alfa avisaron de sus intenciones con el duro -fueron de los pocos en probarlo- y marcaron el mejor tiempo. Por el lado contrario Albon, Tsunoda, Russell, Magnussen y Sargeant, se quedaron fuera. A destacar que por milésimas Ricciardo pasó el corte y que Russell no lo logró al no poder realizar su última vuelta con normalidad al verse entorpecido -superado- por varios coches cuando la preparaba. Nada ilegal ni mal, salvo la estupidez de los pilotos de ir a dos por hora en las últimas curvas, provocando un atasco que muchos no están dispuestos a aceptar.

Los dos Alfa volvían a superar el corte en Q2, cosa que no hacía Sainz, que se quedaba por primera vez fuera de Q3 este año, luego de 33 seguidas, por apenas dos milésimas ante Alonso. Junto a él estaban: Ocon, Ricciardo, Stroll y Gasly.



Los Mclaren estuvieron muy fuertes en Hungría, pero no pudieron defender su récord.


La Q3 vio cuan fuertes estaban los Mclaren y Hamilton. Los primeros no pudieron frenar al holandés, pero Lewis sí, que con una vuelta magistral se anotó, por apenas 3 milésimas, su pole número 104; una de las más apretadas de siempre, no la que más porque eso es imposible. Triple empate a la milésima en Jerez 1997.

Verstappen, Norris, Piastri, Zhou, Leclerc, Bottas, Alonso, Pérez y Hulkenberg eran los siguientes más veloces.

La carrera, pese a lo apretado de la parrilla, tenía a Max como favorito, ya que tenía un mejor ritmo -eso decían- y Mclaren, que defendía el récord, iba a tener complicado pararle los pies. Y Lewis también, pese a que ambos, Mclaren y Mercedes, demostraran gran ritmo y poca degradación en otras ocasiones: Barcelona y Canadá MB, Silverstone Mc.

La verdad es que yo no esperaba tanta superioridad de Max en carrera, ni tampoco que, en la salida, superase a Hamilton. Y no sólo lo superó él, también lo hicieron los Mclaren de Piastri y Norris. Sainz, él único de arriba con blandos, pasó de undécimo a sexto, mientras los Alfa se iban para atrás, sobre todo el de Zhou, que no aprovechó su posición de partida -la mejor de su carrera- perjudicando a Bottas, que lo tuvo que esquivar, y luego -Zhou- provocó el accidente entre los Alpine, que tuvieron que retirarse.



Pole de Hamilton, la 104. De nuevo una pole MB en Hungría. Pero sufrieron en carrera.


La primera vuelta terminó con Verstappen al comando seguido de: Piastri, Norris, Hamilton, Leclerc, Sainz, Alonso. Pérez, Hulkenberg, Stroll, etc.… Y hasta las paradas apenas hubo cambios de posición. Pérez se ventiló a Alonso y Russell, totalmente fuera de posición, se situaba en los puntos en la vuelta nueve, tras partir décimo octavo. Los dos comenzaron con duras.

En la vuelta dieciséis y con Pérez pegado a su caja de cambios, paraba Carlos Sainz, lógico al partir con blandos, pero los demás no iban a tardar más de dos vueltas en hacer lo propio.

Sorprendía en Mclaren el “undercut” de Norris a Piastri, aunque luego este demostró ser más veloz. Total, que tras la primera parada -iban a ser dos- y en las que el que más estiraba -de los que iban con medios- era Max, la cosa estaba así en la vuelta veinticinco: Verstappen, Norris, Piastri, Hamiton, Russell -sin parar-, Sainz, Pérez, Leclerc, Stroll, Alonso, etc.

En apenas dos vueltas Pérez se cepillaba a Sainz y justo después Alonso hacía lo propio con Stroll -estaba acordado por ir con diferente táctica- justo cuando paraba Russell, reincorporándose décimo cuarto, siendo undécimo dos vueltas después. Antes del baile de la segunda parada, Russell había remontado tres puestos más y era octavo tras superar a Alonso, Bottas y Stroll.



"Tu primero Charles", parece ser el lema de Ferrari.


Las segundas paradas no cambiaban nada salvo que Ferrari se hacía un “undercut” -como antes Mclaren- en este caso para favorecer a Leclerc en detrimento de Sainz, justificándolo porque Charles había tenido una primera parada desastrosa. Parece que en Ferrari están muy a favor “del Principe” como así lo llaman en Italia -yo lo llamo “Marie Claire”- porque desde Austria parece todo gira en torno al monegasco. Al principio Carlos con más ritmo, por las ruedas, no vio como su compañero lo ayudaba, aunque se podía entender dada la situación. El “undercut”, no tanto. Así todo, al final Charles mostró un poco más de ritmo. Pero como tenía 5” de sanción por exceso de velocidad en boxes, cedió posición con Russell, que llegó a sus talones tras superar a Sainz con insultante facilidad en los compases finales.

Pérez primero, y Hamilton después, superaron a Piastri, que del podio pasó al quinto lugar, no habiendo más cambios pese a que el inglés recortó distancia con el Checo, aunque sin llegar a ponerlo en peligro.

De modo que Verstappen ganó, seguido de Norris -como en Silverstone-, Pérez, Hamilton, Piastri, Russell, Leclerc, Sainz, Alonso y Stroll como pilotos con derecho a puntos.

En el podio Norris la liaba y rompía el trofeo del ganador, que era de porcelana y está valorado en 40,000 €. Supongo lo pagará él o su equipo, a menos que esté asegurado. Gajes del oficio.



"Por superarnos el récord". Por eso Norris le rompió el trofeo a Max, ¿eh pillín?


Veremos si se corta la racha RB-Max en Spa o hay que esperar al parón veraniego. Max dice “volará” el Mclaren en Bélgica, pero el que voló fue él el año pasado, de modo que lo veo como favorito más que nunca.


viernes, 21 de julio de 2023

GP de Italia 1988

 



                           In memoriam




No hay mejor título que el que puso Gigi Corbetta en Motor 16 -in memoriam- cuando realizó la crónica de esta carrera. Era la segunda carrera de F1 sin Enzo Ferrari, y el primer GP de Italia sin él, y este no pudo tener un desenlace mejor. Bueno, sí, podía tenerlo mejor, con Ferrari logrando, además del doblete, los títulos de marcas y pilotos, pero la realidad era la que era y, pese a todo, como bien dijo Michele Alboreto al finalizar: “alguien nos ha echado una mano ahí arriba”.

De cualquier manera, Enzo se pudo ir tranquilo. No sólo había creado la fábrica de coches de carreras -y de superdeportivos de ensueño- más famosa y prestigiosa del planeta, sino que logró que esta le sobreviviera.

Respecto al GP en sí, empezó como la mayoría, con los Mclaren de Senna y Prost en primera fila con los Ferrari de Berger y Alboreto en la segunda. Al igual que en el otro GP “rápido”, el de Silverstone, Michele superó durante mucho tiempo a su compañero Berger en parrilla, aunque al final el austríaco se impuso. Al ser un GP de potencia, los Arrows BMW turbo eran la tercera fuerza, cosa que generalmente no era así.



Alboreto no ganó, pero puso las piedras para el triunfo de su compañero con su gran "rush" final.


La carrera fue un calco de muchas otras vividas ese año: los Mclaren Honda se largaron pese a los desesperados intentos del Ferrari de Berger por no perder comba. La superioridad de Mclaren ese año es algo que no se veía desde los albores del campeonato por parte de Alfa Romeo primero (1950) y de Ferrari después (1952-53), porque no sólo ganaban, sino que la diferencia respecto al primero de los demás era abismal.

Total, que Senna y Prost dominaban. De hecho, el brasileño lo tenía todo encarrilado sin necesidad de ayudas, la cual vino cuando Prost, con problemas de motor, se retiró en la vuelta treinta y cuatro.

Quedaban apenas diecisiete vueltas y la carrera, en fase de letargo casi desde el principio, tenía a Senna al comando con los Ferrari de Berger y Alboreto a 25” y 36” respectivamente, y entonces comenzó la carrera. Alboreto, que había estado ahorrando combustible -como todos los turbo, porque apenas tenían 150 litros para completar la carrera, menos que ahora- despertó y empezó a marcar un fuerte ritmo. Era un segundo por vuelta más rápido que sus perseguidores, los Arrows de Cheever y Warwick, y entre ¡dos y cuatro más veloz que el líder, Senna! Que estaba en modo ahorro.



Schlesser fue el tercer héroe del fin de semana. Los tifosi siempre le estaremos agradecidos.


Al empuje de Michele se le sumó el de su compañero Berger, so pena de verse superado, y estos se acercaron rapidamente al asrro brasileño, el cual parecía estar en dificultades, aunque en realidad estaba controlando la distancia. Berger se situó a sólo 5” a falta de cuatro vueltas con Alboreto 3” por detrás de este tras marcar dos veces sucesivas la vuelta rápida -la última de su carrera- tras recuperar 20” y 28” al brasileño los dos Ferrristas respectivamente en sólo once vueltas.

¿Podría producirse el milagro? Muy justas iban las cuentas y, apenas una vuelta después, Senna casi calcaba los tiempos de los Ferrari, con lo que todo parecía visto para sentencia.

Cuando Pepe Díez, el comentarista de TVE dijo los tiempos, se me acabó la ilusión, adiós a la emoción, los Ferrari no ganarían. Y justo entonces Schlesser, que sustituía a Mansell, convaleciente en Williams, se pasaba de frenada en la primera chicane y embestía al líder, sacándolo de pista. Los Ferrari eran 1º y 2º y Enzo Ferrari, desde el más allá, y todos los tifosi desde acá, disfrutaron del doblete de Ferrari en casa, en el GP de su país, en el mejor homenaje que la Scuderia pudo darle a su creador.

Esa fue la única derrota de Mclaren ese año y Berger, el piloto que más resistencia opuso al dominio anglo-nipón a lo largo del año, fue el merecido vencedor.



Uno de los podios más emotivos de Monza: Berger y Alboreto con Cheever de invitado de excepción.


Senna siempre arriesgaba en los doblajes, momento en el cual sacaba ventaja a sus adversarios -aunque no era el único- y algunos dijeron cometió un error por la presión de los Ferrari. Pero con la ventaja que tenía y las vueltas que quedaban, creo que fue un lance de carrera, como mucho un exceso de confianza.

Lo dicho, doblete de los Ferrari de Berger y Alboreto, no cabiendo yo en casa de gozo, teniendo que dar las gracias a mi hermano por decir que grabara la carrera, ya que no pensaba hacerlo, al prever otro paseo de los McHonda. También estaba encantado Pepe Diéz, tal y como demostraban sus emotivos comentarios.

Me encantó que ganase Berger, se lo merecía por sus actuaciones ese año, un piloto rápido y espectacular que me encantaba pero, con el paso del tiempo el cariño que le tengo a Alboreto se fue imponiendo y no me queda más remedio que poner un pequeño pero a aquella carrera milagrosa: Berger lo merecía más, cierto, pero que bonito hubiera sido que, en su despedida de Ferrari, en Italia, en Monza, de donde era Alboreto, este se hubiese llevado el triunfo. Al menos fue él, quien con su demoledor ritmo final, puso los cimientos para la victoria de su compañero, dando lugar a uno de los resultados más inesperados y memorables del GP de Italia a lo largo de su historia. Seguro que Enzo estaría de acuerdo.

In memoriam.

jueves, 13 de julio de 2023

GP de Inglaterra 2023

 


                               Histórico




O casi, por un lado Red Bull iguala la mejor marca de victorias consecutivas de un equipo con once, en su caso contando 2022 -las de Mclaren todas en 1988-, exceptuando que Ferrari ganó catorce seguidas entre 1952-53, aunque la marca se queda oficialmente en siete al incrustarse por medio las 500 millas de indianápolis, un anacronismo, pero es lo que hay y, por otro, los dos equipos históricos: Mclaren y Williams, brillaron con luz propia, sobre todo los primeros. No incluyo a Ferrari, porque Ferrari, la SCUDERIA, es EL EQUIPO, es la historia viva del automovilismo deportivo en general y de la F1 en particular y está por encima de esas consideraciones. Sería, en todo caso, EL EQUIPO HISTÓRICO.

Tras unos libres en los que el Williams de Albon exhibió músculo y en los que todos apuntaban a Mercedes como segundo equipo, llegó la hora de la verdad. Se preveían unas calificatorias en mojado, pero nada de nada, un poco de humedad más unas leves gotas marcaron la Q1, lo suficiente para hacerla emocionante, más aún por la bandera roja por el Haas de Magnussen a tres minutos del final, montando siempre lisas.



Norris estuvo excepcional, como su compañero. El cromado les dio suerte.


Dicho parón hizo que el último intento fuera el decisivo y en él, cayó por quinta carrera consecutiva Checo Pérez. Cierto, no en todas en Q1, pero en ninguna de ellas llegó a Q3. Salir el primero -por estar en peligro- no le ayudó, pero su vuelta no fue buena, como la de Fernando, que salió más atrás, pero este se libró por los pelos (19 milésimas). Al final hubo un poco de lio, pero es normal cuando los pilotos se comportan como domingueros. Habiendo el tiempo justo y con todos en pista porque ese era el intento definitivo, no puedes pretender ralentizar al final para apurar, porque los que vienen por detrás te van a adelantar, ya que de lo contrario no van a poder realizar su vuelta. Leclerc se molestó al ser superado por Sainz -el monegasco tenía preferencia- pero es que iba tan lento -los que le precedían también- que Hamilton y Verstappen también los pasaron. Hay que comportarse. Si vas clavado apurando, los que vienen por detrás no te van a respetar, porque no lo mereces, punto. A ver si de una vez los pilotos maduran y se comportan. Junto al desafortunado mejicano se quedaron: Tsunoda, Zhou, de Vries y Magnussen.

En una Q2 más tranquila y predecible palmaron Hulkenberg, Stroll, Ocon, Sargeant y Bottas; mientras que en la Q3 la pole fue para el de siempre, Verstappen. Su primer intento de 1´26”0, medio segundo por delante de Hamilton, no era tan impresionante al ser él el único con ruedas nuevas, pero en el definitivo sólo Norris pudo superar ese registro, logrando la pole provisional hasta que Max cerró su vuelta apenas 241 milésimas más rápido. Piastri, con el otro Mclaren fue tercero, delante de los Ferrari de Leclerc y Sainz, los Mercedes de Russell y Hamilton -todos ellos en 119 milésimas-, Albon, Alonso y Gasly.



Albon sensacional. Acabó octavo por delante de los Ferrari.


En la arrancada Norris superó a Verstappen, el cual apenas contuvo a Piastri, que precedía a Leclerc, Russell, Sainz, Alonso, Hamilton, Gasly, Albon, etc. Destacar que entre los citados, todos partían con medios salvo Russell, blandos.

En la vuelta cinco Max se puso en cabeza, aunque no se distanciaba de Norris, que estuvo muchas vueltas con DRS del holandés, mientras en la siete Hamilton superó a Alonso y en la dieciséis, Pérez entraba entre los diez primeros a costa de Albon.

La degradación era pequeña, como demostraba sobre todo Russell con los blandos, que por momentos se las tuvo tiesas con un Leclerc que quizá se defendió de forma un poco beligerante, aunque no hubo sanción.

Finalmente Charles paró a cambiar ruedas en la diecinueve, reincorporándose décimo segundo, en un intento de que Russell no le hiciera un “undercut” de esos. Pero estaba claro se precipitaron. Pararon muy pronto cuando todavía iban deprisa, lo mismo que Carlos, que mantenía a raya a Hamilton, aguantando apenas ocho vueltas más, reincorporándose décimo segundo, cuando Leclerc ya era entonces décimo. Russell paró dos giros después que Carlos y puso medias -los Ferrari duras- y se intercaló entre ellos pese a su pésima detención, aunque rápidamente adelantó a Leclerc haciéndole un magnifico exterior en Luffield.



Muy bien Russell. Gran exterior a Lelcerc y más veloz que Hamilton. Pero vino el pace car...


A continuación pararon Piastri, Gasly y Albon, todo normal, pero las cosas cambiaron cuando en la vuelta treinta y tres salía el coche de seguridad por las llamas del Haas de Magnussen. Verstappen, Norris, Hamilton y Alonso, fueron los únicos de cabeza que pudieron aprovecharse de esta circunstancia -Leclerc también, pero para su segunda parada- poniendo todos ellos blandas a excepción de Norris y Charles.

La carrera se relanzó en la treinta y nueve por este orden: Verstappen, Norris, Hamilton, Piastri, Russell, Alonso, Sainz, Pérez, Albon, Leclerc, Gasly, Stroll, etc.

Max tomó las de “Villadiego” mientras Norris aguantaba como podía los envites de Hamilton, que sacaba partido de sus blandas por las duras de su compatriota. Norris estuvo contra las cuerdas, pero aguantó y para cuando llegó el DRS, sus ruedas estaba a tono, a diferencia de las de Ham, y se acabó la lucha.

Por detrás Checo pudo con Sainz primero y con Alonso después. Cuando el Checo adelantó a Carlos, lo sacó de trazada y este, al ensuciar sus ruedas duras y gastadas, fue superado también por Albon, Leclerc y Gasly, aunque a este le devolvió el adelantamiento y, justo después, Stroll sacaba al francés de pista y le dañaba el Alpine, teniendo Pierre que abandonar.



Norris y Hamilton las tuvieron tiesas, pero al final se abrazaron. Veremos si eso sucede cuando sean rivales de verdad.


Ya no hubo más cambios y tras la bandera pasaron: Verstappen, Norris, Hamilton, Piastri, Russell, Pérez, Alonso, Albon, Leclerc y Sainz.

Nos vemos dentro de quince días en Hungría, donde la única certeza es que Verstappen es el favorito, mientras Mclaren y Williams deberán confirmar sus progresos. A priori Aston volverá a ir bien, mientras en Mclaren son cautos, ya que dicen su coche no va bien en curvas lentas. Mercedes debería estar ahí y Ferrari es toda una incógnita. Chao, mao.

jueves, 6 de julio de 2023

GP de Austria 2023

 



                             Max se sale




Pero no de pista, a diferencia de la mayoría, que lo hicieron muchas veces, dando lugar a un cúmulo se sanciones por exceder dichos límites sin precedentes. Es cierto que hay que respetar los límites de pista, pero lo visto este fin de semana en Austria fue un esperpento. Para no excederme, decir que salir ancho de pista haciendo más metros no lo veo tan mal, a diferencia de si acortas. Si excediéndote como pasa hoy día por encima de los bordillos no cuesta tiempo -y no se gana- tampoco me importa, pero si se gana tiempo, la cosa cambia. Pues si es así, muy fácil, o bordillos infranqueables, o grava, o hierba. Más fácil imposible. Por cierto, no es de recibo que sólo se sancionasen los límites de las curvas 9 y 10, porque la 4 muchos se la “comían” y no pasaba nada.

Tampoco es de recibo es lo vivido en esta carrera, con montones de vueltas anuladas en entrenamientos, sino que se lo digan a Pérez y Hamilton; y en carrera -pero no en la esprint, que curioso-, como bien saben Hamilton -de nuevo- Sainz, Gasly, Albon, Sargeant, de Vries, Magnussen, Tsunoda y Ocon. Tsunoda se llevó 15” de penalización y Ocon, nuevo récord, 30”. El resto entre 5” y 10”, teniendo que esperar para saber la clasificación final a causa de tanta revisión, revisión pedida por Aston Martin. Están en su derecho y tienen toda la razón, lo malo es que cuando equipos y pilotos entran al trapo de las sanciones, estas nunca acaban. No se busca hacer lo correcto, sino obtener beneficio. Hay que saber cuando parar. Si hay normas absurdas, mejor buscar soluciones que sanciones. No creo los pilotos sancionados por exceder la pista ganasen nada determinante, ni siquiera Ocon, a diferencia de Hamilton en Baréin 2021, que si ganó tiempo acortando la pista y lo único que hicieron los comisarios, luego de superarlo veintinueve veces, es decir que no lo hiciera más. No actuaron bien.



Hamilton y sus declaraciones. ¿Escuchará lo que dice?


Y tampoco actuó bien Hamilton cuando, antes de iniciar los libres del GP, se marcó unas declaraciones totalmente surrealistas, pidiendo a la FIA más control sobre los equipos -en este caso poniendo fecha para el inicio de los coches del año próximo- para hacer la F1 más igualada. Con el control presupuestario y los controles y límites de uso del túnel de viento, la FIA ya lo intenta, algo hasta entonces inédito en la F1. No hace falta más, es más, yo estoy en contra, ya que creo debe ganar el mejor y no se deben limitar pruebas y demás. Pero el problema es quién reclama esto: lo reclama el piloto que ha estado en el equipo más dominante de la historia. Entonces no le importaba la igualdad. Alguien que dice algo que no es cierto, no necesariamente es un mentiroso, lo mismo que cuando alguien dice una tontería, no tiene por qué ser tonto. En el caso de Hamilton, lamentablemente, lo es. O bien se piensa que los demás somos tontos y que no hubo superioridad de Mercedes desde 2014 hasta 2021, el último año ya con Red Bull casi parejo, o bien se cree que los éxitos de su equipo se debieron más a su talento que a la superioridad mecánica de que disponía. Si bien es de tontos pensar que Hamilton no es un fuera de serie, también lo es el no reconocer que él es el piloto que mejor material ha dispuesto durante más tiempo en la F1. Así que Hamilton, por favor, deja el ridículo para tus modelitos, no cada vez que abras la boca.


Viernes


Max se hace con la pole por apenas 48 milésimas sobre Leclerc y 190 sobre Sainz. Los Ferrari acechaban, con Norris cuarto precediendo a los Mercedes de Hamilton y Russell, los Aston de Stroll y Alonso, el siempre veloz Hulkenberg, Gasly y Albon, cada día reivindicándose. Pérez hubiera luchado por la pole, como poco hubiera sido cuarto, pero la pifió con los límites de pista y calificó décimo quinto, al anularle sus vueltas.


Sábado


Hulkenberg voló el sábado sin la fortuna que mereció. Se le fue el podio por la degradación.


Nueva “pole” de Max, que casi iguala el tiempo del día anterior pese a que la pista estaba, a priori, peor, ya que llovió y se inició la cuali con esta húmeda. Pérez lo acompañó en primera fila, aunque a medio segundo, un mundo en esta pista. Norris y Hulkenberg -vaya con el tío-, se quedaron en segunda fila, siendo la tercera de Ferrari, de nuevo con Leclerc por delante, pero como molestó a Pisatri, retrocedió a noveno. No sé si esa molestia influyó, lo cual podría haberlo exculpado, como parece ser hicieron con Verstappen, pero por reiteración -molestó a Norris en Mónaco- es evidente merecía la sanción. Alonso, Stroll, Ocon y Magnussen completaban los diez mejores, sin Mercedes: Hamilton por saltarse los límites de pista y Russell por problemas mecánicos. La norma de limitar neumáticos perjudicó a quienes no tenían juegos nuevos de blandos. De los de Q3 del viernes sólo se salvaban Verstappen, Leclerc y Norris. Esto fue uno de los motivos por los que Sainz no calificó el sábado más allá del sexto, al ser más lento con blandos usados que con medios nuevos. Es evidente no tuvo suerte, ya que tanto en la Q1 y Q2, como luego en la minicarrera, pulverizó a Leclerc.

La minicarrera, o la nada, ya que no cuenta a efectos estadísticos, se inició con el suelo húmedo y secándose. Todos arrancaron con intermedios y ganó con facilidad a Verstappen, sólo estorbado un poco en la arrancada por Pérez.

Al principio Hulkenberg fue segundo y rodaba casi al ritmo de Max, dejando atrás al dúo Pérez-Sainz, hasta que se le gastaron las ruedas y optó por poner blandas. Un poco antes lo hizo Russell -que al principio se las vio con Magnussen- cuando rodaba décimo y estaba atascado tras Ocon, Leclerc y Norris.



Mala fortuna para Sainz, el más veloz de los Ferrari, se quedó sin premio por errores propios y ajenos.


Una vuelta después paró Hamilton, pero este no tuvo nunca el ritmo de Russell, que era el más rápido en pista, con Hulkenberg y de Vries rodando a un ritmo similar.

En cabeza Max no paraba, no le hacía falta, ni tampoco Pérez, Sainz, Stroll, Alonso, Ocon y Norris. Si bien los tres primeros tenían margen de sobra, a partir de Stroll no tanto, ya que a Hulkenberg le faltó una vuelta para superar a los dos Aston. Como fuere, bien por Nico, que acabó donde iba cuando paró. De no haberlo hecho, habría acabado peor, dada su gran degradación.

Ocon acabó séptimo por nueve milésimas ante Russell, el primero y único que sacó tajada de poner ruedas de seco. Hamilton, sin el ritmo de Russell con lisas, ni se acercó a los puntos, lo mismo que un gris Leclerc.

Antes de ir al “día del señor”, recalcar que no hubo ninguna sanción ni advertencia por límites de pista en la esprint, lo que choco mucho teniendo en cuenta lo que se vio antes y, sobretodo, después, ya que el domingo hubo un montón de sanciones. Y eso a pesar de estar la pista húmeda. O quizá por eso, ya que tal vez los pilotos no atacaron los pianos al estar estos más delicados en esas condiciones.


Domingo


Max sale y se va, aunque dejó liderar a Leclerc unas cuantas vueltas al parar este -y unos cuantos más- bajo el coche de seguridad virtual. Esto evitó el récord de vueltas consecutivas liderando de Max. Por lo de más, nada de nada.



La FIA ratificó a Norris su sanción de Canadá. Aquí, sin embargo, se beneficiaba de una para ganar un puesto, de quinto a cuarto, el mejor del año.


En Ferrari hubo “tangana” por no dejar a Sainz atacar a Leclerc cuando iba más rápido y, además, al hacerlo parar tras su compañero con el “virtual”, perdiendo un montón de segundos, acentuada la cosa porque ambas paradas fueron lentas. Pasó en pista a Norris, Hamilton y Pérez para situarse tercero. Su segunda parada, teniendo que estar 5” retenido, le costó, aparte de los cinco, al menos un par más, saliendo de nuevo tras Norris, al que superó de inmediato. Luego se las tuvo que ver con Pérez, con mejores ruedas y coche el mejicano, al cual hizo sudar para adelantarlo. Y todo con absoluta limpieza por ambas partes. Lo mejor de la carrera. ¿El resto? Pues casi que da igual. Pérez remontó de décimo quinto a tercero con la facilidad que no tuvo ni en Barcelona, ni en Montreal, toda vez que Max paró a poner blandas para hacer la vuelta rápida al final. Si el mundial estuviese apretado se puede entender, pero no así. Si RB llega a fallar y gana Charles, la cara de tontos de él y de su equipo no se les iba a borrar nunca. Una cosa es parar a por la vuelta rápida cuando no te juegas nada, y otra esto. Recuerdo Silverstone 2020, cuando Max segundo y sin “nada por delante y nada por detrás” que diría un mago, paró para hacer la vuelta rápida, con la mala fortuna de que esto le costó el triunfo, ya que Hamilton pinchó y cruzó meta apenas 5” por delante. Pero eso fue mala suerte, algo que no puedes controlar. Sin embargo, lo de este fin de semana no me pareció muy lógico.

Con las sanciones puestas durante el trascurso de la carrera, el orden de llegada fue: Max, Leclerc, Checo, Sainz, Norris, Alonso, Hamilton, Russell, Gasly, Stroll, etc... Pero tras la reclamación de Aston el orden fue: Max, Leclerc, Checo, Norris, Alonso, Sainz, Russell, Hamilton, Stroll y Gasly.

En siete días no vemos en casa de casi todos, en el GP de Inglaterra. No puedo despedirme sin reírme del corte que le pegó Totto Wolff a Hamilton durante la carrera, cuando este no hacía más que quejarse del coche. “Ya sabemos que el coche es malo, pero condúcelo”, pero lo que quiso decir en realidad es: “conduce y calla”.



"Deja de quejarte y conduce", debe pensar Totto de Ham. Es lo que tiene que aguantar a cambio del gran talento -no en el vestir- del as británico.


Nos vemos en la pérfida Albión, a ver si alguien es capaz de parar a los Red Bull. Se supone que Mercedes irá bien en “casa”, que también es la de RB, por mucho que corran bajo bandera alemana y austriaca respectivamente.

P.D. si bien me ha parecido una parodia esto de los “fuera pista”, creo los pilotos, al no haber barreras -como en una pista urbana-, apuraron en demasía, de ahí tantas sanciones, muchas por apenas unos cms. Seguramente sea más difícil apurar contra una línea que contra un raíl, pero ya sabían lo que había. Pero bueno, esto me da la razón ante otros aficionados, que no tienen reparo en decir que los pilotos trazan al milímetro, vuelta tras vuelta, cuando a todas luces no es así. A los hechos me remito.